Pedro Leal: “La descarbonización que propone FORO consiste en innovar, reindustrializar y crear de empleo, y es el antídoto contra la demagogia empobrecedora del ecologismo urbanita que produce desertización social”

“El cierre de las térmicas de carbón es un craso error estratégico por el incremento del precio de la energía y porque las energías renovables a día de hoy no garantizan el suministro necesario de energía”

“La ‘transición ecológica’ de Pedro Sánchez y Teresa Ribera se acaba de llevar por delante en Francia a su ‘modelo’ porque nadie acepta empobrecerse para que luzcan palmito media docena de progres de salón”

“Los asturianos pueden comprobar que el acuerdo de FORO con el Gobierno de España sobre los PGE 2018 es una apuesta clara para defender las Cuencas y Asturias frente a los partidos que dicen una cosa aquí y la contraria en Madrid y Bruselas”

“El camino del futuro para Asturias no es la prohibición, los cierres, la demagogia y la inoperancia, sino la mejora de la competitividad, el esfuerzo y la innovación”

Intervención del presidente de FORO, Pedro Leal, en la Mesa Redonda titulada “La Transición energética a debate”, celebrada en el Centro Cultural Antiguo Instituto de Gijón :

I. LA SITUACIÓN ACTUAL

El Debate en el que nos encontramos, tiene su germen en un asunto de importancia capital, pero no sólo para el futuro próximo de las comarcas mineras, como de forma interesada se intenta trasladar a la opinión pública asturiana, sino también por la influencia que en toda Asturias tendrá, sin lugar a dudas, las medidas que bajo el paraguas de una presunta descarbonización, se están desgranando desde el reciente gobierno de España, presidido por el socialista Pedro Sánchez, que primero clona un Ministerio del francés Macron, denominándolo de forma idéntica al país vecino, ministerio de transición ecológica, y pone al frente del mismo a una ecologista de ciudad, como es Teresa Ribera, de cuyas retrógradas ideas en materia de energía nos ha ido ilustrando estos últimos tres meses.

No podemos olvidar, que en la Industria se encuentra el mayor nicho de empleo estable y de calidad. Sin embargo, hoy día nos encontramos con que España sufre un proceso de desindustrialización, porque la participación de la industria española en el PIB cayó desde el 18,73 % en el año 2000, hasta el 16,40 % en 2017 (- 2,33 puntos).

En Asturias, la participación de la industria en el PIB cayó aún más desde el 22,88 % en el año 2000, hasta el 19,59 % en 2017 (- 3,29 puntos).

Son datos objetivos del proceso de retroceso industrial en que estamos inmersos, y que debemos frenar de manera urgente.

II: EL DETONANTE

A pesar de este panorama, el detonante del problema es que desde fechas más bien próximas, determinadas formaciones políticas  a nivel nacional, me refiero expresamente a PSOE, Podemos, y Ciudadanos están trasladando a la sociedad asturiana un doble discurso, manifestando sin rubor alguno la defensa de propuestas contradictorias para el futuro del sector energético, tan vital para Asturias, como significativo a la hora de planificar nuestro futuro, ofreciendo una ambigüedad alarmante en un tema tan trascendente para el tejido industrial español, y en particular a la industria asturiana, como es el cierre o la continuidad de las centrales térmicas de carbón para la generación de energía eléctrica, energía que se suministra tanto a hogares, como centros de trabajo y contribuye al sostenimiento de nuestro empleo. Estos partidos manifiestan en las instituciones autonómicas y locales asturianas su postura contraria a la clausura inmediata o próxima de dichas centrales de generación eléctrica, a diferencia de lo que estas formaciones, votan en las Cortes generales o en la Eurocámara, lo que supone un claro fraude a los ciudadanos españoles y, muy especialmente, a  los asturianos, que seguimos pendientes de la resolución del Gobierno de España sobre el anuncio unilateral del cierre de la central térmica de Lada en Langreo, ahora tenemos, la incógnita de qué hará el ejecutivo improvisado de Pedro Sánchez, pero con una fundamentalista ecologista como Teresa Ribera como Ministra, en Asturias debemos encender todas las luces de alarma.

Este improvisado Gobierno de Sánchez, que ni siquiera ha establecido un programa u hoja de ruta, se propone quedar como campeón del ecologismo en la UE, o campeón mundial, y con ello se olvida del empleo, arrincona el crecimiento como base del bienestar, y apuesta a bombo y platillo por:

-       La ‘desertización’, mediante el anuncio de un hipócrita programa de ‘descarbonización’, basado en liquidar el carbón, mientras otros países de la UE, que han salido de la crisis como, Alemania mantienen sus producciones. 

-       Pedro Sánchez y Teresa Ribera propugnan el cierre de centrales térmicas, cuya clausura se pretende adelantar, de forma inexplicable, a través de un método totalmente desordenado, sin planificación alguna, sin importarle que técnicamente no sea aún viable por la falta de calidad del suministro alternativo de las energías renovables. 

