¿AMOR AL CERDO? por Javier de Montini

En tiempos de matanza, hay un refrán que cada año se repite por doquier: "A todo cerdo le llega su San Martín". En Asturias, en bable, decimos que "a cada gochín llegay el su San Martin".

Otro dicho que repiten mucho los que gustan de las comilonas de matanza es éste: "No es amor al cerdo, es amor al jamón". O "es amor al chicharrón", da igual, ¿por qué no? Ya sabemos que del cerdo se aprovecha todo: jamón, lacón, tocino, chorizo, cabeza, orejas, morro, patas, qué sé yo. Y es que del cerdo..."hasta los andares son buenos". 

Rescato el dicho de "no es amor al cerdo" porque, desde hace seis años, el restaurante La Ferrada, de Mariano González Cuesta, en Noreña (Asturias) viene premiando, con una escultura de José Luis Fernández (el de los Goyas), a personalidades destacadas precisamente por la valoración y promoción de los productos del cerdo. 

Vamos que con estos premios PORCOFILOS (amigos del puerco) se premia... ¡el amor al cerdo! Pues bien, este año los galardonados son dos muy queridos compañeros periodistas: Ramón Sánchez-Ocaña y Carlos Maribona. 

Los dos asturianos: Ramón (Ramonín) Sánchez-Ocaña, de Oviedo (n.17/05/1942) y Carlos Maribona, de Avilés, allí están sus raíces, aunque le nacieran en Madrid (28/10/1955). 

Ramón, muy popular por sus escritos, sus libros y sus programas de divulgación de salud en televisión ( recuerden el "Más vale prevenir" de los años 80 en TVE) y en la radio. Carlos Maribona, un sabelotodo de gastronomía, comidas, vinos, sabores, gustos.. que se atreve a decir que el cerdo, por sus sabores, es un" producto esencial" en la cocina. Muy bien premiados. 

¡Mi enhorabuena! (Gracias a Miguel Angel Fuente, cronista oficial de Noreña, por las fotos).