Mil familias residentes en zonas rurales o periurbanas de 58 concejos asturianos recibirán a lo largo de estas semanas su compostadora y la formación necesaria para entrar en el grupo de más de 7.220 hogares que puede realizar la autogestión de los biorresiduos generados en la huerta y la cocina a través del compostaje.

El Consorcio para la Gestión de los Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) desarrolla desde 2009 esta campaña, en cooperación con los ayuntamientos. Se calcula que el número de personas implicadas supera las 22.000 en las seis ediciones organizadas.

Los concejos de Amieva, Onís, Ponga y Riosa se incorporan este año por primera vez a la campaña y repiten los de Aller, Amieva, Avilés, Belmonte de Miranda, Bimenes, Boal, Cabranes, Cangas de Onís, Cangas del Narcea, Carreño, Caso, Castrillón, Castropol, Coaña, Colunga, Corvera, El Franco, Gijón, Gozón, Grado, Illas, Langreo, Las Regueras, Laviana, Lena, Llanera, Llanes, Mieres, Morcín, Muros del Nalón, Nava, Navia, Noreña, Onís, Oviedo, Parres, Piloña, Ponga, Pravia, Proaza, Ribadesella, Ribera de Arriba, Riosa, Salas, San Martín de Oscos, San Martín del Rey Aurelio, Santo Adriano, Siero, Sobrescobio, Somiedo, Soto del Barco, Tapia de Casariego, Teverga, Tineo, Valdés, Vegadeo, Villanueva de Oscos y Villaviciosa.

Esta semana comenzaron las reuniones de formación que llegarán a ser un total de 40 y se extenderán hasta el próximo 30 de abril en los concejos de Gozón, El Franco, San Martín del Rey Aurelio, Gijón y Pravia, En estas sesiones se ayuda a los participantes a conocer las claves de la correcta separación de los biorresiduos y de la técnica del compostaje (triturado, volteado, control de la humedad y los plazos…). Son impartidas por el servicio de Educación Ambiental de Cogersa y van seguidas de la entrega del contenedor especialmente diseñado para este uso, la compostadora, y de un ejemplar de la Guía del compostaje, que fue editada por el consorcio en 2010.

Esta campaña de Cogersa se complementa con una amplia labor de asesoramiento sobre la separación y el compostaje de residuos orgánicos que llevan a cabo los educadores del consorcio y de los servicios municipales con cada hogar participante. El seguimiento consiste en cursos, visitas, atención telefónica y por correo electrónico, encuestas de satisfacción, etc.

 

Cogersa también oferta a los ayuntamientos el apoyo necesario para desarrollar experiencias de compostaje comunitario dirigidas a colectivos de ciudadanos que compartan el uso y explotación de una finca, huerto o zona verde. Este sistema parte del trabajo colaborativo de colectivos vecinales, comunidades de propietarios, usuarios de huertos municipales, asociaciones y otros grupos organizados que se comprometen a aportar los residuos de la huerta, la siega y los biorresiduos domiciliarios (restos de alimentos y otros) a un mismo punto de acopio (una compostadora de gran tamaño) y que planifican también de manera conjunta las tareas vinculadas a todo el proceso (volteo, aportación de restos, control de humedad, etc.).

 

El compostaje es una práctica que permite la autogestión (tratamiento llevado a cabo por el propio productor) de los residuos orgánicos de origen doméstico; preferiblemente los restos de alimentos no cocinados –frutas, hortalizas, verduras- y los restos del huerto, las siegas y las podas.

Se trata de imitar y manejar de forma controlada el proceso natural de putrefacción de la materia orgánica en contacto con el aire. Consiste en mezclar en la proporción adecuada los diferentes residuos biodegradables, voltearlos periódicamente, vigilar la humedad, etc. El resultado final de este proceso de descomposición aeróbica es un producto sólido denominado compost, que posee unas cualidades que lo hacen apto para su uso como enmienda orgánica en el suelo de huertos y jardines a los que aporta mejoras físicas (estructura), químicas (nutrientes) y biológicas (microorganismos).

 

El nuevo Plan Estratégico de Residuos del Principado (PERPA) 2014-2024 prevé aumentar la autogestión de biorresiduos, fundamentalmente a través del compostaje doméstico y comunitario, como método complementario de prevención o reducción de los residuos orgánicos. El objetivo es alcanzar las 12.000 toneladas en 2020, considerando que una familia media podría compostar anualmente entre 250 y 500 kilogramos de este tipo de desechos.

El compostaje consigue reducir el volumen de residuos generados y avanzar hacia el cumplimiento de los objetivos legales que marca la Ley de Residuos y Suelos Contaminados y que ha recogido el PERPA dentro del Programa de Prevención.