Las obras de acondicionamiento de la Senda del Oso, para mejorar la seguridad y la confortabilidad de los usuarios, concluirán a mediados del próximo mes de octubre, según ha manifestado hoy en Proaza la consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez durante una visita a este recorrido, a la altura de Caranga de Abajo. La consejería ha invertido cerca de 40.000 euros en este proyecto.

Álvarez ha señalado que la senda, peatonal y cicloturista, es “un emblema de Asturias y un gran reclamo turístico”, y ha explicado que las obras mejorarán la seguridad de un recorrido que presentaba un gran deterioro tras casi 21 años de funcionamiento. “Además, es una de las sendas verdes más visitadas de Asturias y un importante elemento dinamizador de desarrollo de la comarca”, ha añadido.

Además de mejorar la seguridad, la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales persigue con estos trabajos fomentar el uso social de la Red Natura 2000 y de la Red Regional de Espacios Naturales Protegidos.

El proyecto que está a punto de finalizar se inició el pasado mes de julio y consiste en sustituir 1.817 metros de vallas de madera ya deterioradas, que protegen los tramos de mayor peligrosidad. También está concluyendo la construcción de un zuncho de 10 metros de longitud y la retirada del cierre innecesario en 828 metros de tramos en mal estado. Otra de las actuaciones consiste en la sustitución de 550 metros de pasamanos en puentes y pasarelas y en reforzar puentes para la seguridad de los usuarios.

El proyecto de mejora de la senda se completará con el arreglo del firme, una actuación que corresponde a la Dirección General de Cooperación Local, y con los desbroces, que correrán a cargo de los ayuntamientos de los concejos por los que discurre (Santo Adriano, Proaza, Teverga y Quirós).

Las obras de la Senda del Oso se enmarcan en un proyecto más amplio de mejora de los espacios públicos de los parques naturales, monumentos naturales y reservas de la biosfera del Principado de Asturias para que “todas las personas que quieran visitarlos puedan hacerlo en buenas condiciones de seguridad y con una señalización adecuada”, ha subrayado Álvarez.

La consejera ha anunciado que el 15 de octubre concluirán las obras de mejora de señalización vertical de los espacios naturales protegidos. El proyecto consiste en la instalación de 37 señales en las carreteras de competencia del Principado de Asturias, de acuerdo con las características técnicas del Manual del Sistema de Señalización Turística Homologada de la Red de Carreteras del Estado (SISTHO).

“La finalidad de estas actuaciones es promocionar y dar a conocer a los ciudadanos nuestros espacios naturales protegidos y, especialmente, sus valores naturales, culturales y etnográficos”, ha apostillado.

Las actuaciones, financiadas por la consejería, con una inversión de 45.000 euros y un plazo de ejecución de mes y medio, son las siguientes:

    Parque Natural de Las Ubiñas-La Mesa: 17 señales informativas de dirección y carteles de localización.     Parque Natural de Ponga: cuatro señales con carteles de orientación y localización del centro de interpretación.     Reserva de la Biosfera Río Eo, Oscos y Terras de Burón: siete nuevas señales informativas de dirección y carteles de localización.     Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias: siete carteles de advertencia por presencia de osos.     Monumento Natural del Tejo de Bermiego: dos señales de dirección.

A estos trabajos se unen las obras del proyecto de mejora de sendas en los espacios naturales protegidos, que se iniciaron el 22 de junio, con una inversión de 30.586 euros en 60 sendas homologadas que suman 703 kilómetros. Este proyecto consistió en la señalización horizontal con pintura de las marcas reglamentarias, así como la instalación de 42 placas en el Camino de Santiago, en el tramo entre el puerto de Pajares y puente de Los Fierros, a su paso por el concejo de Lena.

 

Por otra parte, la titular de Desarrollo Rural ha manifestado que su departamento está colaborando con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para desarrollar protocolos de actuación en espacios en los que “afortunadamente” cada vez hay más osos.

Álvarez ha afirmado que se están buscando fórmulas que permitan compaginar “la existencia de una especie emblemática aún en peligro de extinción con la vida de los habitantes de los pueblos de zonas oseras y para ello queremos contar con la colaboración de los expertos y disponer de medidas generales en el conjunto del Estado”.

“Es preciso compaginar el atractivo del oso para el visitante con la protección de los cultivos y bienes materiales de los ataques de la especie”, ha señalado.

Además, la consejera considera muy importante “disponer de protocolos para que las personas que se encuentran con un oso sepan cómo actuar, porque se trata de una especie poderosa, salvaje, y es necesario conocer formas de actuación ante estos animales”.