El Gobierno de Asturias destinará este año 4,5 millones a los ayuntamientos para políticas de conciliación y corresponsabilidad

El Gobierno de Asturias, a través de la Dirección General de Igualdad, destinará este año 4,5 millones a los ayuntamientos para políticas de conciliación y corresponsabilidad. Estos fondos se enmarcan en el Plan Asturiano de Corresponsabilidad, cofinanciado por el Ministerio de Igualdad y uno de los proyectos más ambiciosos del Principado para favorecer la reconstrucción de la economía post-covid con perspectiva de género y evitar la salida de las mujeres del mercado laboral tras el impacto de la pandemia.

El plan contó con un presupuesto de 5,5 millones el año pasado, de los cuales 3 se transfirieron a los municipios para el desarrollo de políticas de cuidados y corresponsabilidad. Este año, los ayuntamientos recibirán 1,5 millones más y se dedicarán otros 1.100.000 euros a ayudas directas para apoyar a familias con hijos e hijas menores de 14 años en la conciliación de la vida personal y laboral.

“Las mujeres son las primeras en acusar las crisis, en 2008 los datos fueron rotundos. Las mujeres son las primeras en ser expulsadas de sus puestos de trabajo y las últimas en recuperarlos. La pandemia de la covid-19 no ha sido diferente. Ha azotado con desproporción a las mujeres, especialmente en la sobrecarga de cuidados”, ha explicado hoy la directora general de Igualdad, Nuria Varela. 

La titular de Igualdad ha ofrecido una rueda de prensa junto con la coordinadora de Economía en Igualdad, Carmen Castro, con motivo del Día Europeo de la Igualdad Salarial, que se celebra el 22 de febrero. Durante su comparecencia, Varela ha repasado las iniciativas impulsadas por el Gobierno de Asturias para construir la estrategia contra la desigualdad económica. 

Según ha indicado, esa estrategia se sostiene sobre dos pilares “novedosos y bien dotados económicamente”: la figura de agentes delegados y delegadas de igualdad en la empresa y el Plan Asturiano de Corresponsabilidad. Ambas políticas persiguen tanto reducir la brecha salarial, que ha bajado 5 puntos en el último año, como evitar que toda la labor de los cuidados recaiga sobre las mujeres. 

Los delegados y delegadas en igualdad en la empresa son una figura financiada íntegramente por la Dirección General de Igualdad con 174.000 euros en 2022. Esta medida es fruto de la negociación con los agentes económicos y sociales en la Mesa de Igualdad, prevista en el acuerdo de concertación social por primera vez en 32 años. 

Los delegados y delegadas en igualdad en la empresa iniciaron su actividad el año pasado con visitas a 58 empresas del sector servicios. De esas inspecciones se desprenden ya algunos datos: el 53% de las compañías contaba con un registro retributivo, el 35% estaba en proceso de negociación de un plan de igualdad, el 82% aún no había aprobado ese plan y el 28% no contaba con protocolo de prevención de acoso sexual. 

Otra de las actuaciones impulsadas en 2021 fue la transformación de la antigua escuela de emprendedoras y empresarias de Avilés en el Centro de Innovación y Economía en Igualdad.

El aumento salarial de las mujeres en Asturias durante 2019 hace que, prácticamente, se equipare el promedio salarial español para este sexo, una circunstancia que no se daba desde 2009. El salario medio de las mujeres en España es de 21.682 euros anuales y el de las asturianas de 21.298,6. Estas cifras muestran que diez años después, se ha cerrado la brecha abierta al inicio de la crisis de 2008 entre los sueldos de las asturianas y los del resto de las españolas. Sin embargo, los salarios de los hombres asturianos están por encima de la media nacional para su sexo (1.547,37 euros de diferencia). Los asturianos cobran de media 28.481,75 euros al año y los españoles, de media, 26.934,38. 

Los últimos datos oficiales correspondientes a 2019, reflejan una brecha salarial, medida en salario bruto por hora de trabajo, del 15,89%, y en salario bruto anual, del 25,2%. No obstante, en comparación con el año anterior, se confirma una reducción en la brecha salarial de 5 puntos en el salario bruto por hora de trabajo, que en 2018 se situaba en el 20,96%.

En 2021 mejoraron todas las tasas referentes al trabajo de las mujeres: las de actividad y empleo aumentaron y disminuyó la de desempleo.