El consejero de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Fernando Lastra, ha recibido hoy de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) el colector interceptor de la margen derecha de la ría de Avilés, que recoge las aguas industriales y las conduce al emisario de Xagó. La infraestructura, que tiene su origen en el convenio suscrito en 1992 entre la Administración central, el Principado y el Ayuntamiento, completa el saneamiento integral del estuario, lo que evitará el vertido de hasta 18 millones de metros cúbicos de agua de uso industrial.

La instalación entrará en funcionamiento en septiembre, una vez concluidos los ajustes previos para su puesta en marcha, y las empresas tendrán un plazo máximo de un mes desde que reciban la notificación para conectarse al colector, excepto Arcelor Mittal, que dispondrá de tres.

La entrega de la infraestructura por parte de la Administración estatal al Principado se ha materializado en un acto presidido por el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, y al que han asistido el consejero de Infraestructuras; la alcaldesa del concejo, Mariví Monteserín; el presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Manuel Gutiérrez, y el viceconsejero de Medio Ambiente, Benigno Fernández, entre otras autoridades.

El colector, diseñado para un caudal máximo de 1,7 metros cúbicos por segundo, incorporará los vertidos, previamente tratados, de Arcelor Mittal, Alcoa, Cogersa, Dupont, Fertiberia, Asturiana de Zinc, Cristalería Española y el Parque Empresarial de Principado de Asturias, para conducirlos al emisario submarino de Xagó. En la zona de ampliación portuaria por la margen derecha de la ría de Avilés están previstas, además, dos pequeñas incorporaciones para futuras industrias, así como para el propio puerto.

El control de los efluentes que se incorporan al colector se realizará en las arquetas de conexión, donde se han instalado los instrumentos para evaluar la calidad del vertido, así como su volumen, que no podrá exceder los 18 millones de metros cúbicos al año.

En todos los casos, las condiciones de vertido al colector están fijadas en las correspondientes autorizaciones ambientales de cada industria, con objeto de que las concentraciones de contaminantes cumplan los requisitos fijados en la normativa autonómica vigente (Ley 5/2002 sobre vertidos de aguas residuales industriales a los sistemas públicos de saneamiento). Asimismo, la calidad del vertido de forma conjunta no debe producir daños en el medio receptor –la zona de aguas marinas donde vierte el emisario-, en cumplimiento de las normas de calidad ambiental establecidas en el Real Decreto 817/2015, por el que se establecen los criterios de seguimiento y evaluación del estado de las aguas superficiales y las normas de calidad ambiental.

Del mismo modo, y atendiendo a las obligaciones derivadas del convenio para la protección del medio ambiente marino del Atlántico Nordeste, las empresas deberán realizar un seguimiento del medio receptor, analizando semestralmente muestras de agua de la ría y, anualmente, muestras de sedimentos en el área de influencia del vertido, que determinarán el contenido en metales pesados y compuestos orgánicos.

La Confederación Hidrográfica finalizó las obras, en las que se habían invertido 17,6 millones, en diciembre de 2010. Las pruebas evidenciaron entonces la necesidad de realizar reparaciones e incrementar las medidas de seguridad para evitar posibles vertidos a la ría. Tras diversas reuniones técnicas, el Estado y el Principado acordaron instalar nuevos elementos de seguridad y ejecutar mejoras en las instalaciones con el fin de reducir los alivios que pudieran producirse en caso de avería. Con estas últimas actuaciones, la inversión final de la Administración General del Estado en la instalación asciende a 19.045.000 euros.

La infraestructura consta de 17,6 kilómetros de tuberías que pasan por Carreño, Gozón, Avilés, Castrillón y Corvera.

Ver plano del colector en el pdf.