Adrián Pumares: “Hoy FORO apuesta por la relevancia frente a la irrelevancia; por el compromiso frente al tacticismo; y reafirmamos nuestra promesa fundacional de construir una Asturias que no quiere ser más que nadie, pero tampoco menos”

“Este proyecto de Ley de Presupuestos podría haber supuesto una subida del tramo autonómico del IRPF, y no lo hace porque no se va a apoyar en Podemos para su aprobación”

“Ponemos Asturias en marcha, y garantizamos empezar el año 2020 con Presupuestos, tal y como nos reclaman todas las voces de los agentes sociales y de la sociedad civil”

“FORO antepone hoy los intereses de Asturias a los suyos propios, porque eso fue lo que reclamamos un grupo de asturianos que decidimos hace ya nueve años que la política en nuestra tierra debía hacerse de otra manera”

El secretario general de FORO y portavoz en la Junta General del Principado, Adrián Pumares, intervino esta mañana en el debate del Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Principado de Asturias para el año 2020. Durante su intervención, Pumares afirmó que “este proyecto de Ley de Presupuestos está muy lejos de ser el Presupuesto que FORO traería a esta Cámara, por considerar, a la vista de nuestro Programa electoral, que no responde a las necesidades, no atiende las urgencias y no da una respuesta lo suficientemente contundente a los graves problemas que afronta el Principado de Asturias, y que no hacen más que agravarse con el paso de los años, como demuestran todos y cada uno de los índices que se realizan sobre la economía, la productividad, la demografía o las infraestructuras”.

El portavoz de FORO, no obstante, añadió que “este proyecto de Ley de Presupuestos, reconociendo y denunciando sus múltiples debilidades, mejora sustancialmente el actualmente vigente, al suponer un incremento de la inversión aunque sea modesto; al introducir medidas de discriminación fiscal positiva para el medio rural, claves para atajar el despoblamiento en amplias zonas del Principado; y al incluir cambios en la gestión que mejoran la eficacia y la eficiencia en la Administración del Principado, tan necesitada de ello”.

Pumares insistió por ello en que “hoy FORO apuesta por la relevancia frente a la irrelevancia; por el compromiso frente al tacticismo; y reafirmamos nuestra promesa fundacional de construir una Asturias que no quiere ser más que nadie, pero tampoco menos”, y en ese sentido, expresó que “no resulta fácil, sino todo lo contrario, dejar pasar unos presupuestos que no bajan los impuestos o que no incluyen un plan ambicioso de fomento de la natalidad. Pero cuando uno actúa convencido de que ser relevante es mucho mejor que ser irrelevante, de que favorecer el progreso es mejor que permanecer en una situación de bloqueo, resulta más sencillo. Y hoy tenemos esa convicción”, añadió.

El portavoz de FORO afirmó desde la Tribuna que “la inmensa mayoría de la sociedad asturiana está hoy pendiente de que este proyecto de Ley de Presupuestos pase el trámite y no nos veamos abocados a una prórroga presupuestaria que no traería nada positivo. Toda esa gente que espera por esta Administración para acometer sus proyectos, para continuar con sus actividades o simplemente para acceder a nuestros servicios merece una respuesta. Por eso resulta igualmente inaceptable tolerar tanto intromisiones de órganos que no son más que tertulias de unos pocos amigos como de órganos que desconocen profundamente la realidad de Asturias y que, además, no les preocupa sino más que en campaña electoral”.

Pumares explicó que “este proyecto de Ley de Presupuestos podría haber supuesto una subida del tramo autonómico del IRPF, y no lo hace porque no se va a apoyar en Podemos para su aprobación”. Por eso, añadió, “ponemos Asturias en marcha, y garantizamos empezar el año 2020 con Presupuestos, tal y como nos reclaman todas las voces de los agentes sociales y de la sociedad civil”. El secretario general y portavoz concluyó recordando que “FORO antepone hoy los intereses de Asturias a los suyos propios, porque eso fue lo que reclamamos un grupo de asturianos que decidimos hace ya nueve años que la política en nuestra tierra debía hacerse de otra manera”.

