Oblanca: “A FORO le preocupan los efectos perniciosos del ‘Brexit’ sobre el PIB, el crecimiento económico y la creación de puestos de trabajo en Asturias”

“Hay efectos del ‘Brexit’ que incidirán en una comunidad sumida en un grave problema demográfico, el desempleo juvenil y con aislamiento territorial”

“El hecho de que España vaya a ser uno de los países que aporte más de lo que recibe de Europa supondrá recortes significativos en las ayudas de la política agrícola común (PAC) y en fondos para las comunidades autónomas”

“En el caso de Asturias, hay actuaciones de infraestructuras, desarrollo rural y políticas de empleo que precisan de apoyo financiero porque, de lo contrario, se va a agudizar nuestra divergencia nacional y europea”

El diputado nacional de FORO, Isidro Martínez Oblanca, aprovechó la comparecencia en el Congreso del Secretario de Estado para la Unión Europea, Marco Aguiriano, que informó sobre las negociaciones finales del Brexit, para exponerle las inquietudes de FORO acerca de las consecuencias para Asturias de la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

“España está a punto de pasar de ser país receptor a país contribuyente neto en un marco en el que se van a barajar nuevos criterios presupuestarios y de reparto de fondos para corregir las diferencias socioeconómicas entre países y regiones –señaló Oblanca-. Para España hay cosas muy importantes, pero permítanme que destaque tres de las que inciden en Asturias y que precisan de una cooperación socioeconómica en la que Europa tiene mucho que decir: el grave problema demográfico, el desempleo juvenil y el aislamiento territorial.

“En Asturias, una comunidad que está sufriendo un largo y continuado proceso de decadencia como acreditan todos los indicadores oficiales, nos preocupan los efectos perniciosos del Brexit sobre el PIB, sobre el crecimiento económico y sobre la creación de puestos de trabajo, que es la gran prioridad nacional y una enorme necesidad para Comunidades Autónomas como la mía, que suma a su tasa de población activa –la más acusada de España- la emigración de sus jóvenes y un envejecimiento galopante de la población hasta el extremo de que ya hoy estamos en la cabeza europea”.

El hecho de que España vaya a ser uno de los países que aporte más de lo que recibe de Europa supondrá, según Martínez Oblanca, “recortes significativos en las ayudas de la política agrícola común (PAC) y en fondos para las comunidades autónomas. En el caso de Asturias, hay actuaciones de infraestructuras, desarrollo rural y políticas de empleo que precisan de apoyo financiero porque de lo contrario se va a agudizar nuestra divergencia nacional y europea”.

“También el Brexit anticipa la necesidad de nuevos acuerdos comunitarios en materia de pesca y me refiero a ello pensando en las grandes dificultades de un sector que, en el caso concreto de los pescadores asturianos, ha recibido bastantes varapalos a cuenta del reparto comunitario de cuotas. Tampoco puedo olvidarme de nuestra agroganadería”, concluyó Martínez Oblanca.

Intervención de Isidro Martínez Oblanca, en la Comisión Mixta para Unión Europea :

El señor MARTÍNEZ OBLANCA: Muchas gracias, señora presidenta.

"Buenas tardes, señor secretario de Estado, le saludo muy especialmente a usted y a todo el equipo del ministerio que nos acompaña esta tarde. Gracias por el relato del estado de la situación, y por sus explicaciones sobre la recta final ante el acuerdo de retirada, tras las negociaciones para la salida del Reino Unido de la Unión Europea; una salida que nos debilita y que en Foro lamentamos, porque somos de los que creemos en los beneficios de sumar, de añadir, de reunir, de agregar, de juntar, en definitiva, de fortalecernos. Resulta que es una receta infalible esa aplicación interna para nuestro país, como se demuestra singularmente en estos cuarenta años de trayectoria constitucional.

