Pedro Leal: “Con la conmemoración de los centenarios, el gobierno ha perdido la oportunidad histórica de proyectar la imagen auténtica de Asturias que nos situara en el centro de atención cultural e histórico en toda España”

“Los centenarios están pasando sin pena ni gloria a la vista del desinterés de los adanistas que nunca tuvieron aprecio ni por nuestro patrimonio natural ni por nuestra historia ni por nuestra cultura”

“Asturias sigue sumida en una profunda decadencia que nos sitúa en una divergencia alarmante con el resto de España en empleo, infraestructuras, reindustrialización, financiación autonómica y agricultura, a lo que se debe añadir nuestro declive demográfico”

“Hoy, más que nunca, es preciso cambiar de rumbo, abandonar la senda decadente instaurada por este gobierno minoritario instalado en el Principado desde el año 2012”

“Desde FORO, y en este día de Asturias, reclamamos seriedad, acción, trabajo y compromiso con esta región”

“Asturias merece llegar al destino de la recuperación económica, de la creación de empleo y de la garantía del bienestar; este destino exige un cambio de camino, con reformas profundas frente a decisiones propagandísticas, electoralistas y poco efectivas”

Discurso del presidente de FORO, Pedro Leal, en el Pleno Institucional con motivo del Día de Asturias :

Hoy en esta Junta General, depositaria de la soberanía de todos los asturianos, conmemoramos un año más, mediante este Pleno de carácter institucional, el Día de Asturias, marcado por la coincidencia este año con tres efemérides excepcionsles:

Me refiero a los tres Centenarios que Asturias conmemora en este año 2018, el XIII Centenario del Reino de Asturias, el I Centenario de la Coronación de la Virgen de Covadonga y el I Centenario del Parque Nacional de Picos de Europa. Lamentablemente, son unos acontecimientos trascendentales sobre los que, a nuestro entender, no se les ha concedido la importancia y la atención que requerían, por parte del Gobierno del Principado y del Gobierno de España, perdiendo la oportunidad histórica de proyectar la imagen auténtica de Asturias que nos situara en el centro de atención tanto cultural como histórico en toda España y en el mundo, para que contribuyeran decisivamente a fortalecer el acervo de los asturianos, y para que la celebración de este evento, pudiera dejar para el futuro recuerdos perdurables a las generaciones venideras, fortaleciendo y consolidando la imagen de Asturias a todos los niveles. Nos encontramos sin pena ni gloria en el último cuatrimestre y, excepción hecha de la relevante visita de los Reyes y de la Princesa de Asturias salta a la vista el desinterés de los adanistas que nunca tuvieron interés por nuestra historia, ni por nuestro patrimonio natural ni por nuestra cultura y que han logrado la hazaña de repetir en 2018 lo que Ramón Pérez de Ayala denunció sobre el XII Centenario hace ahora cien años, despilfarrando irresponsablemente otra oportunidad de “meditar profundamente, como reclamaba el autor de Tigre Juan sobre la manera en que Covadonga determina un giro esencial en la historia de España y en la formación del carácter español”.

También nos encontramos ante el último año de la Legislatura para los Parlamentarios que ocupamos los escaños de esta Cámara y para los miembros del Ejecutivo regional que se sientan en la primera bancada. Por eso me gustaría explicar que la presente sesión consiste en una conmemoración antes que una fiesta, y lo manifiesto recordando el pasado histórico, como el de las efemérides que rememoramos, el pasado reciente, y el momento contemporáneo que vivimos, de manera muy especial de nuestro presente, que inexorablemente y por difícil que sea, determinará nuestro futuro. 

Las decisiones políticas concretas que se adoptan en los parlamentos y los gobiernos, tienen efectos concretos inmediatos sobre los ciudadanos, y sobre su futuro. Y en este pasado reciente, Asturias sigue sumida en una decadencia que la empuja cada día a una crisis más profunda, que nos sitúa en una divergencia alarmante con el resto de España, tanto en datos de empleo, como en infraestructuras, reindustrialización, financiación autonómica y atención al campo, a lo que se debe añadir nuestro declive demográfico, con un éxodo juvenil sangrante y un envejecimiento progresivo de nuestra población, circunstancias todas ellas que no alejan del resto de España y de Europa.

Ante esta coyuntura, hoy más que nunca, es preciso cambiar de rumbo, abandonar la senda decadente instaurada por este Gobierno minoritario instalado en el Principado desde el año 2012, donde la voluntad de cambio ha brillado por su ausencia. 

