Omar Pardo: Sobre meritocracia

Nacido el año de 1.906 en la parroquia colunguesa de cuyo nombre no quiero acordarme - eso lo copié de otro libro, eh… - en el seno de una familia católica, muy pronto comenzó a plantearse su vocación de cara a Dios, aunque no abrazó la vida eclesiástica sino que desarrolló una acreditada labor científica iniciada en el Instituto de Linares (Jaén), donde ejerció como catedrático de Física y Química.

Con posterioridad se doctora en el Instituto Rockefeller de Madrid y obtiene brillantemente la Cátedra de Química y Física de la Universidad de Zaragoza en abril de 1942.

Años más tarde, después de largas estancias en centros de investigación europeos, se traslada a los Estados Unidos, donde fue profesor de varias Universidades pasando poco después dada su portentosa capacidad a investigar en prestigiosas Fundaciones privadas y en los más señeros centros de vanguardia científica del momento.

Trabajó también en la Harvard University y en la Columbia University, consiguiendo un contrato en el National Bureau of Standards que le permitió desarrollar su verdadera especialidad en fenómenos de velocidades ultrarrápidas, donde tuvo relaciones con científicos de la talla de Enrico Fermi, o de Raman, el primer premio Nobel de la India.

Independientemente de su labor científica, fue un personaje de grandes inquietudes intelectuales en los más diversos aspectos y muy vinculado siempre a su solar natal, y debido a ello llevó a cabo no pocas investigaciones tanto históricas como etnográficas de hondo calado referidas a su terruño originario, y del más diverso jaez por cierto, pues su nivel cultural era estratosférico, haciendo lo posible por difundirlas – altruistamente cargo de su propio pecunio – en las más variopintas publicaciones al uso.

Sin embargo no fue capaz de ceder – gratuitamente, claro – donar en definitiva tan generosas contribuciones al Municipio que le vio nacer, pues siendo ese su deseo y habiéndolo solicitado humildemente en varias ocasiones – y por escrito además – lo que a este cura le consta por haber sido el intermediario - y no conseguir respuesta alguna ni ser recibido ¿Una pena; verdad…?

Y luego andan dando oricios, fabes de honor y asturcones varios a cantamañanes de medio pelo asgaya que hay por ahí a porrillo, y aún ahora andamos en las mismas.

¿Es que manda cojones, eh…?

En el lugar de Loja, parroquia de San Juan, término municipal de Colunga en el Principado de las Asturias de Oviedo a veintiún días del mes de marzo del año de dos mil y veinticuatro del Nacimiento de Nuestro Señor.

Que EL nos ampare.