La temporada de caza ya quedó atrás. Los cazadores descansan y planean una nueva campaña desde la tranquilidad del descanso del guerrero, pero no todos se dedican a limpiar y engrasar escopetas, los hay que ya están con el ‘’fegadín’’ y preparan la próxima emboscada.

 Cuadrilla de caza de Falo Toyos que se va a La Uña
 Cuadrilla de caza de Falo Toyos

La temporada de caza ya quedó atrás. Los cazadores descansan y planean una nueva campaña desde la tranquilidad del descanso del guerrero, pero no todos se dedican a limpiar y engrasar escopetas, los hay que ya están con el ‘’fegadín’’ y preparan la próxima emboscada. En estas faenas encontramos a algunos de los socios del Club Los Llanos de Colunga que están preparando cacería y viaje para Noviembre. Alejandro, Sama, Pata, Rubén y otros cuantos ya contabilizan las piezas que van a cobrar.

Para el mes de Noviembre tienen previsto viajar a tierras de León, a la parte ‘’castellano-leonesa’’ del Puerto de Tarna, en la zona de ‘’La Uña’’ en la Maraña, para participar en una batida de jabalí y lobo,pero al estilo de ´´allá’’, en Montería, es decir, mucho perro, mucha extensión a batir y mucho oficio cazando si se quiere meter ‘’ un daqué’’ en el zurrón.

Por la mañana estuvimos viendo la perra que está criando Alejandro y viendo sus jaulas con palomas y faisanes, de las cuales os mostramos algunas fotos.

 Bellos ejemplares de faisan criados en cautividad
 Faisanes criados en cautividad.

La perrina se llama ‘’Terki’’ es de raza Teckel, de pelo corto, especie ideal para seguir rastros de sangre de animales heridos.

La gran cantidad de individuos de esta raza que se ven acompañando a los aficionados a las monterías hace suponer el tipo de perro que es, ya no sólo en su capacidad de rastreo, sino también como perro levantador o perro de madrigueras. Tenaz, cabezota, facultad ésta necesaria para su trabajo, con gran capacidad olfativa, valentía, a pesar de su tamaño, y con una boca suficientemente fuerte, hacen de este perro junto a su tamaño el perro ideal del cazador de puesto.

En relación a la caza menor, es un perro al cual ayuda su baja sensibilidad corporal a la hora de entrar en los zarzales o las madrigueras, siendo eficaz al batir la liebre, avisando a sus compañeros y jefes de la presencia de la pieza levantada.

En perreras es francamente manejable, siendo una raza de las que denominamos de bajo consumo, ya que come poco, es limpia, no reta en exceso y se hace al grupo social con facilidad. Para la casa es un buen compañero, fiel y cariñoso con los niños, aunque puede llegar a ser obstinado si coge algunas manías en el hábitat tales como subirse al sofá.

 Perrina de raza Teckel, buena para rastro
 Terki, perrina de un año de raza Teckel.

En definitiva, es un perro ideal para el cazador que haga a pelo más que a pluma y montee de vez en cuando. Debemos entender que esta raza es buena para localizar las piezas, pero definitivamente no es buena para portar y traer, aunque algunos individuos lo hagan a la perfección cantidad de individuos de esta raza que se ven acompañando a los aficionados a las monterías hace suponer el tipo de perro que es, ya no sólo en su capacidad de rastreo, sino también como perro levantador o perro de madrigueras. Tenaz, cabezota, facultad ésta necesaria para su trabajo, con gran capacidad olfativa, valentía, a pesar de su tamaño, y con una boca suficientemente fuerte, hacen de este perro junto a su tamaño el perro ideal del cazador de puesto.