
Con el fin de evitar accidentes, personal del Plan de Empleo aumentó la valla protectora, que progresivamente ha ido quedando pequeña pues los visitantes pisan el matorral y pasan al otro lado poniendo en grave riesgo su vida, ya que apenas hay 30 cm de grosor de plataforma fuera de la valla
Es intención del Ayuntamiento, desbrozar un buen trozo de matorral para hacer un gran balcón al Cantábrico y alisar el terreno, librándolo de piedras.
Durante todo el años y, especialmente en verano, esta zona es de las más visitadas del concejo.
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