Hace dos años tuve el honor de visitar Panamá. Conocí una nación pujante, empeñada en labrarse un futuro próspero. Aquella breve estancia también me sirvió para disfrutar de la cordialidad y la hospitalidad del pueblo panameño y de sus gobernantes. Señor Néstor González, viceministro de Comercio Exterior, y demás autoridades panameñas, agradezco su presencia en Asturias, su asistencia a este acto y espero que nosotros sepamos ser tan buenos anfitriones como lo fueron ustedes.

La esclusa de Miraflores, una de esas obras que jalonan la historia de la ingeniería, fue uno de los lugares que recorrí en aquella visita a Panamá, donde también tuve oportunidad de observar los trabajos de ampliación del canal con su tercer juego de esclusas.

Son realizaciones capaces de asombrar a cualquiera. Pero también pueden inducirnos a una confusión: a pensar que Panamá se reduce al canal, a la obra en sí. No: las infraestructuras son importantes, pero por sí solas no rinden: es necesario aplicar esfuerzo y talento para sacarles el mayor provecho posible. En Asturias también tenemos –es otra dimensión, claro está- una importante obra portuaria, la ampliación de El Musel, en Gijón, a la que estamos empeñados en convertir en la gran plataforma comercial del Principado.

Pero no le distraigo con asuntos locales. Elogiaba la capacidad del pueblo panameño y de sus gobiernos. Han hecho ustedes de su país el mayor “hub” portuario y aéreo de América Latina, una referencia financiera y de desarrollo tecnológico, un país con estabilidad democrática, un lugar con calidad de vida. Lo han logrado porque han sabido aprovechar sus ventajas competitivas, no se han conformado con dejarlas estar.

La renovación del acuerdo de cooperación entre Proinvex, la Agencia de Atracción de Inversiones y Promoción de Exportaciones de su país, y Asturex, la Sociedad de Promoción Exterior Principado, responde también a esa finalidad: sacar provecho mutuo de nuestras ventajas competitivas, de las de Panamá y de las de nuestra comunidad, Asturias. Con este mismo fin se celebró ayer una jornada sobre oportunidades de negocio en inversión en Panamá en la que participaron medio centenar de empresas asturianas.

Señor viceministro, autoridades panameñas: Asturias es una comunidad con una riqueza natural admirable, distinguida por la Unesco con seis reservas de la biosfera. Si pregunta en cualquier lugar de España dónde está el paraíso natural, le indicarán este rincón cantábrico, anclado entre las montañas y el mar. Nuestras empresas agroganaderas –también con una fuerte capacidad exportadora- son sinónimo de alta calidad reconocida en toda España.

Pero Asturias también es conocida por otra seña de identidad: por su potencia industrial, que ha permitido desarrollar una fuerte red de empresas avanzadas que abarcan desde la construcción naval hasta la ingeniería más desarrollada. Algunas de ellas ya son buenas conocidas de ustedes, porque operan en su país. Son empresas modernas, competitivas, dignas de confianza, capaces de ganar el mercado exterior; empresas con las que el Gobierno de Asturias colabora decididamente a través de acuerdos y de sociedades como Asturex. Tenemos también –ya antes hice referencia a ello- unas excelentes infraestructuras portuarias que son una gran puerta de entrada a la Península Ibérica y toda Europa y que, estoy seguro, ustedes sabrán valorar adecuadamente.

Estoy convencido de que acuerdos como éste servirán para consolidar y aumentar nuestras relaciones comerciales, para fomentar intercambios ventajosos que redunden en nuestro provecho mutuo. Esforcémonos en ello.

Señores, les felicito por haber sido capaces de renovar este convenio de cooperación. Y, una vez más, agradezco a toda la delegación panameña su presencia en Asturias.

Muchas gracias.