El consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, considera muy positivo el ejercicio realizado esta mañana en las instalaciones de la empresa DuPont, en el Valle de Tamón-Nubledo, en el que han participado unas 300 personas de distintos organismos, instituciones y empresas con el objetivo de comprobar la operatividad del Plan de Emergencia Exterior de la compañía.

Entre otras cuestiones, ha valorado que el operativo haya permitido comprobar la oportuna respuesta de las comunicaciones por radio, dado que la simulación de una caída de la red de telefonía en la zona de emergencia obligaba a prescindir de los móviles. Esta es la segunda ocasión en que se realiza esta prueba en un ejercicio de estas características y el resultado, a juicio de todos los equipos, ha sido muy satisfactorio.

El titular de Presidencia también ha destacado la participación, por primera vez, de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en un simulacro de riesgo químico, lo que ha demostrado la capacidad de integración de sus equipos y personal, así como su perfecta coordinación tanto con el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) como con el resto de implicados. Su intervención en el ejercicio se enmarca en el protocolo de colaboración firmado en abril de 2013 por el Gobierno del Principado y la UME para dar una respuesta eficaz ante posibles emergencias. El documento contempla, entre otras cosas, la realización de actuaciones como la de hoy, que propician la puesta en común de procedimientos operativos.

El simulacro, organizado por el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) en colaboración con los responsables de DuPont Asturias, ha durado algo más de tres horas y ha implicado también a los ayuntamientos de Avilés, Carreño, Corvera y Gozón, la Guardia Civil, la Policía Nacional y Local, personal de DuPont, servicios sanitarios como el SAMU-Asturias o Cruz Roja, la Unidad Militar de Emergencias y responsables de varias consejerías del Gobierno del Principado de Asturias.

La rotura de una línea de cloro ha sido la hipótesis de trabajo. En el simulacro, el accidente generó una nube tóxica que afectó a un total de 20 personas, cinco de ellas dentro de la planta y el resto en el exterior.

Durante el ejercicio, una vez detectada la fuga, la empresa activó inicialmente su Plan de Emergencia Interior a la espera de que llegasen los medios externos tras alertar al Centro de Coordinación de Emergencias. Recibida la alerta en la Sala 112 del SEPA, el consejero de Presidencia activó el Plan de Emergencia Exterior de la empresa, en situación 2, por un accidente de categoría 2. En este nivel se enmarcan aquellos accidentes para los que se prevén como consecuencias posibles víctimas, daños materiales graves o alteraciones graves del medio ambiente en zonas extensas y en el exterior del establecimiento.

Como resultado de las movilizaciones previstas, se constituyó el Centro de Coordinación Operativo (CECOP) en las instalaciones del SEPA en La Morgal, mientras que en las inmediaciones de la factoría, pero en zona segura, se formó el Puesto de Mando Avanzado, desde donde se coordinaron los diferentes grupos de intervención.

Este ejercicio forma parte de los objetivos de la Mesa para la Implantación de los Planes de Emergencia Exterior (PEE) de Asturias, de la que forman parte, además de DuPont Asturias y el SEPA, las empresas Asturiana de Zinc, ArcelorMittal, Fertiberia, ENCE, HC Energía, Industrial Química del Nalón, Repsol, Compañía Logística de Hidrocarburos, Galp Distribución Oil España, Petróleos Asturianos, Alcoa Inespal y Enagás.

La mesa ha colaborado en la implantación de ocho planes de emergencia exterior que afectan a once empresas y trabaja, con la organización de este tipo de ejercicios, en su mantenimiento y revisión.