Ruta por el bosque de Muniellos

Acompáñanos a recorrer uno de los rincones más puros de la Reserva de la Biosfera de Muniellos: un sendero que parte de Moal y nos lleva entre robles centenarios, cascadas escondidas y hasta una laguna de montaña rodeada de silencio y naturaleza en estado salvaje.

Características de la ruta

Tipo de ruta: Circular
Distancia: 14,74 km
Duración aproximada: 7 h
Desnivel positivo acumulado: 681 m
Altitud máxima: 1.324 m
Dificultad: Media
Punto de inicio: Centro de recepción de visitantes de Moal (Cangas del Narcea)
Interés: Paisajístico, ecológico
Época recomendada: Primavera, verano y otoño
Recomendaciones: Calzado de montaña, bastones, protección solar, agua y algo de comida. Ruta dentro de un espacio protegido: respetar normas y trazado señalizado.

Track

https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/puente-y-cascada-y-laguna-la-isla-desde-moal-207397876?

Descripción de la ruta

El recorrido arranca en el centro de visitantes de Moal, donde se informa sobre la Reserva Natural Integral de Muniellos, considerada uno de los robledales mejor conservados de Europa. Desde este punto, un amplio sendero se adentra entre árboles autóctonos y comienza una subida progresiva paralela al río Muniellos.

Inicio de la ruta

Los primeros kilómetros transcurren por una pista forestal cómoda, en plena sombra y con el sonido constante del agua como acompañante. A medida que ganamos altitud, el camino se vuelve más estrecho y natural, con tramos de piedra y raíces que recuerdan que estamos en terreno salvaje.

Sendero

Una de las primeras paradas obligadas es el pequeño puente de madera que cruza el río, junto al que se forma una cascada de varios metros. Es un rincón perfecto para descansar un momento, sacar fotos y coger aire antes de afrontar la parte más exigente.

Inicio del ascenso a La Laguna

Tras superar el tramo más exigente de la subida, el sendero nos lleva hasta uno de los puntos más especiales del recorrido: la laguna La Isla. A más de 1.300 metros de altitud, este rincón escondido entre las montañas ofrece una estampa sobrecogedora. Rodeada de silencio y naturaleza en estado puro, la laguna debe su nombre al pequeño islote que emerge en su centro, y es la única que puede visitarse en la jornada, debido a las normas de conservación de la reserva. El entorno invita a parar, descansar y contemplar sin prisa: el agua oscura, el relieve cerrado del valle y la sensación de aislamiento la convierten en uno de esos lugares que dejan huella.

Laguna de La Isla

La vuelta se realiza por el mismo camino, pero el descenso permite disfrutar de otras perspectivas del valle, con el bosque abriéndose de nuevo hasta regresar al punto de partida. Una ruta exigente pero muy gratificante, recomendada para personas habituadas a caminar en montaña. Perfecta para desconectar y sumergirse en uno de los espacios naturales más puros de Asturias.