Según se ha podido constatar en el encuentro, los artesanos se muestran sumamente innovadores y preactivos al adaptar la tecnología a sus negocios

Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) están penetrando lentamente en el sector de la artesanía, pero de forma decididamente innovadora por las características de creatividad, personalización y detalle intrínsecas a la actividad artesana. En suma, los artesanos se revelan innovadores y proactivos en el uso de la informática.

Es una de las conclusiones que resultan de la celebración en Llanes del I Taller de Tecnologías aplicadas al Sector de la Artesanía, promovido por el Gobierno del Principado de Asturias, la Fundación CTIC y Fundetec.

Un total de 118 artesanos de distintas comunidades autónomas e incluso llegados de América Latina analizaron y compartieron durante dos días sus inquietudes y experiencias tecnológicas en el primer encuentro de estas características que se celebra en España y con el que han colaborado Oficio y Arte, Organización de los Artesanos de España, la Fundación Española para la Innovación de la Artesanía, el Observatorio d ela Artesanía y el Ayuntamiento de Llanes.

La elevada participación en el encuentro por parte de un gremio tan diverso como es el de la artesanía confirma el interés de los artesanos por introducir las TIC a sus negocios. Han comprobado que su presencia en Internet y el uso de aplicaciones informáticas para la gestión y comercialización es clave para mejorar su competitividad. Uno de los principales éxitos del taller ha sido la exposición de experiencias reales, contadas en primera persona por artesanos que, como Pilar Tirado, ceramista de León, o el Obradoiro de Gaitas Seivane –algunos de los casos de buenas prácticas que se desgranaron esta mañana-, han integrado las TIC en su actividad y pueden certificar sus beneficios.

La labor de sensibilización y difusión tecnológica desde el tú a tú, esto es, de artesano a artesano, es sumamente efectiva con un sector como el de la artesanía, que requiere soluciones muy individualizadas, al ser un trabajo tan personalizado y pormenorizado. El taller no ha dejado indiferente a ninguno de sus participantes. En unos casos, los participantes han podido identificar o vislumbrar en la tecnología soluciones o, al menos, vías interesantes que explorar para elevar su competitividad. En otros, cuando menos, este taller de acercamiento entre la artesanía y las TIC ha permitido constatar que se están produciendo “ciertos cambios mentales, en el sentido de que el artesano está empezando a comprobar que hay procesos artesanales de tipo mecánico y de gestión que puede dejar en manos de la tecnología y, así, ganar tiempo para centrarse en la relación mano-material-oficio.