Lo comentábamos hace unas semanas y hoy se ha hecho realidad.

El barrio de Vallín, en Lluces, parroquia de Llastres, ya cuenta desde hoy de una lustrosa plazuela, totalmente asfaltada y que da mucha luz a las casas contiguas.

Hay sitio para aparcar varios coches y se puede organizar hasta una romería.

 

El Ayuntamiento ha pavimentado el solar que dejó la centenaria panera al derrumbarse, panera propiedad de varios vecinos, sobre suelo público.

 

Es una auténtica pena que la administración regional, a través de su política Kultural, no contemple el mantenimiento de estos monumentos, esencia de Asturias, mientras dilapida fondos en proyectos millonarios y poco claros como el Niemeyer, que actualmente está bajo investigación.

 

 

Podría decirse que entre todos la mataron y ella sola se murió. Ahí quedan amontonados los pegollos y la mampostería, que servirán para alguna muria u otra obra de bajo perfil.

 

             

 

A la entrada de Vallín ondea una bandera de Asturias. Dado lo visto creo que ofende más que enorgullece. Asturias se apoya haciendo pueblo y conservando sus señas de identidad, no haciéndolas desaparecer.

 

 

La pavimentación de Vallín se ha completado con el asfaltado del patio de las escuelas de Luces que están rehabilitándose para Centro Social y Capilla. Además se han instalado varios reductores de velocidad por toda la zona, realizados en asfalto, no siendo recomendable pasarlos a más de 30 Kms/hora