Su comparecencia, señor Aguiriano, resulta muy oportuna de cara a conocer en estas Cortes Generales la postura de España ante el acuerdo sobre el brexit, tres días antes de la Cumbre extraordinaria de Bruselas, en la que se debe validar un acuerdo que, por lo que estamos observando en estas últimas horas y usted nos lo acaba de confirmar, aún mantiene pendientes algunos flecos importantes. No obstante, no es de extrañar estas dificultades finales, porque es conocida la tendencia política a extremar el cumplimiento de los plazos; si bien parece que las materias contenciosas y las discrepancias finales podrían resolverse, en todo caso, posteriormente con declaraciones anejas, aunque a priori parece que sería mejor que fuesen incorporadas en el documento que se va a aprobar el próximo domingo, y que marcará políticamente el rumbo posterior a la salida británica de la Unión.

Uno de esos flecos negociadores afecta a España de manera muy especial, como ha dicho usted en su intervención, ya que se trata de Gibraltar, que es un tema prioritario y de importancia capital. Usted lo ha calificado de vital, de trascendental y estamos de acuerdo. Muchas veces se ha hablado también de ello muy extensamente en esta Comisión mixta, y también en la ponencia de estudio sobre las consecuencias de la salida del Reino Unido, que creamos en el Congreso y en el Senado hace exactamente dos años, a finales de noviembre de 2016.

Señor secretario de Estado, ahora mismo los teletipos están echando humo, a cuenta de estas setenta y dos horas finales para alcanzar el acuerdo de retirada del Reino Unido de la Unión Europea. Ha reiterado usted, lo ha recalcado, que estamos ante una cuestión de Estado, y quiero trasladarle, en nombre de Foro, el apoyo inequívoco a estas negociaciones finales, y animo a nuestro Gobierno para que sea irreductible en la defensa de los intereses nacionales, porque no cabe, tras la negociación y la claridad de objetivos del Gobierno, del Gobierno de España, a lo largo de estos dos años y pese al cambio de color, como digo, no cabe condescendencia ante esta declaración política histórica que marcará, desde el próximo domingo, el rumbo futuro de nuestra relación con los que ya son prácticamente exsocios, pero con los que mantendremos intereses muy relevantes que defender en años venideros. Como usted ha reiterado, sorprenden los lazos comunes que hemos formado españoles y británicos a lo largo del tiempo.

Como tengo la seguridad de que, al igual que ha hecho el señor Aguiriano, varios de mis colegas parlamentarios profundizarán en lo referente a Gibraltar, permítanme que yo haga especial mención a otros asuntos que también preocupan específicamente al partido que yo represento y que, como he repetido algunas veces, se define estatutariamente como europeísta y por tanto está atento a las secuelas de esta decisión del Brexit, que reducirá a veintisiete los países miembros de la Unión Europea, y a los efectos sobre el devenir comunitario. Al fin y al cabo, al hablar del Reino Unido los españoles tenemos que ser conscientes de que sufriremos impactos económicos y sociales para los que conviene estar muy preparados.Es el caso, - usted lo recordaba también - del gran volumen de nuestras exportaciones, o el de las inversiones de empresas y sociedades nacionales que operan allí, o los flujos turísticos, y por supuesto es cuestión principal el futuro de los cientos de miles de compatriotas españoles que viven y trabajan en Reino Unido o el de los muchos británicos - me parece que ha cifrado usted en el entorno de los trescientos mil - que residen en España.

