El consejero de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Fernando Lastra, ha considerado hoy aceptables los plazos brindados por el presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Juan Bravo, para redactar el proyecto y ejecutar los trabajos que forman parte de la superestructura del soterramiento de las vías del tren en Langreo. Esta fase del proyecto, cuyo coste ronda los 20 millones, incluye vías, traviesas, catenarias, señalización, sistemas de seguridad y el resto de elementos necesarios para permitir la circulación de los convoyes.

Lastra se ha reunido hoy en Madrid con el máximo responsable de Adif, en un encuentro al que también han asistido el alcalde de Langreo, Jesús Sánchez, y el director general de Infraestructuras y Transportes, José María Pertierra. En la reunión, Bravo se ha comprometido a concluir el proyecto de obra en lo que resta de este año, para licitarlo en el primer trimestre de 2018 y poder comenzar las obras en el segundo semestre. Una vez finalizados los trabajos y superadas las preceptivas pruebas de seguridad, los trenes podrían comenzar a circular bajo tierra en 2019, siempre según las previsiones del Administrador.

El presidente de la entidad también ha comunicado al consejero que viajará al Principado en septiembre, en una visita que el Gobierno de Asturias aprovechará para tratar otros temas de interés, como el plan de cercanías ferroviarias, la integración del ferrocarril en Gijón y Avilés y la situación de la variante de Pajares.

La obra civil del soterramiento realizada por el Principado, de extraordinaria complejidad técnica, está ejecutada en más de un 98%, lo que permitirá finalizarla en septiembre. El túnel está totalmente excavado y la nueva estación de Los Llerones, también finalizada, a falta de los sistemas de control de accesos, que aún deben ser trasladados desde el apeadero que presta servicio en la actualidad. Por otra parte, la estación subterránea de La Felguera tiene un porcentaje de ejecución superior al 50%. Los trabajos se centran ahora en los revestimientos del edificio en superficie, algunos forjados y rampas.

El consejero de Infraestructuras ha subrayado el compromiso del Ejecutivo autonómico con una actuación en la que ha invertido en solitario cerca de 80 millones de euros.