-       En tercer lugar, el gobierno de España, consiente el incremento inexorable del recibo de la luz para todos, familias e industrias en España, perjudiciales para nuestros hogares y nuestros bolsillos, pero también nocivas para la competitividad de nuestro sector industrial. Esta subida del precio de la energía, será sin duda una de las principales consecuencias de la clausura anticipada de las centrales térmicas. y abrirá la puerta al aumento de las horas de funcionamiento de las centrales nucleares que sustituirán a las centrales de carbón que se cierran. Por tanto, la descarbonización a la que se alude ahora de modo continuado, no es un logro de los ecologistas urbanos, sino que supondrá un éxito de aquellos defensores de posturas pronucleares como suministradores de energía, así que defender el suministro de energía a través de instalaciones nucleares es incluso incongruente desde el punto de vista ecologista, viendo los desastres de Chernobil o Fukushima.

En esta decisión, el actual gobierno socialista de España olvida que los objetivos a cumplir para reducir las emisiones efecto invernadero, son para el horizonte del año 2030, no para el 2022 ni el 2025, incluso en algunas situaciones se podrían alargar las medidas hasta el año 2050. No entendemos ese afán de no aprovechar la vida útil de las centrales térmicas que ya han realizado esfuerzos por reducir sus emisiones.

Estos ataques al carbón como fuente de energía no son nuevos, llevamos sufriéndolos muchos años, pero se acrecentaron desde 2010 cuando siendo Comisario Europeo de la Competencia, Joaquín Almunia  , con la inestimable colaboración del Gobierno de Rodríguez Zapatero, decididos a poner fin a la minería, promueve la Decisión 787/2010 de 10 de Diciembre, relativa a las ayudas estatales destinadas a facilitar el cierre de minas de carbón, esto daba al traste con el esfuerzo y las inversiones del sector a lo largo de muchos años, las cuales habrán resultado baldías, y supondrá inseguridad sobre los suministros de energía, e indudablemente conlleva la pérdida de la soberanía energética de nuestro país, España es un país muy dependiente de fuentes energéticas del exterior, que pagamos todos nosotros a precios muy altos que condicionan y merman la competitividad de nuestras empresas y la creación de puestos de trabajo, y cerrar centrales térmicas, alimentadas por carbón, tanto autóctono como importado, supondría un impacto negativo tan brutal, que condenaría no sólo a las comarcas mineras, sino a toda a Asturias a la desertización industrial, y como consecuencia, la pérdida de puestos de trabajo. 

La solución, y por la vía que debemos apostar en España y en Europa, pasa por invertir en la tecnología necesaria para convertir al carbón en una fuente de energía más limpia, como hacen en Alemania, por ejemplo, que sigue apostando por la generación eléctrica con carbón, contemplando un escenario bien distinto al de España, en el país germano, tienen previsto poner en funcionamiento varias centrales térmicas, además de apostar por la modernización de buena parte de las ya existentes, mediante proyectos de captura y almacenamiento de CO2. Con este camino lograríamos que no dependamos energéticamente del exterior, algo vital para nuestra industria, 

Las decisiones que se adopten en un futuro próximo, tendrán indudable repercusión en nuestra CCAA, ya que en un primer término, Asturias dispone de explotaciones de minería de carbón y cuenta con cinco centrales térmicas de generación de electricidad alimentadas principalmente por este mineral, Aboño, Lada, Soto Ribera, Soto la Barca y Ablaña, que podrían ser susceptibles de ser clausuradas (lo que implica 600 puestos directos, más de 300 de contratas, a los que hay que añadir los derivados del transporte de los aproximadamente 250.000 camiones que se necesitan para transportar mercancía para ser quemadas en esas térmicas, entre otros empleos) ; y en segundo término,  disponemos en nuestra región de un volumen de industria que necesita un elevado consumo energético en sus correspondiente procesos productivos, denominada electrointensiva,  por tanto, las medidas que se acuerden tendrán incidencia en ambos extremos, y serán muy perjudiciales en caso de que lleven aparejada como principal consecuencia el incremento de los costes de energía

III.- LOS PERJUICION INMEDIATOS:

Ante estas circunstancias, no podemos dejar de preocuparnos por los efectos negativos inmediatos que tendría este proceso acelerado que pretende llevar a cabo el gobierno:

1º.- No va a tener el cacareado efecto “descarbonizador” del que se presume.

2º.- Asegura la conversión en zonas deprimidas a todas las comarcas afectadas, que pierden los empleos de más calidad en la industria asturiana.

3º.- Es el paso previo a las deslocalizaciones industriales por el encarecimiento de los costes energéticos y la falta de competitividad de las empresas instaladas en nuestro territorio.

