Omar Pardo: Memorias de una pequeña parroquia rural asturiana

Que habré de preocuparme en actualizar, ya que se trata de un marginal libelo que tengo por ahí sobre la memoria de una de nuestras parroquias, que no es otra que la mía como fácilmente podrán deducir de estos fragmentos, y es que aunque no iba dirigida a ser divulgada, pero un neo-editor de esos promotor de las publicaciones de temática asturiana, pues dice que quiere publicarla puesto que lo expuesto ahí es bastante extrapolable a otras pequeñas aldeas de nuestra Asturias Rural y en fin, que puede ser de interés y todo eso; ya saben.

Pues como me pide que adelante algún fragmento, aquí tienen una muestra de alguno de ellos, pero a ver; que me han dicho que de los más “light” para que ustedes queridos lectores no se me espanten, aunque bueno; según mis apreciaciones son todos bastante “light”, pero en fin, como la masonería siempre vigila, y ya saben que sin su permiso nada es permitido, pues a ver…
Bueno; pues ahí van:

UNO:

-El hábitat es disperso…

- ¡ Qué nivel ¡ “hábitat disperso”… ese concepto tan “snob” es de un máster barato de esos; seguro.
-Bueno… que quieres que diga, que hay un grupo de casas aquí, otras dos allí, y otra sola no sé donde y no todo junto, así lo entendería todo el mundo…

- Y… ¿No se trata de eso?

-Pues no… ¿Cuándo has visto tú que un trabajo de divulgación científica que se precie lo entienda todo el mundo? Eso no puede ser, hombre; no sería serio…

- Bueno; visto así; pero…

- Pero nada…

Que el hábitat es disperso y se aglutina en torno a dos núcleos centrales mayoritarios prácticamente unidos ya, que son los barrios del “Fonduxu” (donde se ubica la iglesia) y Formedera, un poco ladera arriba, en muy favorecida situación,

La Cruz junto al camino que se dirige a la Cuesta de Lue. y más bajo está ya el barrio de Llinares [1]en dirección a Colunga (donde sidra Crespo más o menos ) , La Miyar aunque es una casa sola, La Quintanad e la Cazuela, La Calzada es otro núcleo en la carretera de Pernús cerca ya de Colunga, así como el Mefal o mejor dicho “Los Mefales” pues aunque sólo son tres casas hay el de acá (más cerca de Sales) enfrente de la “Fuente el Pioyu” y el de allá más cercano a Colunga, La Miranda, también en la carretera “vieya” o de Pernús cercano a la fuente que da origen a su nombre, así como el Tarrerón y un poco más allá en la misma dirección “La Venta Peón” cerca ya del Puente la LLorea.

Más altos están Payares, El Castillu, la Quintanilla, la Cerra y Villanueva núcleos prácticamente deshabitados, el Penayu (ya pegando a la Poledura ) , pues la Venta y el Castañeu están en la salida hacia la recta de la “iria” siguiendo ya la antigua carretera de Villaviciosa, la Corraliega encima del bosque Llobones…

- ¡Eh!... quieto ahí, no está la cosa para anexionarse territorios; para eso ya están los sionistas; eso es de Pernús…

- Sí, sí; es verdad, no sé en que andaba pensando…

- Sería en como salir dignamente de este embrollo en el que te has metido.

- Pues sería…

- Eso son barrios habitados o al menos con casas ¿no?...

- Sí, eso es, luego hay muchos lugares con nombres propios, vamos casi todos…

- ¿Por ejemplo?

- Hombre… no pueden mencionarse en su totalidad, pues cada finca por pequeña que sea tiene nombre pero ya que te empeñas entre los más conocidos podemos citar el ya mencionado Pénjamo, La Vega, El Pozón, El Xardín ,El Porbiz, La Rotella, Zafra, Los Cuetos, La Rondiella, La Iría, El Terreru el Pepe, El Prau Colunga, El Forrote, El Charcón, La Fontanina, Llobones, El Sotiellu, Les Llames, El Cubilón, La Burneta, El Fondil, Les Melendreres, El LLibieru, La Caleyona, La Encina, Ceperi, Los Gallones y no sé cuantos más…

DOS:

