El PSOE presentó esta mañana en Oviedo las grandes líneas de su campaña para las elecciones del 10 de noviembre, en un acto en el que estuvieron presentes la número dos de la candidatura al Congreso y ministra de Sanidad en funciones, Luisa Carcedo, y la secretaria de Organización de la FSA-PSOE, Gimena Llamedo. En su intervención, Carcedo hizo hincapié en que frente a la opción de «bloqueo y extremismo» que representan el resto de formaciones políticas, solo los socialistas encarnan un proyecto orientado a conformar en España un gobierno «estable y moderado».

Carcedo insistió en el mensaje de la movilización, de que el 10-N acuda a las urnas el mayor número posible de asturianos, en un momento en que la derecha, y singularmente el PP, busca por todos los medios alimentar una abstención elevada que favorezca sus intereses electorales. Y abundó en la importancia de que España tenga un gobierno solvente que se centre en afrontar los retos de futuro, en combatir la desigualdad, en apostar por la «justicia social», en hacer frente al cambio climático, y deje a un lado los intereses partidistas que, según la candidata, priorizan otras formaciones políticas. «Hay que trabajar por lo que de verdad preocupa a la gente: eliminar los copagos farmacéuticos, las partes más lesivas de la reforma laboral…», remarcó.

Llamedo, por su parte, destacó que el PSOE impulsará una campaña «en positivo», después de una ronda de asambleas abiertas en las agrupaciones locales en las que se recogió el sentir de la militancia ante la campaña. E incidió especialmente en la importancia que tiene la presencia de Pedro Sánchez de nuevo en Asturias, el próximo martes en Gijón, como muestra del compromiso del partido con el Principado y sus intereses. La ‘agenda asturiana’ está muy presente en Madrid, dijo Llamedo, que destacó que Adriana Lastra y Luisa Carcedo tendrán una participación muy notable en una campaña que también contará con la presencia de la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado.