Una lacra que no cesa

Todas las semanas se producen daños en el mobiliario urbano municipal y cada vez aumenta la cuantía y la frecuencia. Incluso las carpas del estanque son blanco perfecto para estos ciudadanos tóxicos

Un banco, un columpio al que le marcharon con los tornillos y que a diario soporta las embestidas de un numeroso grupo de chavaletes que ven mayor diversión en romper que en utlizar los juegos como se debe.

La guinda de esta semana se la lleva la mayor carpa koi del estanque, con 18 años y 40 cm. Así aparecía el lunes. rajada por la parte de abajo. Todo en trabajo de saña.