Apoyo a estudiantes online: una tendencia en alza

En las últimas dos décadas, buscar apuntes y trabajos online ha pasado de ser un recurso asociado a estudiantes perezosos y caraduras, a convertirse en un sistema de herramientas útiles para el estudio de millones de estudiantes en el mundo. Es más, a raíz de los cambios introducidos de facto en el día a día de la educación debido a la pandemia, el uso de internet para estudiar ha pasado a ser prácticamente obligatorio.

Sin embargo, la gran cantidad de información accesible y que, siguiendo el ritmo de unos temarios cada vez más extensos, nadie parecer tener tiempo de asimilar, ha llevado a muchos estudiantes superiores al caos. Otro problema importante es que, aunque todos saben (en teoría) buscar en internet, en realidad muy pocos tienen el criterio y los conocimientos suficientes para encontrar información de calidad.

De comprar un TFG a contratar orientación personalizada

Hasta hace unos años, usar internet para aprobar se vinculaba a medios ilícitos: comprar una tesis doctoral, descargarla de otra universidad para dársela a un traductor y presentarla como propia (esto ya se podía hacer incluso más fácilmente antes de internet), vender los apuntes de la asignatura “cayo” de la carrera… Nada era ilegal, pero tampoco legítimo.

La situación llevó a algunas universidades e instituciones a especificar estas prácticas entre las prohibidas en sus normativas, pero internet se siguió utilizando para aprobar como marcaba la demanda y no el claustro docente. De hecho, muchos alumnos de los que hoy encargan su TFG, TFM o incluso su Tesis Doctoral online, argumentan como primera causa para hacerlo que no han encontrado en su tutor la guía y ayuda que necesitaban.

Los blog para estudiantes en los que se pueden contratar este tipo de servicios ya no “venden” trabajos terminados: ofrecen un servicio de atención personalizada con el que se puede comprar desde un texto a una plantilla con la que empezar a trabajar, o incluso asesoramiento a la hora de adaptar un trabajo importante (realizado por el propio alumno) antes de presentarlo ante el tribunal correspondiente. Además, están repletos de pequeñas lecciones prácticas (y gratis) sobre cómo citar, qué software de edición usar, cuáles son las partes de cada tipo de trabajo… Algo que cualquier alumno que busque la excelencia debe saber.


¿Por qué cada vez más estudiantes buscan ayuda online?

La frustración a no saber cómo hacer el tipo de trabajo que se les exige, más que la vaguería, parece ser la motivación que lleva a los alumnos actuales a buscar ayuda con sus estudios online.

En un sistema en el que lo que se necesita para comenzar a trabajar es un título y no conocimientos (eso ya te lo enseñarán cuando empieces) y con un sistema educativo que se niega a adaptarse al mercado, los temarios obsoletos que se deben “vomitar” fielmente el día del examen han dado lugar a alumnos primero desesperados y, a la postre, avispados.