Carmen Fernández: “El Consejero de Empleo engañó a los trabajadores de Soft Computing provocando la nulidad del ERE y la reposición de los trabajadores a una empresa que ya fue liquidada”

“La Sentencia es un nuevo varapalo judicial al Gobierno Socialista y su Consejero, que no podía legalmente hacer el ofrecimiento, pues tenía que saber que la Administración a la que pertenece le iba a negar la posibilidad de cumplirlo”

“Es un escándalo este flagrante atentado de Francisco Blanco contra la buena fe negociadora de los trabajadores que condujo a la declaración de nulidad del ERE”

La diputada de FORO  y portavoz de Economía en la Junta General, Carmen Fernández, a raíz del debate suscitado esta mañana en el Pleno respecto al Plan de Ciencia y Tecnología 2013-2017, en el que se abordó la situación suscitada por Soft Computing, manifestó que “la reciente Sentencia de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia  de Asturias de fecha 29 de marzo de 2016 determina que el Consejero de Empleo, Industria y Turismo, Francisco Blanco, engañó a los trabajadores de Soft Computing, quienes aceptaron poner fin al periodo de negociaciones por una promesa realizada por el Consejero a sabiendas de que era imposible cumplirla, lo que provocó la nulidad del ERE y la reposición de los trabajadores a una empresa que ya fue liquidada”.

 “La Sentencia es un nuevo varapalo judicial al Gobierno Socialista, patrono en la Fundación, cuyo Consejero de Empleo obtuvo con su compromiso la aceptación de los trabajadores, y que no podía legalmente hacer el ofrecimiento, pues tenía que saber que la Administración a la que pertenece le iba a negar, a través de la Intervención, la posibilidad de cumplirlo” afirmó Carmen Fernández, quien añadió que “el Consejero no tiene la más mínima vergüenza ni respeta en absoluto a los trabajadores, pues ante el Pleno de la Junta General, el 10 de marzo de 2016, reconoció públicamente el compromiso adquirido de afrontar el pago de indemnizaciones anunciando en su turno que la Intervención General imposibilitaría asumir el pago”.

En opinión de Carmen Fernández, “las manifestaciones del Tribunal son espeluznantes y recogen las actas de las reuniones con la representación de los trabajadores, a los que les indicaron que el ERE venía motivado por la revocación de subvenciones del Principado  de las ayudas 2013, 2014 y 2015 del Programa de Asturias y que apresuraban el ERE porque primaba liquidar a los trabajadores antes de que los Patronos -entre los que se encuentra el Principado de Asturias- incurriesen en responsabilidad personal”, y declaró que “FORO registró en noviembre de 2015 una solicitud de las actas de la entidad, habiendo incumplido de forma reiterada el Gobierno con la obligación de facilitarlas, por lo que la Mesa de la Cámara tuvo que llegar a expresar su protesta al Gobierno. Ahora entendemos la motivación de esta ocultación, pues viene a acrecentar la opacidad y el oscurantismo habitual del Gobierno de Javier Fernández”.

La diputada de FORO incidió en que “la actitud del Consejero, engañando a los trabajadores con promesas que la Intervención imposibilitaría cumplir como bien sabía, llegó a ser tan invasiva en la negociación que la Sentencia del TSJA determina que se mantuvo en contacto con el abogado de la Fundación durante la última reunión de la negociación del ERE y pidió ponerse al teléfono con uno de los representantes de los trabajadores, ratificándole la propuesta que determinó que los trabajadores aceptaran el acuerdo”.

 Estos hechos son, a juicio de la portavoz de Economía  de FORO, “objeto de un lapidario dictamen en la sentencia del Tribunal Superior de Justicia que afirma literalmente que:

‘El Consejero, que a la postre obtuvo con su compromiso la aceptación de los trabajadores, no podía legalmente hacer el ofrecimiento, pues tenía que saber que la Administración a la que pertenece le iba a negar, a través de la Intervención, la posibilidad de cumplir. Ese compromiso sin esperanza de ser materializado produjo el efecto de un engaño a la parte social, que aceptó poner fin al periodo de negociaciones sobre la base de una contraprestación asumida por quien conocía de antemano la imposibilidad  de cumplir lo que iba a acordar’”.

Carmen Fernández aseguró que “es un escándalo este flagrante atentado de Francisco Blanco contra la buena fe negociadora de los trabajadores que condujo a la declaración de nulidad del ERE. Y más grave es que con Soft Computing cerrada y liquidada en plazo récord mientras en el juzgado se discutía esta cuestión, los trabajadores no pueden dar cumplimiento a lo ordenado en la Sentencia de reincorporarse a sus puestos de trabajo”.

“Una vez más, se evidencia la inoperancia e ignorancia temeraria del Gobierno de Javier Fernández y sus miembros, de los que, si tuvieran algún mínimo de dignidad política, asumirían alguna responsabilidad”, concluyó Carmen Fernández.