La Consejería de Salud recomienda la vacunación contra la gripe a las mujeres embarazadas para proteger a los bebés, dado que hasta pasados los seis meses de vida no pueden recibir la profilaxis. El contagio de esta enfermedad incrementa el riesgo de complicaciones en los recién nacidos y provoca ingresos y casos graves equiparables a los que afectan a las personas mayores de 65 años.

La campaña de vacunación antigripal 2019-2020 se adelanta al 21 de octubre para mayores de 65 años y mujeres embarazadas. A partir del 4 de noviembre, se inmunizará al resto de grupos de riesgo, entre los que por primera vez se incluyen bebés prematuros mayores de 6 meses y menores de dos años.

El director general de Salud Pública, Rafael Cofiño, ha presentado por primera vez esta iniciativa en un centro de salud, concretamente en el de El Llano, en Gijón, junto con la directora de Atención Sanitaria y Evaluación del Servicio de Salud, Alejandra Fueyo; la coordinadora del centro, Marta González; el coordinador de Enfermería y responsable de la vacunación de la gripe en el equipamiento, Santiago González, y el jefe del Servicio de Epidemiología de la Consejería de Salud, Ismael Huerta.

Cofiño ha destacado el papel de la red de atención primaria en la prevención y la promoción de la salud. Por su parte, el jefe del Servicio de Epidemiología de la consejería, Ismael Huerta, ha insistido en la importancia de que el personal sanitario y sociosanitario se vacune para prevenir contagios a pacientes y grupos de riesgo.

La vacuna está recomendada para mayores de 65 años, personas inmunodeprimidas o con enfermedades crónicas, obesidad y mujeres embarazadas, que presentan más riesgo de complicaciones. Se aconseja también para quienes conviven con personas de alto riesgo, personal de centros sanitarios y sociales, estudiantes en prácticas de Ciencias de la Salud, trabajadores de servicios públicos esenciales (policías, bomberos, protección civil, etc).

Entre las novedades de esta campaña, que finalizará el 31 de diciembre, figura la administración de tres tipos de vacuna, entre las que se incluye por primera vez la tetravalente de cultivo celular, indicada para gestantes y personas con alergias graves al huevo y a los antibióticos.

A los mayores de 65 años se les inoculará la trivalente reforzada, que logra una mejor respuesta inmune en este sector de la población, y al resto de los grupos de riesgo, desde los seis meses hasta los 64 años, se les administrará la tetravalente clásica, que protege de los dos tipos de virus A y las dos variantes del B.

Salud ha adquirido 244.000 dosis de vacuna, que han supuesto una inversión de 1.194.710 euros. Del total, 170.000 son de trivalente reforzada, 72.000 de la tetravalente clásica y 2.000 de tetravalente de cultivo celular.

Esta semana se distribuirán las dosis en los diferentes puntos de vacunación y se difundirá la campaña con carteles y folletos. Además, por primera vez se elaborará un documento de preguntas frecuentes sobre la gripe que estará disponible en la página de Astursalud (www.astursalud.es ) para ayudar a distinguir los síntomas de una gripe de los de un resfriado. Por otra parte, Salud difundirá a través de las redes sociales un vídeo sobre la importancia de la inmunización y las consecuencias de la gripe en la población de riesgo.

La cobertura vacunal se incrementó en la pasada campaña entre los grupos de riesgo, con 211.742 dosis administradas de las 228.295 distribuidas. En total, el Servicio de Epidemiología registró 3.816 contagios de gripe por cien mil habitantes, frente a los 4.390 del ejercicio anterior.

Por grupos de riesgo, el 57% de las personas de más de 65 años recibieron la vacuna, de manera que se superó el 55,2% de la campaña previa. En este grupo, se registraron 1.061 casos de gripe por cien mil habitantes, menos de la mitad que en la temporada anterior, cuando se registraron 2.597. No obstante, se recomienda que se vacune al menos el 65% de este colectivo para reducir la morbilidad y la mortalidad.

Respecto a las gestantes, el año pasado se inmunizaron el 44%, frente al 32% de la temporada anterior. También se incrementó la cobertura entre el personal sanitario: del 32% al 50%.