Durante todo este fin de semana tienen lugar las tradicionales Fiestas de San Hilarión, recuperadas tras años de olvido, centradas en los barrios de El Carril y Solriberu.

Hoy se iniciaron estas recuperadas fiestas que se prolongarán hasta el domingo.

Han comenzado con Juegos infantiles y una gran chocolatada. Del éxito da testimonio la Galería de Diapositivas que hemos realizado esta tarde y que os mostramos a continuación:

Con respecto a la recuperación de las fiestas populares del concejo, en lo que poco tiene que ver la Kultura oficial colunguesa, -más centrada en otras lides como el TEATRO- y en la que si se vuelcan particulares, entusiastas y entidades como esta web, Colunga tiene para mostrar al exterior a toneladas. 

Por las fiestas de San Hilarión se descendía en Desques el ríu Lliberdón, algo que no se ha podido lograr este año gracias a la burrocracia de la confederación hidrográfica. Esperemos que no sea algo parecido a los patos de San Roque.

MECÁNICA DEL SORTEO DE LA GRAN CAGADA DEL DOMINGO 28

La Gran Cagada del Burru de Chano

BASES DEL SORTEO

Fecha:

Tendrá lugar el 28 de Agosto a las 18 horasr en el prau de LA CALEYONA. Si por casualidad el burru no realiza sus necesidades será aplazado para el día 3 de Septiembre a las 11 horas.

Procedimiento del sorteo:

Se introducirá el burru hasta el centro del prau, y se procederá a su suelta, dejándole moverse libremente por el interior del recinto y nadie le podrá tocar. Finalizará el sorteo en el momento que realice su primera CAGADA.

Apartir de ese ACONTECIMIENTO entrará en acciónel topógrafo Javier Egüen García, de Loroñe, experto en medición de fincas, quien determinará la parcela ganadora, mediante coordenada de longitud y latitud. Si la CAGADA estiviese situada entre dos o más parcelas, serepartirá el prmio entreéstas. (Recordar que con cada papeleta vendida para este sorteo se otorgaba un cuadrante de 1 m/2 aproximadamente, que constituye una parcela).

Comunicación del Premio: El número de la parcela premiada se comunicará al instante y además se publicará en internet en esta página www.buscolu.com

La organización aprovecha para dar las gracias a todos los que les han ayudadao a reanudar las Fiestas de San Hilarión.

Galería diapositivas de les Desques de San Hilarión:

Os dejamos un recordatorio de las fiestas de San Hilarión y el descenso en Desca de nuestro ilustrado colaborador marginadosocial, colungjés sabio como los ratones coloraos auque esto no le guste a la Kultura gubernamental

Descenso del Libardón en desca (Duernu):

"La carrera de desques- Descenso del Río Libardón en desca" (por marginadosocial)

La carrera se celebraba para la fiesta de San Hilarión, a finales de agosto. En esa fiesta también era célebre una gran chocolatada.
 
"En mi pueblo, haciendo de la necesidad una virtud, dado que no teníamos el Sella para realizar el Descenso, organizábamos La carrera de desques. La desca se utiliza en la matanza del gochu para, una vez acuchillado y desangrado, colocar el cerdo y escaldarlo con agua hirviendo para desollarlo.
 
El acontecimiento se celebraba con gran éxito de público que abarrotaba las riberas del río y el puente de llegada. Lo del tren fluvial aún sigue en estudio, más o menos como el del ferrocarril Gijón-Ribadesella. Pero ese es otro tema. Pues, como decía, cuando se acercaba la Fiesta de Les Piragües, pasado el tiempu les chapes llegaba, cómo no, el tiempo de les piragües. Como su propio nombre indica, era el momento de jugar con les piragües. Como no había forma de comprar piragües en el "Todo a cien" que no había en la esquina, teníamos que fabricarlas. Las piraguas que fabricábamos estaban compuestas por tres elementos, a saber, la piragua propiamente dicha, las palas y, obviamente, el palista.
 
Para hacer la piragua había que buscar un trozo de madera grueso y de unos treinta centímetros de largo. La madera no debía estar muy verde por algo que les contaré. La obtención de esta materia prima no solía ser muy dificultosa. Por doquier aparecían pilas de leña cerca de las casas y siempre había algún trozo que valía. No importaba mucho el tipo de madera pero si era de haya o de roble mejor. Se la daba una primera forma muy tosca con el hachu y a partir de ahí aparecía el instrumento estrella: la navaja. En cuanto uno habla de navajas enseguida se piensa en las de Toledo o Albacete. Pero no, nosotros solíamos utilizar otras navajas de gran calidad pero quizás menos conocidas fuera de Asturias: las de Taramundi.
 