Texto íntegro del discurso de Adrián Pumares

Gracias Presidente,

Buenos días señorías,

Buenos días señores del Consejo de Gobierno

Nos enfrentamos hoy, una vez superado con éxito el pasado jueves el debate de enmiendas a la totalidad, al pleno donde los distintos partidos nos decantaremos por la aprobación o por el rechazo del Proyecto de Ley de Presupuestos. Un debate que, más allá de unas pocas enmiendas que pueden adherirse al proyecto, no tiene –o al menos no debería tener– la trascendencia del anterior pleno; porque no parece sensato que en unos pocos días los partidos cambiemos de opinión respecto a la conveniencia o no de rechazar un proyecto de Ley de Presupuestos.

Resulta curioso, además, ver cómo numerosas enmiendas parciales, que parecen sensatas y llenas de sentido común al ver el texto de la enmienda y la justificación de la misma, se convierten en un auténtico disparate cuando se comprueba el crédito que se procede a dar de baja, imposibilitando el voto favorable a la misma por muy de acuerdo que se esté en la importancia de dichas partidas. Y esto, Señorías, es lo que pasa en numerosas enmiendas que se van a votar en el día de hoy; conviene trasladarlo a la opinión pública. Curioso resulta también ver cómo sobre una misma partida se aplican numerosas bajas en diferentes enmiendas, como si los recursos con los que cuenta el Presupuesto fuesen infinitos, o se pudiesen estirar como un chicle.

Estas actitudes son nefastas porque, además de ser un mero trámite de cara a la galería, empañan aún más la ya de por sí mala percepción que la ciudadanía tiene estos días del trabajo de las instituciones y de quienes les damos vida, como es nuestro caso como parlamentarios de esta Junta General. Esta práctica de “enmiendas fake”, que no esconden una intención real de mejorar el Presupuesto sino simplemente de trasladar un mensaje fácil, en el mejor de los casos, o crear falsas expectativas, en los peores,  muestran con claridad que el pleno de hoy no se toma lo en serio que se debería. Intencionalidad al margen, algunas de estas enmiendas pueden ser producto, tal vez, de la celeridad y el poco tiempo disponible para hacer un análisis riguroso del proyecto de Ley de Presupuestos. Sirva también esta observación para instar al Consejo de Gobierno a presentar antes, cumpliendo con los plazos, el proyecto de Ley más importante del año, como es el de Presupuestos.

LA IMPORTANCIA DE QUE ASTURIAS TENGA PRESUPUESTO

Dejando las formas y entrando ya en el fondo del debate presupuestario, quiero remarcar cuatro cuestiones de las que ya dejé constancia el pasado jueves, en el Pleno de enmiendas a la totalidad:

Los partidos políticos en general, y los diputados que conformamos esta Junta General en particular, tenemos la obligación de ser honestos con la ciudadanía, pero sobre todo con nosotros mismos. Por muy cómodos que nos sintamos en la discrepancia, por muy bien que nos desenvolvamos en la crítica fácil, por mucho que destaquemos en el conflicto, todos tenemos el deber de ser honestos. De poder mirar a los ojos a los asturianos diciéndoles que anteponemos sus intereses a los nuestros y a los de nuestros partidos. Ninguno de los grupos que conformamos esta Junta General suscribiremos este presupuesto al 100%; seguramente ni tan siquiera lo haga el Partido Socialista, que de contar con mayoría absoluta nos hubiese presentado un proyecto sustancialmente diferente.

Pero todos somos conscientes, Señorías, y también los que el pasado jueves presentaron o apoyaron enmiendas a la totalidad, de que Asturias necesita Presupuestos. Lo son también los agentes sociales y la sociedad asturiana, que nos reclaman, con razón, la búsqueda de acuerdos.

Nadie puede discutir que Asturias debe empezar el año con Presupuestos, y nadie puede discutir que estos Presupuestos son mejores que los actualmente vigentes.

LA IMPORTANCIA DE LA BÚSQUEDA DE ACUERDOS

Nos encontramos ante la Junta General más plural de toda la democracia. Nos sentamos en esta cámara siete grupos parlamentarios, que somos muy diferentes entre nosotros y entre los que resulta muy complicado encontrar puntos de acuerdo.

