Manuel González Orviz sostiene que el gobierno autonómico no dragó esta año el puerto en el mes de mayo como era habitual y la acumulación de arena hace que los barcos pasen al límite o se queden varados, como ayer ocurrió con un pesquero cántabro.

El actual puerto deportivo está considerado como zona de refugio para las embarcaciones pesqueras. Y en este sentido debe garantizarse la apertura de las compuertas del puerto deportivo a la cofradía de pescadores en caso de temporal y no estar pendientes de una decisión administrativa y poner en riesgo, como pasó la temporada anterior, a la flota pesquera. “No pueden quedar abandonados en el puerto deportivo”, dice Orviz en relación a los pescadores.

 

IU cree que debe haber diálogo con la cofradía por parte del gobierno asturiano y acción para solventar estos problemas de acceso al puerto.