Para la forma de la piragua nos inspirábamos en las que habíamos visto hacer en el taller de los Hermanos Cuesta de Ribadesella. Yo tenía la suerte de tener un primo que residía en una vivienda cuyo portal era contiguo al taller de los Cuesta y pasábamos horas viendo hacer piraguas. En aquella época las piraguas aún eran de madera y no de materiales sintéticos como ahora. Tras el pulido y barnizado quedaban preciosas. Por cierto, los Cuesta no sólo eran constructores sino que algunos de ellos fueron grandes palistas y ganaron el Descenso del Sella. También sufrieron en 1952 la aparición de la "pedaliera" a mano de unos palistas italianos. Hasta ese momento los giros los hacían los palistas bogando uno y ciando el otro. Los italianos introdujeron el control del timón con los pies y ganaron el Descenso, pese a que los Cuesta les ganaban terreno en las rectas, según cuenta Sánchez-Ocaña en su libro "Las piraguas" publicado en 1968. (...) una vez tallada la pulíamos; pocas veces disponíamos de papel de lija y lo hacíamos con la misma navaja. Por último, la bañera no la perforábamos sino que únicamente la dibujábamos.
 
 Para hacer palista y pala era otro cantar. En este caso había una materia prima tan ideal como escasa: el palu escoba. Aunque alguna vez se podía "distraer" la escoba de algún vecino, no podía hacerse tan a menudo como se necesitaba. De hecho, nos pasábamos el año guardando palos de escoba. Pero como también eran útiles para otros menesteres competíamos con los adultos y estábamos en una cierta desventaja. El tallado del palista no planteaba ningún problema y en unos minutos estaba listo. Sólo había que tener algo de cuidado no hacerlo larguirucho para no elevar el centro de gravedad de la piragua y tener problemas de estabilidad.
 
Por último, las palas, era quizá el elemento más dificultoso para fabricar. Tropezábamos con el mismo problema que yo, osado dibujante, me he encontrado para dibujar la imagen: las palas no están en el mismo plano sino en planos diferentes que se cruzan con una desviación de 90°. Para mí, que no soy dibujante, me cuesta mucho encontrar la perspectiva para manifestar eso. Pues bien, a la hora de tallarlos el que las palas estuviesen cruzadas añadía alguna dificultad al agarrar el palu escoba y que al tallar una no se rompiese la otra. Ya sólo faltaba ensamblarlo todo. Para ello con un pequeño clavo sin cabeza clavábamos las palas al "pecho" del palista y, por último, clavábamos la piragua a la parte baja del palista. De ahí la importancia de que la madera no estuviese verde, porque entonces al clavarla se resquebrajaría.
 
Y una vez construidas las piraguas, había que ir a hacerlas navegar al Ruxetu (Arroyo de Ribadesella según informa el autor). Cerca del pueblo de mi abuela pasa un río relativamente grande y el Ruxetu es un pequeño arroyo que desemboca en él. Hoy está casi seco pero en aquella época tenía un caudal aceptable. El nombre siempre me gustó. Rugir=Ruxir. Ruxetu=Rugidor.
 
Y es cierto que era un arroyo cantarín. En esos tiempos en casa de mi abuela no había agua corriente y para todos los usos, excepto para beber, había que ir a buscar agua al Ruxetu. Era la primera tarea del día y casi siempre nos tocaba a los pequeños que íbamos encantados. El lugar donde íbamos a buscarla era una zona más profunda que el resto donde el agua remansaba. Luego el arroyo se introducía en un tubo muy grueso, para atravesar un camino,  y salía a una zona más ancha donde el agua se expandía y perdía profundidad. La salida de las competiciones se producía a la entrada del tubo y la llegada era unos cincuenta metros más abajo. Como a la salida del tubo el agua perdía profundidad y rapidez al expandirse, con piedras hacíamos canales para el agua consiguiendo así caudal y velocidad para las piraguas. Además el "circuito" cambiaba de una vez a otra.
 
Este era el escenario de nuestros "Descensos". Pero el Ruxetu era algo más. A veces, cuando levantábamos las piedras para hacer el circuito de debajo salía una trucha o, más veces, una anguila. Alejandro, de quien ya les hablé, no sólo era hábil esguilando a los árboles o disparando con el gomeru, también tenía muchos reflejos con el tenedor. Cuando tocaba ir de pesca al Ruxetu aplicábamos lo de la división del trabajo: uno levantaba la piedra y, si debajo salía una trucha o una anguila, el otro clavaba el tenedor. Alguna que otra merienda se organizó tras una jornada de pesca"

NOTA DE REDACCIÓN:

El Búscolu quiere dar las gracias a la organización de las Fiestas de San Hilarión por su gran colaboración con esta web, algo de lo que han carecido la mayoría de las comisiones del concejo.