Yo fui, además, parte activa en la reforma del Reglamento de la Cámara que permitió que todos los partidos políticos con representación contasen con Grupo Parlamentario propio. Lo hice convencido de que la discrepancia, la pluralidad y la confrontación política no solo no son algo negativo, sino que enriquece el debate público y favorece que la clase política conecte con la sociedad a la que tiene el deber de representar.

Pero para que la pluralidad política que tenemos en esta Junta General no entorpezca la vida de los asturianos; para que la clase política no seamos vistos como parte del problema sino como una solución, no podemos enrocarnos en posiciones de máximos. Repito lo que dije el pasado jueves: debemos de ser conscientes, todos, los partidos políticos y cada diputado a título individual, del límite que lo posible impone sobre lo óptimo. Debemos ser conscientes, en palabras de Cánovas del Castillo, de que «la política es el arte de aplicar, en cada época de la Historia, aquella parte del ideal que las circunstancias hacen posible».

Ya conocemos sobradamente las consecuencias que las posiciones de máximos tienen sobre el día a día de los ciudadanos, sometiendo a las instituciones a una situación de bloqueo insoportable con consecuencias directas sobre la creación de empleo, sobre la generación de riqueza o sobre el pago de las pensiones a nuestros mayores. ¿Queremos para Asturias la estabilidad que nos permita la búsqueda y la adopción de soluciones a nuestros problemas, o preferimos anteponer nuestra comodidad y trasladar la inestabilidad en la que algunos se sienten cómodos también a las instituciones del Principado, empezando por esta Cámara? Esa, y no otra, es la pregunta que tenemos que responder aquí hoy; porque es la pregunta que nos está haciendo la sociedad, y en voz cada vez más alta, mientras agotamos su paciencia.

Alcanzar acuerdos, buscar el consenso y ceder en nuestros planteamientos tiene un coste, naturalmente que lo tiene. Pero cerrarse en banda, enrocarse y dar un portazo a cualquier concesión que permita que nuestra región siga avanzando, también lo tiene. Es nuestra responsabilidad transmitir la importancia de la búsqueda del consenso, evitando posiciones y planteamientos que fomenten la demagogia, el cortoplacismo o que apelen a los más bajos instintos.

Hay ejemplos concretos de la importancia de no tener miedo a acordar. Pongo uno, que no es el único: estos presupuestos incluyen una partida destinada al Saneamiento del Valle de San Jorge en el concejo de Llanes, que inicialmente no estaba prevista y que se incluyó después de la primera reunión que mantuve con miembros del Consejo de Gobierno.

No resulta fácil, sino todo lo contrario, dejar pasar unos presupuestos que no bajan los impuestos o que no incluyen un plan ambicioso de fomento de la natalidad. Pero cuando uno actúa convencido de que ser relevante es mucho mejor que ser irrelevante, de que favorecer el progreso es mejor que permanecer en una situación de bloqueo, resulta más sencillo. Y hoy tenemos esa convicción.

En FORO concurrimos a las elecciones del mes de mayo dejando meridianamente claro que íbamos a pactar sin líneas rojas, sin guetos ideológicos y anteponiendo los intereses de Asturias a los intereses propios; acudimos a las elecciones poniendo como ejemplo de la búsqueda de acuerdos lo que se hizo en el Ayuntamiento de Gijón durante ocho años, donde se alcanzaron acuerdos importantes con grupos afines y con grupos diametralmente opuestos. Esa es la política que reivindica FORO: la política útil a la sociedad, que entiende las diferencias como una virtud sobre la que construir, y no como una trinchera desde la que disparar al enemigo.

En FORO nos constituimos y crecimos como un partido político con vocación de acuerdos; a diferencia de otros, jamás aceptaremos intromisiones o imposiciones de aquellos que desconocen nuestra realidad y nuestros problemas, haciendo gala de un sucursalismo inaceptable que ha sido y es, por cierto, germen de gran parte de los males que asolan al Principado de Asturias. No me perdonaría que, por abandonar esa voluntad de diálogo o por hacer caso a quienes poco se interesan por los problemas de esta tierra, Asturias empezase el año 2020 con unos nefastos presupuestos prorrogados.

Estoy convencido de que la inmensa mayoría de la sociedad asturiana está hoy pendiente de que este proyecto de Ley de Presupuestos pase el trámite y no nos veamos abocados a una prórroga presupuestaria que no traería nada positivo. Toda esa gente que espera por esta Administración para acometer sus proyectos, para continuar con sus actividades o simplemente para acceder a nuestros servicios merece una respuesta. Por eso resulta igualmente inaceptable tolerar tanto intromisiones de órganos que no son más que tertulias de unos pocos amigos como de órganos que desconocen profundamente la realidad de Asturias y que, además, no les preocupa sino más que en campaña electoral.

¿Cómo, a la vez que defendemos la importancia de la inversión como medida anticíclica y generadora de actividad económica, vamos a forzar una prórroga presupuestaria en lugar de permitir que entren en vigor los Presupuestos que cuentan con mayor inversión desde el año 2011? ¿Cómo, después de traer una Proposición No de Ley a esta Cámara y de defenderlo en campaña electoral, voy a preferir que se prorroguen unos malísimos presupuestos en lugar de empezar el año con unos que incluyen las primeras medidas de discriminación fiscal positiva para el medio rural? Seguro que es posible elaborar un argumentario para defender todas esas posturas, porque el papel lo aguanta todo; pero me parece tan incoherente que difícilmente podría defenderlas yo.

Y si coincidimos, que seguro que lo hacemos, en que una prórroga presupuestaria de unos muy malos presupuestos sería un auténtico drama para Asturias, ¿qué alternativa proponemos? ¿Acaso pretendemos instar al partido en el Gobierno a que alcance un acuerdo presupuestario con los partidos a su izquierda para así subir los impuestos? Porque las enmiendas que presenta Podemos, especialmente en materia impositiva, no dejan lugar a dudas del modelo de Presupuesto que ellos quieren: quieren una Asturias donde se paguen más impuestos y que, por tanto, sea menos atractiva al talento, a la creación de empresas y a la generación de riqueza. ¿Queremos eso para Asturias? Ya les adelanto que yo, desde luego no.

LA IMPORTANCIA DE FORO

Alejados de este sucursalismo insoportable e inaceptable que tanto daño ha hecho a Asturias, y de esas posiciones tacticistas de máximos que anteponen el bloqueo a la búsqueda de soluciones, me alegro de que FORO se reivindique hoy como el único partido asturiano que no se somete como una marioneta a las decisiones de sus distantes dueños de Madrid o de Barcelona, que no actúa como una sucursal. Me alegra que FORO anteponga los intereses de Asturias a los suyos propios, porque eso fue lo que reclamamos un grupo de asturianos que decidimos hace ya nueve años que la política en nuestra tierra debía hacerse de otra manera. Hoy, más que nunca, me alegra que en FORO no tengamos que rendir cuentas ante nadie cuyas órdenes haya que acatar por decreto, sino que lo hagamos únicamente ante los asturianos y las asturianas, como debería suceder con cualquier fuerza política democrática y constitucional.

Hoy ponemos Asturias en marcha, y garantizamos empezar el año 2020 con Presupuestos, tal y como nos reclaman todas las voces de los agentes sociales y de la sociedad civil. Es un clamor que las instituciones dejen de estar secuestradas por amargos debates políticos que no producen nada más que brechas cada vez más anchas y difíciles de salvar. Hoy apostamos por tender esos puentes. Apostamos por la relevancia frente a la irrelevancia; por el compromiso frente al tacticismo, y reafirmamos nuestra promesa fundacional de construir una Asturias que no quiere ser más que nadie, pero tampoco menos que los demás.

Y, Señorías, si el precio que hay que pagar por ello es la descalificación personal y la mentira por sistema, porque a algunos no les queda nada más que aportar, lo asumo con gusto.

Asturias bien merece el esfuerzo.

Muchas gracias.