El Gobierno de Asturias concedió subvenciones en 2017 a 59 proyectos de cooperación al desarrollo por un importe de 2.930.319 euros y este mismo mes repartirá una partida de 2.426.823 entre otras 43 iniciativas. Esto supone que, en los dos últimos años, el Principado ha apoyado el desarrollo de 102 proyectos con una suma de 5.356.723 euros.

A estos proyectos, articulados a través de convocatorias públicas, se suma la colaboración estable y permanente que el Ejecutivo mantiene con diversas oenegés, la Federación Asturiana de Concejos (FACC) y la Coordinadora de ONGD del Principado (Codopa) para el desarrollo de programas de intervención en terceros países en materias como atención a la infancia y ayuda a las personas refugiadas del Sáhara, así como a actuaciones en educación y sensibilización en Asturias. Este apoyo, que se realiza mediante convenios, alcanzó los 1.996.000 euros en el período 2017-2018.

De este modo, la inversión global en cooperación al desarrollo en los dos últimos años asciende a 7.352.723 euros.

El consejero de Presidencia y Participación Ciudadana, Guillermo Martínez, ha facilitado hoy estos datos durante su comparecencia en la Junta General para informar sobre la aplicación del V Plan Director de Cooperación al Desarrollo 2017-2021, aprobado por el Consejo de Gobierno el pasado diciembre. En su intervención, ha destacado el compromiso del Principado con estas políticas “que contribuyen a reducir la pobreza y las desigualdades estructurales, al tiempo que promueven el desarrollo de comunidades que sufren la vulneración de derechos básicos”.

Este compromiso, ha recordado, se plasma en la concesión de ayudas por un valor de 103 millones en los últimos 13 años, periodo en el que el Ejecutivo autonómico ha elaborado, además, 5 planes directores y 3 estrategias para fomentar los derechos humanos, el desarrollo de la igualdad de género, el empoderamiento de las mujeres y la preservación de la cultura y los valores de los pueblos indígenas. Este apoyo sitúa a Asturias como la quinta comunidad en inversión por habitante y en porcentaje total del presupuesto destinado a este fin.

De los 102 proyectos impulsados en los dos últimos ejercicios, 58 se centran en acciones de cooperación al desarrollo, con un apoyo económico de 4,5 millones, y 39 en iniciativas de educación y sensibilización, con una financiación de 420.347 euros. También se han autorizado cuatro ayudas de emergencia para situaciones de crisis humanitaria, por un importe de 390.000 euros; y una iniciativa para el empoderamiento y promoción de los derechos de la mujer, con una dotación de 30.000 euros.

Estas actuaciones se están llevando a cabo en una veintena de países, especialmente en Centroamérica, Caribe y el África subsahariana, y persiguen facilitar el acceso de la población a servicios básicos como la alimentación, el agua potable, la educación y la asistencia sanitaria. También favorecen el desarrollo de las comunidades indígenas, el fortalecimiento de las identidades de género y la atención a mujeres y menores en situación de vulnerabilidad.

El V Plan Director de Cooperación al Desarrollo 2017-2021, consensuado con las entidades del Consejo Asturiano de Cooperación, recoge las estrategias para impulsar acciones orientadas a la erradicación de la pobreza estructural y al desarrollo sostenible, con un enfoque basado en los derechos humanos. Sus objetivos son los siguientes:

   - El impulso de procesos que faciliten el acceso a los servicios básicos y la disminución de desigualdades, con especial atención a las mujeres y a las niñas.

   - La promoción de acciones de respuesta a emergencias y de acción humanitaria.

   - La construcción de una ciudadanía solidaria comprometida con los derechos humanos y el desarrollo humano sostenible.

   - Fortalecer la cooperación asturiana desde criterios de eficacia y eficiencia de la ayuda, coordinación y gestión del conocimiento.

El texto aporta importantes novedades respecto al plan anterior, como la incorporación de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas o la inclusión explícita de los derechos de la infancia, las personas mayores, la diversidad sexual y la diversidad funcional. Establece, asimismo, nuevos instrumentos de cooperación, como una línea específica para proyectos de promoción de los derechos de las mujeres, subvenciones para dar respuesta a situaciones de emergencia y el impulso del programa Juventud asturiana cooperante.

También presta especial atención al medio rural, dado que establece que al menos el 15% del presupuesto para proyectos de sensibilización al desarrollo se destine a estas zonas.

Por otra parte, el titular de Presidencia ha valorado las intervenciones realizadas en el periodo 2013-2016, al amparo del IV Plan Director. “En el período de vigencia del plan anterior destinamos 18,7 millones a ofrecer respaldo a 243 proyectos en 36 países y logramos alcanzar un nivel de ejecución presupuestaria del 99%”, ha explicado.

El 68,8% de estos fondos se destinaron a cooperación al desarrollo, el 23,24% a acción humanitaria y el 7,96% restante a educación para el desarrollo. Además, se profundizó en la concentración geográfica de la ayuda para fortalecer las acciones en países con bajos índices de desarrollo. Así, el 50,97% de la financiación fue para América Latina, el 28,95% al África Subsahariana, el 11,92% al Sáhara y Magreb, el 5,51% a Oriente Próximo y el 1,34%, a Asia.

 

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