El puente de Quinzanas vuelve a estar en servicio. La Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial reabrirá al tráfico, a lo largo de esta tarde, la nueva infraestructura que conecta las dos orillas del río Narcea a través de la carretera AS-39 (Pravia-Cornellana a San Tirso). Una vez realizadas todas las comprobaciones geométricas y estructurales del puente, peatones y vehículos ya podrán volver a transitar por él con total seguridad.

Concluyen, de este modo, casi diez meses de trabajo en los que el Principado ha realizado una inversión que supera el millón y medio. La renovación de esta infraestructura ha supuesto un reto técnico. A la complejidad de la obra en sí misma hay que sumar otras, como la dificultad de entrar al río con grandes avenidas de agua, el estricto cumplimiento de la normativa medioambiental en una zona singular y la incomodidad que generaba mantener cortada la carretera.

Para la construcción del nuevo puente se ha prescindido de la pila central de la estructura. Retirar la antigua, que se había hundido, fue una de las labores más complejas de la obra. Para hacerlo fue necesario contar con una grúa de gran tonelaje y treinta camiones tráiler para transportar las piezas.

Precisamente fue el progresivo hundimiento del pilar central, que se acentuó con los temporales de diciembre de 2020, lo que originó el problema. El aumento del caudal del Narcea llegó a romper las losas del tablero del puente, lo que obligó a cerrar el paso peatonal y rodado desde el 1 de enero hasta hoy por motivos de seguridad.