La Dirección General de Prevención y Control Ambiental permanece vigilante ante la contaminación por concentración de partículas en Avilés, que presenta oscilaciones a estas horas tras haber descendido de forma significativa durante la primera mitad de esta mañana con respecto a los valores registrados en la jornada de ayer. El resto de estaciones de Asturias no han presentado concentraciones significativas para ninguno de los contaminantes.

La directora general, Elena Marañón, ha avisado esta mañana formalmente a los integrantes de la Comisión de Valoración y Seguimiento de la Contaminación Atmosférica en Avilés de un fenómeno meteorológico de inversión térmica, responsable del aumento de la contaminación atmosférica por partículas en suspensión en la zona, que se saldó con superaciones del valor límite de 50 microgramos por metro cúbico (?g /m3) durante las jornadas del lunes y de ayer, martes. No obstante, Medio Ambiente ya se había puesto en contacto durante la jornada de ayer con responsables de medio ambiente del Ayuntamiento y del Puerto de Avilés.

Marañón ha recordado que con el objeto de conseguir una mejora sustancial de la calidad del aire a corto plazo y de facilitar el cumplimiento de los límites legales recogidos en la normativa para las partículas PM10 (partículas de hasta 10 micrometros de tamaño), el Plan de Mejora de la Calidad del Aire en la Asturias Central recoge un protocolo de actuación, con tres niveles de actuación, del que la Autoridad Portuaria, los Ayuntamientos de Avilés, Castrillón y Gozón, y las empresas afectadas fueron oportunamente informadas por última vez durante la reunión de la última comisión de seguimiento celebrada en septiembre.

Pese a estas jornadas de extrema estabilidad, la responsable autonómica de la Prevención y el Control Ambiental ha pedido “huir de alarmismos” porque no es cierto que Asturias tenga una mala calidad del aire. “Estos episodios se restringen únicamente a la concentración de partículas en áreas concretas; no tenemos incumplimientos en ninguno de los otros contaminantes”, ha zanjado.

Dicho protocolo, inexistente en la mayoría de las comunidades autónomas y cuyas medidas son voluntarias, consta de tres niveles de actuación, que se activan en el momento que se cumplan los siguientes condicionantes:

    Nivel de aviso: Se iniciará cuando con los datos de la Agencia Estatal de Meteorología se determine la presencia de fenómenos meteorológicos de carácter persistente e intenso (gradiente térmico elevado y baja altura) que dificulten la dispersión de partículas en la atmósfera. Implica comunicar la situación a los agentes implicados para informarles de la posibilidad de que la contaminación por partículas PM10 se incremente, de tal forma que puedan planificar la ejecución de las medidas preventivas y correctoras necesarias en caso de pasar a los niveles de prealerta y alerta.

    Nivel de prealerta: Podrá ser declarado cuando se produzcan subidas significativas y permanentes de los niveles de partículas en alguna de las estaciones de la Red Oficial de Vigilancia de la Calidad del Aire del Principado de Asturias al menos tres días consecutivos con superación del límite diario de 50 ?g/m3 y se prevea que continúe en los próximos días la situación meteorológica adversa. En esta situación la Dirección General de Prevención y Control Ambiental, una vez comprobado que dichas superaciones no se corresponden con algún fenómeno puntual en la zona donde se sitúa la estación, propone a la Comisión de Valoración y Seguimiento del Protocolo el establecimiento del nivel de prealerta y comunica la situación a todos los agentes implicados para que ejecuten medidas preventivas y paliativas, entre las que se incluyen avisos a la población y reducción de las emisiones difusas de partículas a la atmósfera procedentes de actividades industriales, portuarias y del tráfico rodado.     Nivel de alerta: Se pondrá en marcha cuando se confirme la existencia de tres superaciones en.?cinco días consecutivos del valor medio diario de 75 ?g/m3 e implica la adopción de medidas preventivas industriales, portuarias y del tráfico rodado más restrictivas.

La Comisión de Valoración y Seguimiento de la Contaminación, encargada de activar, establecer el nivel de actuación y desactivar el protocolo, impulsando su desarrollo está formada por representantes de las Direcciones Generales de Prevención y Control Ambiental; Industria y Justicia e Interior, así como por responsables de la Delegación de Gobierno, de los Ayuntamientos de Avilés, Castrillón y Gozón y de la Autoridad Portuaria de Avilés. Este órgano es el responsable también de facilitar la colaboración y coordinación de las administraciones públicas en la adopción de las diversas medidas previstas, y realizar las valoraciones y propuestas que considere oportunas.

Por su parte, el Principado de Asturias continúa con las labores de inspección y control de todas las actividades potencialmente contaminantes y, solo en materia de aire, este año se realizarán visitas a medio centenar de instalaciones, 30 de ellas en Gijón y 20 en la zona de Avilés. “Nosotros tenemos capacidad y podemos sancionar cuando hay un incumplimiento de las emisiones, que da lugar a expedientes sancionadores y a multas”, ha precisado.