4º.- Acarrea el empobrecimiento a todo el Principado de Asturias

5º.-  Trasladará las emisiones a otras CCAA

6º.- Las comarcas mineras sufren desde hace años una alarmante pérdida demográfica, debida tanto a causas naturales como a la emigración a otros territorios: sólo en los últimos veinte años la comarca del Narcea ha perdido el 30% de sus habitantes, el Caudal un 25% y el Nalón un 20%.Una descarbonización drástica, sin planes de reindustrialización, contribuiría a la desertización de la zona.

El cierre de las térmicas alimentadas con carbón, supondría un craso error estratégico, no solo por el incremento del precio de la energía, sino porque entre otras cuestiones, las energías renovables a día de hoy no están en un grado de maduración suficiente como para garantizar el suministro necesario de energía, carecemos de las infraestructuras en conexiones necesarias para abastecernos en caso de situaciones como los denominados picos de consumos.

Por trasladar un ejemplo gráfico, si por condiciones meteorológicas, no hay horas de sol suficientes, no hay viento para la energía eólica, o hay sequía que afecta a las centrales hidráulicas, ¿de dónde proporcionamos la energía?, de ahí la necesidad de mantener las centrales, porque necesitamos una energía de respaldo que nos ofrezca la garantía de suministro que imprescindible para el país. Disponemos de un sistema energético de gran diversificación, quizá el mejor de la UE, por ello, conviene no obsesionarse con las emisiones ni de ir de abanderados de políticas medioambientales cuando no es cierto.

La clausura anticipada de estas centrales térmicas, de las que, insisto, cinco se encuentran en Asturias, es cuando menos -por eso considero que no sólo es sorprendente- sino también incomprensible que representantes electos asturianos como los socialistas Adriana Lastra y Natalia González, junto al Ciudadano Ignacio Prendes, o Sofía Castañón y Segundo González de Podemos, en el mes de octubre de 2017, votaran todos junto, al alimón, una propuesta de cerrar la térmicas en 2020 presentada por Podemos.

Esta medida apoyada por estas formaciones políticas, genera preocupación, tanto en los empresarios, como en los trabajadores directos de las industrias afectadas, como también en los pymes auxiliares y los puestos de trabajo indirectos, en el comercio y en el sector servicios de la región, sobretodo después de escuchar una de esas frases impulsivas de la ministra Teresa Ribera, de que en esta transición energética habrá «ganadores y perdedores». No me gustaría que Asturias quedará en la segunda acepción.

Si a día de ayer, la energía obtenida mediante la generación de energía por la quema de carbón es del 16% del mix energético, y no olviden de otro dato no menos importante, el carbón tiene un precio estable, fluctúa muchos menos que otros combustibles como el petróleo y el gas, y garantiza unos precios estables y más predecibles, circunstancias que son imprescindibles para la industria.

¿A qué se debe esa precipitación por cumplir a lo que no estamos obligados? Qué beneficio se aportará al medioambiente si únicamente nosotros, los españoles hacemos esfuerzo, y no el resto de países, y si menciono China, EEUU o la India que son los que mayores emisiones realizan, no hacen ese esfuerzo en reducir dichas emisiones, de qué serviría el sacrificio de los asturianos en estas circunstancias, todo por una obsesión de un gobierno insensato. Seamos claros y no es conveniente hacerse trampas al solitario, suprimir de inmediato las centrales térmicas españolas no influirá prácticamente nada en las emisiones que se generan en el mundo.

Por tanto, la descarbonización que pretende el actual Gobierno de España conlleva:

-               Pérdida de Empleo

-               Desmantelamiento Industrial

-               Desertización

-               Empobrecimiento general

IV.- EL VERDADERO RETO DE ESPAÑA Y ASTURIAS: LA ALTERNATIVA  DEL PROGRESO Y EL EMPLEO.

En los momentos actuales, es imprescindible acometer una política europea de apuesta por la industria, para defender el crecimiento y el empleo estable en la UE.

En noviembre de 2017, el Consejo Europeo solicitó a la Comisión Europea que propusiera una estrategia global para el año 2030 y más allá, partiendo de su comunicación sobre una Estrategia renovada de política industrial de la UE. Y ello está en consonancia con las Conclusiones del Consejo Europeo de junio de 2017, en las que se subrayaba el papel esencial de la industria como importante motor de crecimiento, empleo e innovación, y como decía, propiciar una base industrial fuerte que fomente el desarrollo, cree empleo y promover las inversiones y la innovación.

Por tanto, en FORO no decimos no porque no a la transición energética que se está diseñando desde el gobierno de Pedro Sánchez, nuestro representante en el Congreso de los Diputados, Isidro M. Oblanca, apoyó incentivar el consumo del carbón compatible con el medio ambiente, con tecnologías para alcanzar el objetivo europeo de cero emisiones, el denominado “carbón limpio”, expuso con claridad la postura de FORO con una propuesta para “el establecimiento de mecanismos transparentes para dotar a nuestras centrales térmicas de instrumentos financieros que permitan equiparlas con tecnologías para alcanzar el objetivo europeo de cero emisiones.

