“El PSOE y PP ocultan que, según la EPA, con el gobierno de Zapatero, entre 2008 y 2011, se destruyeron en España 2.500.000 de empleos, y con el gobierno de Rajoy, entre 2012 y 2014, se destruyeron 1.200.000 empleos”

“Defendemos la armonización fiscal que corrija la dispersión fiscal, especialmente dañina en los países como España, gobernados por quienes practican una política fiscal que penaliza a las empresas y empobrece a las familias”

“La Europa de los ciudadanos solo se conseguirá si se corrige el déficit democrático dando más competencias al Parlamento europeo, de forma que las acciones de la Comisión y del Consejo no queden fuera de su control”

El presidente de FORO, Francisco Álvarez-Cascos, realizó la siguiente intervención de introducción en el Desayuno-Coloquio  organizado por Club Financiero de YA:

DECISIVOS EN EUROPA

El lema de campaña de FORO “Decisivos en Europa” nace de una realidad confirmada por las previsiones (1) de composición del próximo Parlamento europeo, que apuntan a que el Partido Popular Europeo (PPE) ganará las elecciones por un estrecho margen de 209 escaños (el 27,8% de los 751 en juego) frente a los 203 escaños (26,5%) del Partido Socialista Europeo, según la última proyección semanal elaborada por el propio Parlamento Europeo y TNS Opinión, a partir de diferentes sondeos nacionales. Los populares perderán 65 escaños respecto a su representación actual en la Eurocámara, mientras que los socialistas ganarían 7. En tercera posición se sitúan los liberales de ALDE (grupo al que están adscritos CiU y el PNV) con 60 escaños (frente a los 83 actuales), seguidos de Verdes e Izquierda Unitaria (con 47 cada uno, frente a 57 y 35, respectivamente, en la actualidad). El grupo liderado por los conservadores británicos de Cameron lograría 44 escaños (frente a los 57 actuales), mientras que el grupo euroescéptico británico subiría ligeramente de 31 a 34.

La encuesta de la Eurocámara no se pronuncia sobre la formación de un nuevo grupo de extrema derecha liderado por la líder del Frente Nacional, Marine Le Pen, pero otras proyecciones le dan hasta 38 escaños. Así pues, de 751 diputados en liza, los Grupos Popular y Socialista obtendrían poco más de 400 escaños, con lo que hay una horquilla de 350 diputados que pueden configurar y decidir nuevas mayorías en el Parlamento europeo.

FORO aspira a ser decisivo ¿para qué?

 

CAMBIO PARA EL EMPLEO

El primer problema social de la Unión Europea es el del nivel de paro en muchos países, encabezado por Grecia con una tasa de paro del 26,7 % y España con el 25,3 %. Italia está en el 12,7 %, Francia en el 10,4  %, Polonia en el 9,6 %, Reino Unido en el 6,8 % o Alemania en el 5,1 %. La media europea está en el 10,5 %.

España no llegó a la tasa de paro del 25,3 % por casualidad. Llegó por errores continuados de sus gobiernos. El PSOE y PP con sus debates particulares de distracción ocultan que, según la EPA, con el gobierno de Zapatero, entre 2008 y 2011, se destruyeron en España 2.500.000 de empleos, y con el gobierno de Rajoy, entre 2012 y 2014, se destruyeron 1.200.000 empleos. Solo en el primer trimestre de 2014, se destruyeron en España 184.000 empleos, según la última EPA.

Con los datos socioeconómicos conocidos, es un hecho indiscutible que las mayorías del PSOE y del PP gobernantes durante los últimos diez años no se han inspirado en los verdaderos principios de los Tratados de la Unión, y sus errores y fracasos han conducido a España y a sus Comunidades Autónomas a una situación que exige cambios profundos en la política europea, en la política nacional y en la política regional.

Para superar el problema del paro y volver a la senda del crecimiento y del empleo ni a los españoles ni a la Unión Europea le convienen las políticas del subsidio, típicas de la izquierda. Proponemos medidas de estímulo de la economía e incentivos para el crecimiento y la competitividad. Por eso, manteniendo como objetivo básico de la política europea la convergencia, proponemos medidas para alcanzarlo asignando los recursos comunitarios no solo en función de niveles de crecimiento y de PIB, sino también en función de las tasas de desempleo, al servicio de la cual deben de reorientarse los programas operativos y la asignación de los recursos de los Fondos de Compensación, así como las directrices de estabilidad financiera y presupuestaria, y las medidas de estímulo al crecimiento capaces de evitar los procesos de desertización que amenazan a muchas comarcas europeas.

El propósito de la política de convergencia no puede ser otro que la Unión Europea sea una institución garante del bienestar social y de la igualdad de oportunidades, capaz de sostener políticas sociales eficaces y sostenibles, que se asienten sobre unas bases sólidas para reducir el paro y crear empleo, de tal forma que las medidas de estabilidad aseguren siempre una educación y una sanidad públicas de la mejor calidad, así como las pensiones sagradas de nuestros mayores.                                                                 

Es inexplicable que el PP y el PSOE en España, el segundo país con tasa de paro más alta de Europa, no dediquen en su programa europeo al problema del empleo la importancia que reclama la sociedad española. La convergencia en el empleo es el primer objetivo del programa de FORO porque no queremos una Europa de dos velocidades, con tasas de paro desbocadas en algunos países como está sucediendo hoy.

CAMBIO PARA LA ARMONIZACIÓN FISCAL

Una verdadera Unión requiere la desaparición de todas las fronteras interiores, y es un hecho que la dispersión fiscal que presentan los 28 países de la Unión equivale a mantener unas fronteras  impositivas cuya desaparición reclama una armonización de la política fiscal que corrija los procesos actuales de deslocalización de actividades.