Lo de hermosas fuentes de aguas puras y cristalinas tampoco lo pongo, porque es una cursilada, pero fuentes buenas sí que hay y aunque muchas sólo citaré las que tienen categoría de manantiales avalados por tradición centenaria tales como la fuente la “Ubridosa” en la parte alta, La Fuente del “Palaciu Telvo” en Villanueva, “La Fuente el regatu” en la Burneta, aunque ésta es de menos categoría que la del “Pioyu” en el Mefal, con aguas de reconocida calidad, La Fuente “La Miranda” en el lugar del mismo nombre, el manantial del “Penayu” y la caudalosa“Fuente el Llau” (del topónimo “llau”.- lago) pegando al río ya en el barrio de Llinares entre otras…

- No es necesario entonces comprar botellas en el supermercado a un precio estratosférico, pues no deja de ser agua…

- Pues no, alternativa si que hay, sí… y buena… lo que ocurre que la gente más joven ni siquiera sabe donde están.

- ¡Que pena!

- Sí.

- Y en cuanto a patrimonio artístico, religioso, recursos etnográficos y eso ¿Cómo anda la cosa?

- ¿Recursos etnográficos?; ¿Porqué llamas a eso recursos?,

- Bueno… pues por los turistas las casas rurales y eso; no deja de ser un recurso.

- Sí, sí, claro, por eso ahora tanto folletito de historia cutre (de los de botón derecho copiar y pegar, para los turistas ya sabes…), que verdaderamente lo que les interesa leer es en la carta lo de merluza a la cazuela, chorizos a la sidra y esas cosas y claro tantas tesis sin financiar por falta de medios, recursos etnográficos, pues vaya…

- Bueno… bueno, retiro lo de recursos hombre, llámalo como quieras ya sabes a lo que me refiero.

- Pues sí, más o menos. El Patrimonio artístico de la parroquia, tanto religioso como civil no deja de tener su interés, no…

- Pues venga…

TRES:

Otra tradición medieval centenaria muy curiosa definitivamente perdida aunque no hace mucho, no en vano pasa el tiempo en balde, era la de ir a pescar al mar pescados de roca.
Esto no sé si se haría también en otras parroquias, pero aquí en Sales desde hace cientos de años, se tomaba antes de amanecer el camino a Luces por la Rasa, andando, pues otro medio no había (claro que al final ya se iba en coche como es natural) con algo para comer en el cesto, cebo, sedal, plomos, que se perdían muchos y unos anzuelos, y al llegar a Luces a veces aún de noche, se iba a un local común que había al efecto (al final era de un particular) en el que cada pescador cogía de unos ganchos puestos en el techo una larga vara de bambú de las muchas que a tal efecto había, encaminándose con todo ello hacia el mar a pescar a caña fija a la zona de Lloreu o la Becerrera [2] que es donde iban normalmente los parroquianos de Sales, en grupo por supuesto, pues era una actividad como casi todas más bien grupal.

Después de pescar todo el día, se ascendía la dura pendiente del acantilado, para regresar a devolver la caña a su sitio y como no tomar unas botellas de sidra, que bien lo merecía lo duro de la jornada.

Bien es verdad que este ritual sidrero a veces con aquello del cansancio y demás duraba hasta altas horas, añádase luego el regreso ya de noche, a “pata” y un poco cargadillo por decirlo suave (y no por el peso de la pesca, aunque algo se pescaba y no como ahora que está esquilmado) y cansado ya el personal y la hora del regreso bien podía a veces acercarse ya al amanecer del día siguiente, añádase a eso que había que dormir algo la mañana, por aquello de recuperarse un poco, y a la tarde preparar con la familia, vecinos o amigos la fritanga, de fresques y delicioses “xulies”, “maragotes” “govitos y algún congriu o pulpucu que siempre caía y ya tenemos aquí un par de días prácticamente sin “facturar” nada… vamos que aventura impensable hoy en día.

Era otro modo de vida, con sus ventajas y sus inconvenientes.

- Sí, más modesto pero con menos estrés que duda cabe. Por cierto eso de de “govitos” ¿Qué narices es? no me suena nada.

- Bueno, no sé que decirte, unos bichos muy raros y feos de color verde y marrón con muchos dientes, pero no me preguntes más porque no sabría traducírtelo al castellano, eso no hay diccionario que lo traiga… no me comprometas.

- Vale.

- También en las grandes mareas de Febrero, Marzo y Abril, se acercaba la gente al pedreru, a coger lo que aquí llaman “arcinos”, o sea erizos de mar eso sí que es traducible, normalmente al pedreru de Huerres, zona de “La Raposera” o a La Isla, no era difícil venir con un “sacu” o dos, así que no había problema para no disfrutar ya a la tarde y al día siguiente de unos arcinos con abundantes culinos de sidra en el llagar o en el portal de casa, en la cocina, no, que se mancha mucho… no vaya a ocasionar esto un lío…

- Para eso tenía que haber buenas mareas ¿no?

