La incidencia de la gripe se mantiene estable en Asturias en relación con la semana anterior, con una tasa de 177 casos por 100.000 habitantes, todavía por encima del umbral epidémico. En concreto, desciende en la mayoría de los grupos de edad, especialmente entre los menores de 5 años, aunque aumenta en el segmento de población de 5 a 14.

Por su parte, la tasa de aislamientos de virus sigue bajando por cuarta semana consecutiva.

Por tanto, continúa la fase descendente de la onda epidémica estacional y se aprecia también una bajada de la circulación de virus. Se espera que tanto la incidencia de la gripe como la circulación de virus disminuyan paulatinamente en las próximas semanas hasta niveles no epidémicos.

Por su parte, en el resto del país sigue descendiendo la tasa de incidencia y cada vez más comunidades superan la situación epidémica, que todavía se mantiene en 9.

Hasta la semana pasada se registraron 351 casos ingresados con gripe confirmada, con una tasa de 106,2 ingresos por 100.000 habitantes que, comparada con la tasa de incidencia, supone una proporción del 3,4% de los casos atendidos en atención primaria. El 52% de las personas ingresadas son hombres y el 84% tiene 50 años o más. Asimismo, el 91% presentaba algún factor de riesgo y, dentro de este porcentaje, el 48% no estaba vacunado.

En total, se han producido 120 casos graves (34% de los ingresos), con una tasa de 36,3 casos graves por 100.000 habitantes, de los que 17 ingresaron en UCI. Además, se han contabilizado 19 fallecidos (15,8% de los casos graves). El 86% presentaba algún factor de riesgo (principalmente 65 años o más y enfermedad cardiovascular, metabólica o pulmonar) y, de ellos, el 46% no estaban vacunados.

En comparación con temporadas anteriores, esta es la segunda en la que se detecta un mayor número de casos graves, tras la de 2016-2017, y la mayoría están asociados a personas de edad muy avanzada.