Inaciu Iglesias: “COGERSA nos da la razón al demostrarse que subir las tasas no era una necesidad porque tenía –y tiene- recursos más que suficientes para no seguir cargando más a los ayuntamientos”

“Solo un 28 % de la representación municipal votó a favor del presupuesto”

“Se desmonta ahora que la imposibilidad de ampliar el vertedero fue el argumento esgrimido durante años para la construcción de una macroincineradora”

“Después de hablar de 400 millones, ahora sabemos que el nuevo proyecto que se pretende llevar a cabo supone una inversión de ‘solo’ 202 millones”

“La hoja de ruta actual empieza por un millón de euros para redactar un nuevo proyecto de impacto ambiental porque todo lo que se hizo y gastó hasta ahora no vale”

Inaciu Iglesias, en nombre de los alcaldes y concejales de FORO  en la Junta Universal de COGERSA, ha manifestado hoy al término de la reunión del organismo que “el tiempo va poniendo las cosas en su sitio y el apocalipsis va dejando paso a la evidencia. Después de diez años (desde el 2003) subiendo las tarifas un diez por ciento anual -echen cálculos- y de pretender seguir subiéndolas hasta llegar a multiplicarlas por cuatro, la oposición de los representantes de FORO en estos últimos años impidió seguir con esa inercia. En concreto fue a finales del 2012 cuando se interrumpió esa carrera loca. Pero no resultó fácil; las amenazas apocalípticas se hicieron oír en los últimos años a través de sentencias como ‘lo que FORO pretende es una irresponsabilidad, una cobardía’,  ‘el vertedero se va a colmatar en dos años’, ‘la financiación de  la incineradora no es contraria a la ley de sostenibilidad financiera y la incineradora tiene todos los papeles en regla aunque un juez la tumbara por problemas burocráticos’”.

“La primera evidencia”, añadió Iglesias, “es que COGERSA nos da la razón al demostrarse que subir las tasas no era una necesidad porque tenía –y tiene- recursos más que suficientes para no seguir cargando más a los ayuntamientos. FORO proponía la congelación y, aunque no se llegó a ese resultado, se consiguió que la subida fuera solo de un dos por ciento anual. Hoy, más de un año después, quedó perfectamente demostrado que las cuentas de COGERSA no se tambalearon por culpa de ‘esa actitud irresponsable y suicida de esta gente que quiere acabar con todo’ y que incluso los que tomaron esta medida a regañadientes no solo la asumen sino que la pretenden hacer pasar como propia y fruto de su especial ‘sensibilidad para con los tiempos tan duros por los que están pasando los consistorios’”.

“Para los Ayuntamientos y para la sociedad asturiana en general son tiempos duros pero para COGERSA no tanto. De hecho, para el año 2015, los presupuestos de la empresa prevén unos beneficios de más de dos millones de euros. Eso en un presupuesto consolidado de cerca de 37 millones no está nada mal. Muchos ayuntamientos (que son los que pagan estas tarifas) los quisieran para sí. Sin olvidar, además, que se está destinando un millón de euros para la redacción de un nuevo proyecto básico de impacto ambiental para la incineradora. Porque, por si no lo sabían, la incineradora (que este gobierno pretende construir sí o sí) no tiene todavía ningún estudio que analice su impacto ambiental. Y eso es, en definitiva, lo que de verdad nos preocupa a todos”.

Iglesias destacó que “no nos gustan estos presupuestos ni esta subida de tasas. Y por eso COGERSA ve aprobado in extremis su presupuesto para el 2015 sin nuestros votos y con el apoyo únicamente de 28,12 % de los ayuntamientos asturianos (en función de su población). Solo un 28 % votó a favor del presupuesto, mientras que un 29 % de los ayuntamientos votó en contra y un 11 % se abstuvo. El presupuesto salió aprobado entonces únicamente con el 20 % de votos añadidos que supone el porcentaje del gobierno del Principado y que, sumado a los votos afirmativos, hacen un total de 48,12 % y pasan el corte”.

“La imposibilidad de ampliar el vertedero fue el argumento esgrimido durante años para la construcción de una macroincineradora por parte de COGERSA. Esta es otra tesis que se desmonta ahora (sin hacer mucho ruido) asumiendo que el vertedero sigue creciendo. Esa es la triste solución que tenemos encima de la mesa: a seguir llenando el vertedero mientras se siguen improvisando estrategias para llegar a un final prefijado de antemano” subrayó.

“Pero el cambio de actitud más sustancial es el que tiene que ver con la financiación de este macroproyecto. Después de hablar de 400 millones, ahora sabemos que el nuevo proyecto que se pretende llevar a cabo supone una inversión de ‘solo’ 202 millones. De todos es conocido que aquel antiguo proyecto incumplía claramente la ley y así lo dictaminó un tribunal en el año 2011 aunque -eso sí- en el camino se perdieron un millón de euros. El problema es que este nuevo intento de construir la macroincineradora empezó también con ilegalidades. En concreto, por ejemplo, por no cumplir la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera de las Administraciones Públicas. Los representantes de los ayuntamientos de FORO en COGERSA así lo hicimos saber en repetidas ocasiones para encontrarnos hoy con que, por fin, se nos da la razón por la vía de los hechos. Tras consultar a la administración del Estado y pendientes todavía de un dictamen definitivo de Intervención General queda claro que no es aplicable la estrategia de pretender que el endeudamiento de COGERSA, al ser una sociedad de mercado, ‘no afecta a los límites que la ley de estabilidad fija para la administración autonómica asturiana’. Sí, sí afecta y por eso hoy nos enteramos que se corrige nuevamente toda la estrategia de construcción de la macroincineradora: se aparca el sistema de obra y contratación previsto y se opta por ir ganando tiempo con un nuevo esquema consistente en redactar un nuevo y carísimo plan, contratarlo y luego ya veremos cómo lo ejecutamos. Esa es la hoja de ruta actual: un millón de euros para redactar un nuevo proyecto de impacto ambiental, porque todo lo que se hizo y gastó hasta ahora no vale, y luego… ‘ya veremos’” concluyó.