- Hombre claro, de las de ciento y pico si podía ser, cuanto más grandes mejor, así se “pulpiaba” [3]algo y a veces caía alguna “andarica” [4]o algún pelonín[5] como el que no quiere la cosa…

- En eso tiene que ver algo la Luna ¿no?

Pues claro, eso y otras muchas cosas, hoy en día suena a cosa de brujas, pero si vas a ver, los ritos paganos, el culto al sol, la Luna, los fenómenos de la naturaleza, etc… eran más lógicos que las posteriores imposiciones bien politeistas y no digamos monoteístas con todas sus liturgias… Existen abundantes ejemplos de que las antiguas civilizaciones realizaban sus prácticas agrícolas acordes con los ritos lunares…

CUATRO:

O la historia de un teniente de la República natural de este lugar, que después de naufragar en el mar Negro a la altura de Sebastopol, en Crimea, se encuentra a los pocos días encarcelado en Odesa por sus propios “aliados” acusado nada menos que de “trotskysta”- o traducido fusilamiento inmediato - en el mejor de los casos - pues aún podía ser peor- que se las apaña para fugarse y llegar como puede a Atenas sin dinero, sin conocer el idioma y sin papel alguno, sin más medios ni ayudas que las de su propio ingenio- que no es poco mérito- y al que encontramos tiempo más tarde ya en la resistencia francesa en un campo de prisioneros alemanes en el que es “mal fusilado” y consigue volver a ver la luz o mejor dicho la oscuridad, saliendo al caer la noche afortunadamente casi indemne de entre un montón de cadáveres abandonados… vamos que bien pudiera tener un libro de aventuras él solito, así que ya ves…

Y por curiosidad ¿Consiguió ese hombre llegar a viejo?

Sihomesí -pues claro… por qué crees que sé yo eso si no.

-Entonces me dirás quien era…

- No puedo

- ¿Y eso?

- Pues eso es que a él no le hubiera gustado. No era muy proclive a hablar de esas cosas…

- ¿Entonces?

- Le pillaría un día tonto, no sé

- O con unos whiskys de más – los dos claro- si es quien yo supongo…

- Bueno; bueno… también puede ser, pero no hablemos más del asunto, así son las cosas y hay que tener un respeto, de lo que sí debemos hablar inevitablemente, es del asunto del aeródromo del “prau Colunga”

- ¡Ah! sí el que hubo ahí cuando la guerra civil…

Y ¿sabes algo de eso?

- Pues la verdad muy poco - aunque es un tema muy interesante para un monográfico, a ver si viendo esto alguien se anima, nunca se sabe – aunque bueno para una referencia sí que hay.

- Bien… bien, pues a lo del aeródromo entonces…

Pues nada, que en este lugar en la zona denominada “Prau Colunga” amplia llanura situada entre el río y el Terrerón o para entenderse por la carretera de Pernús a mano izquierda antes de llegar a la Venta Peón, existió durante la guerra civil española un aeródromo republicano del que se conservan aún aunque en bastante mal estado varios edificios -los llamados cuarteles- que como su propio nombre indica estaban destinados al alojamiento de las fuerzas militares que allí había, pues el personal al que correspondían los trabajos de fortificación y mantenimiento de lo que era toda la infraestructura del campo se alojaba fuera, la mayor parte de ellos en las antiguas Escuelas de la Riera.

Según los investigadores aquí operaron básicamente “chatos” , “moscas” y “Krones” , Fokker según parece [6]

Bueno, y ya…

Y que me dice el Editor, así con mucho miramiento – y es que tal parece que aquí el que suscribe tiene pinta de malo – nada más lejos de la realidad por cierto, que quizá debiera extractarlo un poco, pues sería conveniente que…

En definitiva, que me dice que resuma un poco esta paliza, que es demasiado tocho; y que digo yo que como marginal que soy no tengo por qué andar con componendas demokkráticas, que no; que ni hablar…

En Loja parroquia de San Juan, término municipal de Colunga en el Principado de las Asturias de Oviedo a diecisiete de Enero del años de dos mil y veintitrés del Nacimiento de Nuestro Señor.

¡Que EL nos ampare…!