La historia nos dice que el Barça ganará esta liga

El título de campeón de invierno no tiene ninguna relevancia ni se deja ver en las vitrinas de los equipos. Sin embargo, conseguirlo suele ser sinónimo de victoria al final del curso futbolístico, algo que tienen que tener muy en cuenta los aficionados culés.

Lo que dicen los datos

Si se echa un vistazo a los datos de LaLiga desde que los partidos valen tres puntos, lo que sucedió en la temporada 1995-96, ser campeón de invierno significa prácticamente ser el vencedor final del torneo.

Sí es cierto que ha habido excepciones a esta regla, pero son muy pocas. En total, 22 de los 28 campeones que se han coronado desde la temporada que antes citamos lo hicieron como primeros al acabar la primera vuelta.

Es una cifra que no deja lugar a dudas de la importancia estadística que tiene terminar la primera vuelta como primero del campeonato. Por eso los de Xavi Hernández andan en uno de los momentos más dulces de la temporada. Saben perfectamente de la importancia que tiene el haber completado una primera vuelta tan buena y quieren aprovecharse de ello para recuperar un título de liga que no pasa por el Camp Nou desde hace algunos años.

La solidez del campeón

Pero los blaugranas no tienen que estar contentos solo por ser primeros en la primera vuelta. Las sensaciones del equipo lo hacen favorito a todo como puede verse aquí, y es que ahora mismo hay pocas plantillas que estén tan en forma como la que comanda Xavi.

Lo que más llama la atención del grupo es la capacidad defensiva que tiene. Tradicionalmente, el Barça consigue sus éxitos a base de goles y de apabullar a los contrarios con fútbol ofensivo. Este equipo también lo hace, pero sabe protegerse las espaldas de una forma increíble.

En toda la primera vuelta, los equipos solo han conseguido anotar 7 tantos en la meta defendida por Ter Stegen. De estos 7, 3 se recibieron en un mismo partido, el que enfrentó a los azulgranas y al Real Madrid en octubre en el Bernabéu.

Sin duda, es esta solidez defensiva la que está llevando en volandas al equipo. Los Araujo, Koundé o Christensen están demostrando que tienen un altísimo nivel y que completan una de las mejores zagas que se han visto por Barcelona desde hace bastantes años.

En esto se apoya el fútbol preciosista del Barça ejecutado por Pedri, Dembélé o Lewandowski. Mientras el equilibrio no se pierda, el club puede soñar a lo grande y lamentarse únicamente de haber caído demasiado pronto en la Champions, ya que hoy están para competir contra cualquiera.

Vistos los datos, que el Barcelona haya sido campeón de invierno pone el título de liga más a su alcance que nunca. Eso sí, hay temporadas en las que ha habido cambio de líder al final de campeonato, algo que seguro que no quieren vivir los jugadores de Xavi este año.