Lo que España y Asturias necesitan con urgencia son las inversiones que apuestan por las nuevas tecnologías que mejoran la vida de la gente, como figura en los PGE 2018, con el objetivo de revertir la tendencia desindustrializadora del periodo 2000-2018, como la enmienda aprobada a iniciativa de FORO de dotar con 10 millones de euros destinados a mecanismos de apoyo para reducir las emisiones relacionadas con el cambio climático en las térmicas de carbón, con pleno sometimiento a los límites y requisitos en la normativa de la UE. 

Los asturianos pueden comprobar que el acuerdo de FORO con el Gobierno de España sobre los PGE 2018 es una apuesta clara para defender las Cuencas y Asturias frente a los partidos que dicen una cosa aquí y la contraria en Madrid y Bruselas, mientras otros apuestan por el desmantelamiento industrial y el cierre de las térmicas, nosotros trabajamos, y conseguimos 10 millones de euros del Estado, para asegurar los puestos de trabajo haciendo el crecimiento sostenible y compatible con la defensa del medio ambiente, al efecto de frenar la desertización industrial de Asturias.

Una vez más, hemos demostrado con hechos, y no sólo con palabras quiénes estamos verdaderamente comprometidos con este problema, con Asturias, con las comarcas mineras, la defendemos y trabajamos por su recuperación, a diferencia de los que llevan años engañando a los asturianos y los vecinos de estas comarcas mineras, diciendo una cosa en Asturias, votando lo contrario en Madrid y en Bruselas. 

El camino del futuro para Asturias no es la prohibición, los cierres, la demagogia y la inoperancia, sino la mejora de la competitividad, el esfuerzo y la innovación al servicio del crecimiento de la CCAA y del empleo de los ciudadanos, claves de su bienestar.

Conclusiones :

Por nuestra parte, nos congratulamos que los empresarios asturianos rechacen de plano la desertización irresponsable con la que nos amenaza Pedro Sánchez y apuesten por la innovación que ya está incluida en los PGE 2018, como alternativa asturiana a la descarbonización.

Han tenido que pasar dos meses para que la sociedad asturiana se movilice contra un sinsentido que solo se resolverá con la salida de Teresa Ribera de un ministerio que solo busca su propaganda personal, a costa del empobrecimiento de la sociedad asturiana.

Les pongo como precedente, de una crónica que debería ocurrir en España, si se obrara con responsabilidad, tanto personal como por cuestión de estado, aunque la noticia no tuvo demasiada repercusión en Asturias, el ministro estrella para la Transición Ecológica de Francia, como decía ministerio clonado por Pedro Sánchez, Nicolás Hulot, presentó su dimisión a Macron, según él mismo manifestó, por falta de apoyo a sus iniciativas ecologistas. 

La realidad es que su renuncia tenía otras motivaciones, y están relacionados con las contradicciones de la política general de Macron. Los proyectos de Hulot sobre:

-               La reducción de gases de efecto invernadero, 

-               la reducción del peso de la energía nuclear, 

-               la repoblación de lobos o 

-               el precio de las licencias de caza, 

No tenían apoyo ni en el Gobierno, ni en la mayoría parlamentaria, ni en la sociedad francesa y todos ellos nos recuerdan que en España tenemos problemas si no iguales, sí semejantes en esos campos.

Por eso puedo afirmar que “el ecologista francés, clonado en España por Pedro Sánchez en Teresa Ribera, se marcha ante el panorama de la economía francesa que está reduciendo su crecimiento y que las reformas introducidas no las perciben los franceses. 

La solución de los problemas reales de nuestra  sociedad, que no está para fantasías del ecologismo urbanita que cierra empresas y destruye puestos de trabajo, como pasa en Francia y en cualquier lugar del mundo. 

Así que desde aquí, le recuerdo a Pedro Sánchez aquello de ‘cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar’ y le pido que prescinda de Teresa Ribera antes de que el daño sea irreversible.

La descarbonización que proponemos desde FORO no tiene nada que ver con la demagogia elitista de los y las fundamentalistas del ecologismo urbanita ni con  la desertización social y territorial que nos anuncian como nuevo paraíso natural, ni con mandar al paro ni hacer más pobre a los asturianos, sino con innovar, reindustrializar y crear de empleo

PD.

Aquellos que han aupado a Pedro Sánchez a ostentar estas responsabilidades, primero de modo interno en el PSOE, como también las formaciones que le han aupado a la Presidencia del Gobierno, deberían ahora exigirle que cumpla y manifestarle la realidad.