Cristina Coto: “El gobierno de Javier Fernández debe abordar de forma inmediata el colapso sanitario de los enfermos renales crónicos”

“Las unidades están saturadas incluso con turnos de madrugada, por lo que es urgente abordar el análisis pormenorizado para la adopción de medidas adecuadas en los tratamientos de los pacientes”

“Estos tratamientos sólo desaparecen mediante el trasplante de riñón, de modo que resulta de capital importancia la necesidad de impulsar las donaciones, máxime cuando Asturias ha pasado del cuarto al séptimo puesto en el ranking autonómico de donaciones de órganos”

“Impulsar un programa de prevención de enfermedades renales, facilitar información, orientación, asesoramiento y asistencia a los enfermos del riñón, y elaborar un programa de dotación de medios suficientes a las unidades de diálisis, han de ser prioridades de la Consejería”

La presidenta de FORO, Cristina Coto, alertó esta mañana sobre un problema que se cierne sobre la Sanidad del Principado de Asturias, el que hace referencia a la insuficiencia renal crónica terminal. “El gobierno de Javier Fernández debe abordar de forma inmediata el colapso sanitario de los enfermos renales crónicos”, manifestó. “En Asturias, más de 400 enfermos renales se someten a hemodiálisis, y otros 130 que se dializan en su domicilio, mediante la denominada diálisis peritoneal. En los últimos años hemos asistido a un aumento de la demanda de estos tratamientos derivada del envejecimiento poblacional y del aumento de la esperanza de vida, lo que propiciará un aumento progresivo en los próximos años sin que por parte del gobierno del Principado se haya previsto un plan frente a esta situación”.

Cristina Coto advierte de que “las unidades están saturadas incluso con turnos de madrugada, por lo que es urgente abordar el análisis pormenorizado para la adopción de medidas adecuadas en los tratamientos de los pacientes”. En este sentido, aportó algunos datos como que “las áreas sanitarias de Gijón, Mieres y Langreo han llegado a máximos de ocupación. En referencia al Área sanitaria V, el Hospital de la Cruz Roja de Gijón, con 80 pacientes y 10 máquinas de hemodiálisis, ha establecido un cuarto turno de madrugada para paliar la saturación, que obliga a los pacientes a recibir su tratamiento de once de la noche a cinco de la madrugada, con las consecuencias familiares, sociales y laborales que esto implica. En las Cuencas Mineras la saturación es manifiesta, funcionando a dos turnos con 24 pacientes, pero con pacientes desplazados a recibir tratamiento en Oviedo. En el Área II las dotaciones son mínimas en relación al número de pacientes, pues sólo existen cuatro camas que no pueden afrontar el aumento de la presión asistencial, lo que se une a la dificultad de desplazamiento a otros centros desde el Suroccidente asturiano”, relata.

Ante este estado de cosas, “es evidente –comenta Coto- que las soluciones planteadas ante la saturación pasan por el establecimiento de turnos adicionales, que en muchas ocasiones no satisfacen a los pacientes, que tienen que acudir de madrugada. Esta medida debería tomarse de forma excepcional, especialmente cuando existen otras posibilidades de atajar la saturación a corto plazo, como el aumento de las máquinas y personal, especialmente en centros infradotados, como el Hospital de Cangas de Narcea o en el Hospital Valle del Nalón”.

Y en todo caso, “frente a las soluciones cortoplacistas, debe procederse a un análisis profundo de la diálisis y del tratamiento de las enfermedades renales atendiendo a las recomendaciones de profesionales y pacientes”, añade Cristina Coto.

La presidenta de FORO indica que “estos tratamientos sólo desaparecen mediante el trasplante de riñón, de modo que resulta de capital importancia la necesidad de impulsar las donaciones, máxime cuando Asturias ha pasado del cuarto al séptimo puesto en el ranking autonómico de donaciones de órganos”.

“Impulsar un programa de prevención de enfermedades renales, facilitar información, orientación, asesoramiento y asistencia a los enfermos del riñón, y elaborar un programa de dotación de medios suficientes a las unidades de diálisis, han de ser prioridades de la Consejería”, concluye Cristina Coto.