El avance de la construcción de las viseras en la carretera de Sotres obliga a realizar cortes de tráfico temporales a partir del martes

El avance de las obras en la carretera AS-264, que une Arenas de Cabrales y el límite con Cantabria por Sotres, obligarán a realizar cortes de tráfico a partir del martes, día 27 de abril, para el montaje de los elementos prefabricados que conforman la losa superior de las viseras antialudes. Esta operación exige el uso de grúas, plataformas y camiones que ocuparán la calzada. Una vez montados, se procederá al ferrallado y hormigonado.

Los cortes de circulación, que podrían prolongarse hasta junio, se producirán, de lunes a viernes, de 9:00 a 13:00 y de 14:00 a 20:00 horas. Tanto a primera hora de la mañana (8:30 a 9:00 horas), como en horario vespertino (16:30 a 17:00 horas) se dejará paso a autobuses. Además, la vía también se abrirá al tráfico en caso de emergencia.

La Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial reinició de manera escalonada las obras el 25 de febrero, una vez superados los temporales y el peligro de aludes de nieve y piedras.

Las estructuras de protección o viseras que se están construyendo se configuran a partir de pórticos rígidos de cubrición de la plataforma que, a manera de falso túnel, evitan la acumulación de nieve y la caída de piedras en la carretera, permitiendo que estos elementos pasen sobre ella desde la canal de desmonte hasta el talud de ladera.

El Gobierno de Asturias invierte 1,2 millones en esta obra, que da servicio a los vecinos de Tielve, Sotres y Tresviso (Cantabria) y que ya está ejecutada en un 70%. Así, han culminado los movimientos de tierras, consistentes principalmente en excavaciones en roca sana, así como las cimentaciones micropilotadas de las cuatro viseras, cuyos alzados se encuentran también prácticamente finalizados.

En junio, una vez concluidos los trabajos de hormigonado de las losas superiores de todas las viseras, se restaurará el firme y se completarán las labores de revestimiento en piedra, un trabajo artesanal en el que dos cuadrillas trabajan desde noviembre. El objetivo es que la cara vista de las viseras se remate con aplacado de piedra para cumplir con los requisitos estéticos y medioambientales.