El Ayuntamiento de Parres impulsa de la mano de la asociación Emburria un proyecto dirigido a personas que por diversos motivos necesiten una adaptación al medio acuático.
El Ayuntamiento de Parres, a través de las Concejalías de Política Social y Deportes, y con el asesoramiento y colaboración de la Asociación Emburria, ha puesto en marcha el proyecto de adaptación al medio acuático, una iniciativa que tiene como objetivo fundamental la definición de espacios comunitarios inclusivos y la prestación de un servicio de calidad para aquellas personas que necesiten una especial atención para adaptarse a este medio.
En octubre y noviembre del pasado año, profesionales de Emburria ofrecieron formación teórica y práctica al personal de la Piscina Municipal como paso previo al resto de actuaciones. A partir de ahí, se adaptará el espacio físico de la piscina, con señalización de pictogramas que ayuden a las personas usuarias a la comprensión de normas, límites y funcionamiento de la instalación.
Esta semana comenzaron ya las clases de adaptación, dirigidas a menores de entre 6 y 16 años que necesiten un periodo de adaptación previo a la participación en los cursillos que se imparten en la piscina de forma habitual, y que tengan algún tipo de diagnóstico, trastorno del desarrollo o trastorno del espectro autista, así como miedo o fobia al agua. Para ello se crean grupos reducidos, a los que las personas menores se adscribirán a petición de las familias.
La duración de las clases será de una hora, y en ellas se trabajarán tanto la autonomía en los vestuarios como el trabajo dentro del agua.
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