Para Tania González, la situación que atraviesa Alcoa “responde al modelo fracasado del Partido Popular y del Partido Socialista de privatización de las empresas públicas estratégicas. Es un modelo que no sirve, cuando las decisiones que se toman en Pensilvania no se toman en función de los intereses de los trabajadores y trabajadoras ni de la comunidad que ha hecho un esfuerzo enorme para sacar esta empresa adelante”.

La secretaria general de Podemos Avilés ha insistido en que “no se puede permitir el cierre de la fábrica” y ha exigido “firmeza a los Gobiernos asturiano y central a la hora de poner propuestas sobre la mesa para que Alcoa no cierre. Deben estudiar la posibilidad de invertir a través de la SEPI para comprar total o parcialmente Alcoa y mantener abierta la fábrica, teniendo en cuenta el modelo de otros países vecinos, como Francia, donde el Estado tiene una amplia participación en la empresa pública, lo que le permite un mayor control sobre su economía”.

Lorena Gil, por su parte, ha añadido que “el ministerio de Trabajo debe paralizar el ERE para poder negociar. No puede haber una mesa de negociación cuando los EREs están sobre la mesa. La política industrial debe ser activa y evitar que haya deslocalizaciones de empresas como Alcoa, que han recibido millones de euros de dinero público”.