Mayo, el mes de las plagas

Con la llegada del buen tiempo los cultivos "pegan el estirón" y comenzamos a ver cómo nuestros huertos se muestran más vigorosos tras los meses de invierno, pero no debemos olvidar que mayo es un mes de primavera con abundantes lluvias, y esto unido a la subida de temperaturas, crea el hábitat perfecto para que nuestro huerto se llene de plagas.

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Cuando trabajamos nuestro huerto debemos realizar tareas de mantenimiento preventivas que nos ayuden a evitar plagas.

Mantén tu cultivo libre de malas hierbas

Es importante mantener nuestros cultivos limpios de malas hierbas, de modo que podamos ver con facilidad si la planta presenta alguna enfermedad o tiene bichos. Existen diferentes métodos que podemos emplear para mantener las malas hierbas a raya. Os dejamos un vídeo de La Huertina de Toni en el que habla de 7 maneras diferentes de acabar con ellas 

Atrae insectos beneficiosos

Podemos prevenir las plagas de manera biológica atrayendo insectos que sean beneficiosos para nuestro cultivo y que a su vez son "enemigos" de las plagas. En caso de querer aplicar algún tipo de tratamiento de control de plagas, no debemos olvidarnos de elegir uno que sea respetuoso con los "insectos buenos".

Por ejemplo, las hormigas son grandes aliadas a la hora de luchar contra el pulgón. También las mariquitas nos ayudan a defender la cosecha frente al pulgón, los ácaros y el piojillo, ya que son depredadoras naturales y nos ayudarán a acabar con estas plagas. 

Las crisopas son nuestro mejor aliado a la hora de luchar contra la mosca blanca, principal amenaza de tubérculos como la remolacha o la zanahoria. Las crisopas depositan sus huevos en las larvas de la mosca y una vez nacen las devoran. 

Las avispas permiten acabar con las plagas de manera eficaz, ya que devoran las larvas de los insectos dañinos y acaban con ellos de manera natural.

Cultiva plantas aromáticas y flores

Crear espacios con flores y plantas aromáticas en nuestros huertos ayuda a atraer a muchos insectos beneficiosos, especialmente avispas y mariquitas.  

Además, plantas aromáticas como la savia, la menta, el tomillo, la capuchina, la albahaca, la citronela o la lavanda, proporcionan un olor muy agradable para el ser humano pero detestable por parte de los insectos. El increible poder aromático de estas plantas mantendrá a los insectos alejados, por lo que es ideal plantarlas a modo de barrera natural en los linderos de nuestra cosecha.  

Pesticidas caseros

Si queremos actuar directamente sobre el problema, podemos emplear pesticidas hechos por nosotros mismos.

Las infusiones de capuchina actuan como un potente fungicida que podremos utilizar siempre que sea necesario. Es un remedio perfecto para repeler plagas o combatir los hongos en los cultivos como el mildiu, la brotytis o el oídio, algo que afecta principalmente a las cosechas de tomate.

Para tratar plagas de mosca blanca y pulgón, podremos preparar una solución de cebolla. Para ello licuaremos tres cebollas y lo mezclaremos con agua hasta conseguir un producto líquido y fácil de pulverizar. Lo dejaremos reposar 12 horas y estará listo para ser utilizado.

Para combatir el pulgón podremos crear un repelente con ajo y leche. Para ello trituraremos una cebeza de ajos con 2 o tres clavos (especia) ayudándonos de la licuadora  y lo mezclaremos con dos vasos de agua. Dejaremos reposar 24 horas. Pasado este tiempo lo mezclaremos con 3 litros de agua y tendremos nuestro repelente del pulgón listo para ser aplicado. 

Por último, el té de jengibre es nuestro aliado a la hora de luchar contra la polilla del tomate. 
 
Otros métodos

No debemos olvidar que existen metodos más artificiales de control de plagas. Siempre que sea posible trataremos de adquirir opciones ecológicas y 

Dependiendo del tipo de plaga que tengamos en nuestro huerto utilizaremos productos espefícicos. Por ejemplo, para mantener alejados a caracoles y babosas, nada como esparecer un poco de antilimacos alrededor de nuestro cultivo.