España está en el pelotón de cabeza de la Unión en altos tipos impositivos. Ocupa el tercer lugar en el Impuesto sobre Renta de las Personas Físicas (52 %, tipo medio zona Euro 43,4%); el sexto en el de Sociedades (30 %, tipo medio zona Euro 25,3 %); y el séptimo en el de Valor Añadido (21 %, tipo medio zona Euro 20,5).

En opinión especializada de Manuel Carballo (2) “disponer de unos tipos impositivos más altos (o mucho más altos) que los países del entorno y más si son nuestros socios comerciales, con los que no tenemos barreras a la circulación de mercancías y capitales, es un factor enormemente negativo para nuestra competitividad, nuestra capacidad de atraer inversiones, y finalmente nuestra capacidad de crear riqueza y puestos de trabajo.

Si a esto unimos las cientos de miles de páginas publicadas por los gobiernos central y los regionales cada año, la no existencia de mercado único interior, y los enormes frenos que todo ello significa en cuanto a la creación de empresas, conduce a nuestra economía a una situación de letargo, recesión y enquistamiento con altas tasas de desempleo, que no serán amortiguadas si las situaciones que las producen no desaparecen en gran medida.

Uniendo los problemas que ocasiona sobre nuestro tejido productivo disponer de unos tipos mucho más altos que otros países europeos, el entramado indescifrable de normativas económicas publicadas cada día por el gobierno central y los regionales, con el consiguiente incremento de la fragmentación de mercado, sólo puede traer consigo una huida de las inversiones extranjeras, un desincentivo importante de las inversiones nacionales en nuestro propio país”.

No nos debería de extrañar que las multinacionales, pues, se domicilien en Irlanda, Luxemburgo o Suiza, o que los centros de producción de vayan a Polonia o a los Países Bálticos. Las inversiones de las empresas en la UE   -principalmente las multinacionales y las más grandes, porque para las PYMES es casi imposible- irán allí donde mejores rendimientos puedan obtener, entre otros factores. Para evitarlo, nosotros defendemos una armonización fiscal que fortalezca la verdadera Unión y corrija la dispersión fiscal que provoca la deslocalización de actividades, especialmente dañina en los países como España, gobernados por quienes practican una política fiscal que penaliza a las empresas y empobrece a las familias.

CAMBIO PARA CORREGIR EL DEFICIT DEMOCRÁTICO

Otro gran problema al que tenemos que enfrentarnos los europeos es la corrección del llamado déficit democrático de Europa, asunto sobre el que la mayoría de los líderes de opinión no se cansan de escribir y de pontificar. Como recuerda el historiador y sociólogo Emmanuel Todd (3) en Europa existe hoy un sistema de dos niveles. Un nivel superior de las instituciones comunitarias con una autoridad sin control, la Comisión y el Consejo, donde reina la cooptación. Y un nivel inferior de nación donde subsiste el sufragio universal. El 25 de mayo, además de opinar, tendremos la oportunidad de votar para decidir la modificación de aquello que no nos gusta, o para decidir que todo siga como hasta ahora.

Nosotros pensamos que la Europa de los ciudadanos solo se conseguirá si se corrige el déficit democrático, sobre el que casi todo el mundo está de acuerdo, dando más competencias al Parlamento europeo, de forma que las decisiones y las acciones de la Comisión y del Consejo no queden fuera de su control. Proponemos que la corrección urgente del déficit democrático que existe en el seno de las instituciones de la Unión Europea se resuelva mediante la atribución al Parlamento de las competencias que le son propias en las democracias avanzadas y, en particular, una investidura del Presidente que reconozca la potestad de nombramiento por éste de los miembros de la Comisión, y el ejercicio del control político pleno de todo el gobierno como en cualquier sistema parlamentario.

Acabo de presentar tres propuestas de un programa europeo de cambio, referidas a la convergencia en el empleo, a la armonización fiscal y a la corrección del déficit democrático, que nos importan mucho a todos los españoles, y que son asuntos que se van a dilucidar el día 25 de mayo. Todos aquellos que digan o piensen que en Europa hay divergencia en el empleo, que nos perjudica la dispersión fiscal o que hay déficit democrático, que lea, por favor, los Programas de unos y de otros y que compruebe qué partidos proponen medidas para solucionarlos. Nosotros desde FORO levantamos la bandera de la convergencia en el empleo, de la corrección del déficit democrático y de la equidad fiscal para construir una verdadera Europa de los ciudadanos

El ya citado Emmanuel Todd, en su más famosa obra “La invención de Europa” (4), anunciaba hace veinte años “la desaparición de las macroideologías” y se preguntaba por el  futuro de Europa. “¿Será universalista?¿Será respetuosa de la diferencia?” para concluir que “los europeos no podrán definirse sin ponerse de acuerdo sobre la definición del Otro”

Pero hay un conflicto previo que es el de ponernos de acuerdo sobre nosotros mismos. Me refiero a los españoles. De esto se trata a la hora de acudir a las urnas el 25 de mayo. De ponernos de acuerdo sobre nosotros mismos. Unos ciudadanos lo harán acudiendo a votar y otros se abstendrán. Los que acudan a las urnas satisfechos de lo que han conseguido el PSOE y el PP en los últimos 10 años, no tienen ningún problema para decidir que todo siga en sus manos, más o menos igual. Pero los exigentes, los insatisfechos, los inconformistas, los que se quejan, los que protestan, los que critican, los decepcionados, los que se sienten engañados, por responsabilidad y por coherencia deberían de impulsar un cambio para mejorar y para progresar. No se puede cambiar de destino si no se cambia de camino. A FORO no le gusta el destino de la decadencia española y europea. Proponemos los cambios necesarios para emprender un camino diferente.