Las explotaciones lácteas asturianas cuentan desde hoy con nuevas herramientas y conocimientos que permitirán mejorar su sostenibilidad, rentabilidad y sanidad animal. Son los resultados del proyecto GO FUTURE, que durante dos años ha trabajado con datos reales de ganaderías asturianas para avanzar hacia modelos de producción más eficientes y respetuosos con el medio rural.
Impulsado por CTIC Centro Tecnológico, ASCOL, Central Lechera Asturiana SAT y LILA Asturias, y con financiación de la Consejería de Medio Rural y fondos FEADER, GO FUTURE ha aplicado tecnología avanzada —como espectroscopía infrarroja o sensores de metano— para estudiar la salud animal y la eficiencia ambiental directamente en las granjas.
Entre los principales resultados destaca la incorporación del parámetro BHB en los Informes de Control Lechero, que permitirá detectar la cetosis subclínica de forma temprana y fiable. Esta enfermedad, muy extendida en vacas lecheras, afecta negativamente a la reproducción, la calidad de la leche y la rentabilidad de las explotaciones.
Además, el análisis inteligente de datos —combinando información sobre leche, alimentación y emisiones— ha permitido establecer relaciones clave que facilitarán la toma de decisiones técnicas más ajustadas para cada ganadería.
Durante la jornada de presentación, celebrada en las oficinas de ASCOL, se subrayó la importancia de abordar los retos del sector desde una perspectiva innovadora y colaborativa, reforzando el papel de la ganadería como motor económico y social del medio rural asturiano.
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