Un Gobierno que empezó la Legislatura sin una hoja de ruta delimitada y transparente que fuera expuesta en este Parlamento y que la acabará con la misma minoría, atornillado a la poltrona, sostenido en ocasiones por sus tradicionales socios de la entente cordial, para que todo siga igual, y que nada cambie, preocupado únicamente en el cortoplacismo de intentar sus sucesivos acuerdos presupuestarios, con más fracaso que éxito. 

Este es el insólito panorama político que vivimos en Asturias, que, conforme a los últimos datos de los centros de análisis económicos publicados, Asturias fue la región con el peor crecimiento nacional entre 2008 y 2017 (-5,3%), lastrada por la caída de su industria que contrasta con la subida en el resto de España. La gravedad del proceso de divergencia de Asturias es escandalosa y  se pone de manifiesto con nada más que observar que es más de tres veces peor que el siguiente, Cantabria (-1,5%), y seis veces peor que el tercero, Castilla La Mancha (-0,8%), mientras en el  resto de España crece, crecimiento que ansiamos para Asturias.

A los asturianos les debemos explicar la verdadera situación en que se encuentra Asturias, es nuestra obligación explicar que no es cierto que estemos enganchados al tren de la recuperación, estamos en su furgón de cola. Y por eso FORO vuelve a reclamar año tras año un gobierno trabajador  al frente del Principado.

Estas cifras estas, y otras, que se suman a los desequilibrios acumulados durante esta larga crisis, a los que, con la llegada de un nuevo inquilino a La Moncloa, añadimos nuevas afrentas desde el improvisado gobierno de España, como es  la discriminatoria y excluyente distribución de la financiación autonómica que margina a Asturias, y que privilegia a otras CC.AA., como son las recientes decisiones del gobierno de Pedro Sánchez de dotar de extraordinarios recursos económicos a comunidades incumplidoras y secesionistas, además de condonar discrecionalmente deudas a otras determinadas Comunidades Autónomas vulnerando los principios constitucionales de igualdad y solidaridad entre españoles y entre territorios, lo que provoca que nuestra región se mantenga situada a la cola en la tasa de población activa, en las proyecciones del PIB, en las infraestructuras  o en el índice de competitividad, y tiene su reflejo en la pérdida de población y el éxodo de nuestro talento formado en este territorio.

Todo ello contribuye a que sigamos manteniendo una situación de aislamiento, una Asturias asfixiada por los impuestos, soportando una presión fiscal muy por encima de su nivel de renta, una Asturias cuya minería echará al cierre este año sino se remedia, cuyo campo está completamente marginado al igual que nuestros pescadores. 

Y todo ello, en medio del cómplice silencio, cuando no a través de excusas pueriles de los miembros del partido que sustenta al Gobierno del Principado, más preocupado en su supervivencia institucional en lugar de cumplir con la misión por la que estamos aquí, que es velar por los intereses de los asturianos

Este, Señorías, es el retrato del deterioro de Asturias, guste o no lo que estoy manifestando; les aseguro que a mi Grupo Parlamentario no nos desalentarán. Este es el retrato de la inacción, frente a la acción que desde FORO no dejaremos de reivindicar nunca. 

Desde nuestra formación política, y en este día de Asturias, reclamamos seriedad, acción, trabajo y compromiso con esta región.

Haríamos bien en aprovechar este tiempo que resta de legislatura para pensar en las generaciones futuras, no sólo en las elecciones del año próximo; tenemos un contrato con los asturianos hasta esa fecha, y en cumplirlo adecuadamente debemos volcar nuestros esfuerzos.

Asturias merece llegar al destino de la recuperación económica, de la creación de empleo y de la garantía del bienestar; este destino exige un cambio de camino, por lo que son necesarias reformas profundas frente a decisiones más o menos efectistas, propagandísticas, electoralistas y poco efectivas. La acción, el trabajo y el compromiso a las que antes aludía, constituyen la única alternativa posible frente a la desidia que es la anti-política pero que a fuerza de repetirse se acaba confundiendo con ella. 

Finalmente y en nombre de Foro, por supuesto, felicitamos a los premiados por las medallas de Asturias y deseamos a quienes nos escuchan, dentro y fuera de esta Cámara, muy particularmente a todos nuestros paisanos asturianos, un Día de celebración pero también de meditación y de reflexión que nos invite y  nos anime a todos a reconquistar Asturias.