Moriyón: "En mayo solo habrá dos opciones de gobierno: Foro o un frente de izquierdas"

"Nosotros podremos cometer equivocaciones, pero no actuamos como marionetas de Oviedo"

"La izquierda demagógica y la desmemoriada actuarán en bloque para la investidura de alcalde"

Por Marcos Moro en El Comercio

«El 24 de mayo habrá muchas papeletas electorales, pero solo dos opciones de gobierno: Foro o un frente de izquierdas». Carmen Moriyón lanzó ayer ese mensaje nada más ser proclamada presidenta y candidata a la Alcaldía de Gijón en el primer congreso local de su partido con el respaldo de 254 compromisarios (también hubo 10 votos en blanco y 3 nulos). «El resto solo lucharán por tener una representación testimonial en la futura Corporación», expuso sin mencionar el nombre de ningún partido.

 

La alcaldesa dedicó buena parte de la intervención con la que cerró el cónclave en el recinto ferial Luis Adaro a «poner las cartas encima de la mesa» y explicar a la militancia a qué se va a tener que enfrentar en las urnas el proyecto reformista que encabeza: una convergencia de grupos de izquierda. Según remarcó, los gijoneses tendrán que elegir mayoritariamente en pocos meses entre «la alternativa de Foro, como garantía de un sistema pluralista, respetuoso con la sociedad y centrado en introducir reformas que acaben con los privilegios y extiendan el bienestar por igual por toda la sociedad; o la visión radical de un frente de izquierdas que veremos por primera vez actuando en bloque en la votación de investidura de los alcaldes».

 

Dentro de ese frente de izquierdas la regidora diferenció entre la «izquierda demagógica» que asocia a la irrupción de Podemos y la «izquierda desmemoriada» que identifica sobre todo con la opción del PSOE, aunque también con IU. De los primeros criticó que «han aprovechado la desesperanza y el hartazgo que generan años y años con un desempleo elevado y recortes en los servicios públicos, para tirar por la calle del medio y hacer promesas maximalistas que nunca podrán cumplir». Y de los segundos afirmó: «Al cambiar de rostros tienen el atrevimiento de olvidarse de todo el paro que creó, las empresas que cerraron y los sacrificios que impusieron. Y ahora se presentan como remedio de todos los males. Por su trayectoria, bien sabemos que son el problema y no la solución».

 

Moriyón argumentó que en anteriores elecciones las distintas izquierdas podían confluir en una propuesta moderada. Sin embargo, ahora el escenario ha cambiado: «Todos los líderes de ese espacio ideológico compiten por ver quién presenta un perfil más radical». «No nos engañemos, no habrá centro-izquierda en Gijón, ni siquiera la oferta de izquierdas que hemos visto hasta ahora, sino una amalgama de discursos radicales que convergerán para tratar de hacer alcalde a la lista más votada de ese espectro ideológico», vaticinó.

 

Continuistas y radicales

Para competir con ese frente de izquierdas, resaltó que «hay una política posible en Gijón, que pasa por la austeridad de la Administración para poder destinar recursos a los programas sociales y a los planes de empleo». Una política que reconoció que «no es de relumbrón y carece de edificios singulares para causar asombros a los visitantes», pero que en cambio tiene entre sus prioridades «exigir al Principado y al Estado un trato similar al que reciben ciudades del peso y la relevancia de Gijón por parte de sus respectivas comunidades autónomas y del Gobierno central». Una política, concluyó, «sin redentores demagógicos, ligada al trabajo callado de cada día», y «apoyada en unas empresas municipales limpias de corrupción que han logrado que el Ayuntamiento de Gijón sea el que más invirtió de toda la región durante el presente mandato».

 

La regidora también comparó en otro momento de su discurso a los partidos que fomentan el continuismo y a los nuevos grupos radicales. «Ambos tienen en común la irresponsabilidad», opinó. «Unos no quieren corregir los defectos e imperfecciones del presente, porque defienden sus prebendas; y los otros, con un afán justiciero sueñan con derribar todo, partir de cero y crear un modelo de ciudad y hasta un sistema político que sea la envidia del mundo entero, aunque al final acabaríamos dando lástima», agregó.

Frente a esas opciones, destacó que «Foro no está agarrado a los privilegios y tiene una sincera voluntad de reforma». «No pretende empezar desde cero, pero tampoco quiere instalarse en el gobierno para quedarse cruzado de brazos», abundó.

 

Y siguió marcando diferencias con el resto de formaciones políticas: «No vinimos aquí para vivir de esto. No hacemos carrera política. Vinimos a trabajar por los gijoneses, por nuestra tierra. No buscamos el aplauso. No hay mayor recompensa que cumplir con el deber, y poder volver a nuestra profesión con la conciencia de haber acabado con vicios e irregularidades que había en el Ayuntamiento».

 

La cabeza de lista de Foro también sacó pecho por la satisfacción de «haber multiplicado los recursos para los más necesitados y haber aplicado reformas urbanas invirtiendo el clásico orden de prioridades: primero, los barrios; luego, el centro».

 

«En las elecciones de mayo se dilucida el mantenimiento de estas políticas o la vuelta al endeudamiento, al despilfarro, al clientelismo, al enchufismo y al abandono de los barrios», expuso ante militantes y simpatizantes. Detrás de las urnas de mayo también aseguró que los gijoneses «nos jugamos contar con un plan de vías para todos, o un bodrio de plan para dentro de 20 años». Pero, sobre todo, subrayó, se decidirá entre el mantenimiento de un sistema plural, con una sociedad civil fuerte y vigorosa como corresponde a una democracia liberal y progresista; o el cambio de Constitución, el arrinco-

namiento de la iniciativa privada, el dirigismo de los gobiernos, la subida de impuestos para las clases medias, la vuelta a los ruinosos monopolios públicos y la demagogia en los púlpitos».

 

Lágrimas por Miguel Conde

Carmen Moriyón también reivindicó «la plena autonomía municipal» con la que actúa Foro a diferencia de otras fuerzas políticas, en clara alusión al PP, donde «las principales decisiones vienen cocinadas desde Oviedo». «Os puedo asegurar que todas las decisiones municipales las tomamos desde el equipo de gobierno sin ninguna sugerencia externa. La alcaldesa y los concejales formamos un colectivo que decide sobre cada cosa». Y continuó: «Nosotros podremos cometer equivocaciones, pero no actuamos como marionetas». En su opinión, «lo más grave de la sumisión de otros grupos políticos gijoneses a sus direcciones regionales instaladas en la capital de Asturias está en los silencios que guardan ante el trato de otras administraciones».

 

No pudo evitar que le temblase la voz y le saltasen las lágrimas cuando recordó la figura de Miguel Conde, fundador de Foro y secretario general del partido fallecido en agosto.