Los artistas asturianos recibimos con alegría la concesión de la Medalla de Plata de Gijón a Vicente Vázquez Canónico, ese gran escultor amigo de todos, admirado por su ejemplar trayectoria. Una vida dedicada al Arte, sin camelos.

Vicente Vázquez Canónico

Desde niño, su vocación era clara. Destrozaba los muñecos de sus hermanas para estudiar los volúmenes, las concavidades y convexidades de los cuerpos. Con miga de pan preparaba la masa para hacer sus primeras esculturas. Con solo diez años hizo un retrato de su padre admirado por todos los familiares. Aparte de esculpir con todos los materiales que pillaba, se dedicaba a dibujar todo el tiempo que tenía libre, durante los años que estudió en  “La Poli”, como se conocía el Colegio Politécnico de los  hermanos Villamandos.

Tiene tres años menos que yo, por lo que cuando él fue a estudiar a la Escuela de Artes y Oficios de San Salvador de Oviedo, ya había terminado yo. Después se fue a Madrid, a estudiar Bellas Artes a la Escuela de San Fernando y  comenzó sus exposiciones colectivas. Muchas.  No es fácil triunfar en el campo de la escultura. La primera exposición individual la hizo poco antes de cumplir los cuarenta años, en la Sala de la Caja de Ahorros de Asturias. A partir de ese año  1976 expone en Oviedo, Orense, Niort, León, Candás, Etc.

La enumeración de sus éxitos y sus esculturas públicas ya están haciéndola en otros espacios de Arte. Todos esos logros, tan difíciles en la escultura, son los que le han hecho merecedor de esta medalla de Plata concedida por nuestro Ayuntamiento.  Y es más meritorio aún, porque el artista no se deja llevar por las corrientes de moda; nunca le ha importado  que algunos alcancen notoriedad con  engaños, llamando esculturas a montones de chatarra.  Porque Vicente V. Canónico sigue siendo fiel a sí mismo y fiel al verdadero Arte, sin concesiones.

Cuando,  en el año 1996, en el Museo Barjola, somos nombrados miembros del Consejo Asesor del Museo, Vicente V. Canónico y yo coincidimos en nuestra apreciación sobre  el Arte y sobre algunos artistas”.   Pues ambos queremos seguir manteniendo el mundo del Arte libre de engendros que algunos pretenden llamar pinturas o  esculturas.---

Esa trayectoria es ahora premiada.

Enhorabuena Vicente, por esa medalla tan merecida.

Carlos Roces