De los cuatro grandes bloques que han sido objeto de negociación quisiera referirme y pedirle al secretario de Estado un comentario más amplio sobre los efectos definitivos del Brexit en los presupuestos europeos, toda vez que el Reino Unido era un miembro contribuyente, concretamente el tercer mayor contribuyente neto al presupuesto de la Unión Europea tras Alemania y Francia. Su salida obviamente supondrá con el tiempo una merma presupuestaria para el conjunto de la Unión, creo que en torno al 8 %. Como reflejó gráficamente el ministro Borrell en su comparecencia de octubre pasado, esta merma la tendremos que pagar a escote los miembros restantes del club europeo, pero hay una particularidad en las futuras eurocuentas que afecta a España, y es que España está a punto de pasar de ser país receptor a país contribuyente neto, y lo va a hacer además en este marco cambiante tras el Brexit, en el que se van a barajar nuevos criterios presupuestarios y de reparto de fondos para corregir las diferencias socioeconómicas entre países y regiones. Para España hay cosas muy importantes, pero permítame que destaque varias de las que inciden en mayor medida en Asturias, en mi comunidad de procedencia, y que precisan de una cooperación socioeconómica en la que esta nueva Europa tendrá mucho que decir: el grave problema demográfico, el desempleo juvenil, el aislamiento territorial y el desarrollo de nuestras comunidades agroganaderas y pesqueras. Seguramente muchas de estas características son también de especial relevancia en otras importantes comunidades autónomas españolas.

En términos económicos los diferentes comisarios que han comparecido a lo largo del tiempo en esta Comisión Mixta, y de forma especial el negociador Michel Barnier, que lo hizo en dos ocasiones, nos han explicado que el conjunto de la Unión Europea va a continuar siendo una de las grandes potencias económicas del mundo si perseveramos en el desarrollo del mercado único. No obstante, en Asturias, una comunidad que, como le digo, está sufriendo un largo y continuado proceso de decadencia, como acreditan todos los indicadores oficiales, nos preocupan los efectos perniciosos del Brexit sobre el que PIB, sobre el crecimiento económico y sobre la creación de puestos de trabajo, que es la gran prioridad nacional y que es una enorme necesidad para el conjunto de comunidades autónomas, y especialmente la mía, que suma a su tasa de población activa, farolillo rojo nacional año tras año, la emigración de sus jóvenes y un envejecimiento galopante de la población, hasta el extremo de que hoy ya somos comunidad más envejecida de Europa. Le pregunto, señor Aguiriano, si hay motivos de inquietud tras el Brexit cuando España se encamina a trastocar su estatus de país receptor de fondos a país contribuyente, un cambio más que sustancial que llega tres décadas después de nuestra incorporación al Mercado Común Europeo, un gran cambio cualitativo que se reflejará en el marco financiero plurianual 2021-2027, de especial incidencia en aquellas regiones españolas que están aún muy alejadas de los grandes objetivos de cohesión y de convergencia y que supondrá recortes significativos en las ayudas de la Política Agrícola Común, la PAC, y en fondos para las comunidades autónomas. En el caso de mi comunidad hay actuaciones de infraestructuras, desarrollo rural y políticas de empleo que precisan de ese apoyo financiero porque, de lo contrario, se va a agudizar nuestra divergencia nacional y europea también tras el Brexit.

Este Brexit anticipa la necesidad de nuevos acuerdos comunitarios en materia de pesca, y me refiero a ello pensando en las grandes dificultades de un sector que, en el caso concreto de los pescadores cantábricos, ha recibido históricamente bastantes varapalos a cuenta del reparto comunitario de cuotas. Le ha entendido en su comparecencia que una de las dificultades precisamente para el acuerdo del próximo domingo estriba en torno a las negociaciones pesqueras, y confío, por el futuro de nuestros pescadores, en que tengamos buenas noticias ante ese acuerdo que creo que usted se refería a que debería concretarse antes del 1 de julio del año 2020. También necesitamos buenas noticias para los agroganaderos y el desarrollo de la PAC.

Señora presidenta, concluyo mi intervención deseando por supuesto el mayor de los éxitos a todo el equipo diplomático que en nombre de España se ocupa de estas tareas negociadoras, de una enorme complejidad, en torno al Brexit y a la Unión Europea y en todo caso estaremos atentos a los diferentes avances que se produzcan en los próximos días.

Muchas gracias."