“Todos los ayuntamientos que han instalado estos sistemas arrastran deudas millonarias y sus datos demuestran que este tipo de servicios son inviables sea cual sea su forma de gestión”

El concejal de FORO Asturias, Pelayo Barcia Castañón, ha advertido hoy, en declaraciones a los medios, que “estimamos que el sistema público de alquiler de bicicletas eléctricas tendrá un coste anual de, al menos, medio millón de euros para EMTUSA, que se sumará a las tradicionales pérdidas millonarias y a las extraordinarias por la situación de pandemia que vivimos”.

“El mero hecho de que el concejal de Movilidad presente este sistema públicamente, con todo lujo de detalles (número de bicicletas, estaciones, horarios, tipos de tarificación, etc), y a lo único que no responda sea a preguntas sobre el coste del servicio para el presupuesto municipal debería ser motivo suficiente para su reprobación pública, porque significa que algo oculta”, ha reprochado Pelayo Barcia.

El edil forista ha afirmado que “todos los ayuntamientos que han instalado estos sistemas: Madrid, Barcelona, Londres, San Sebastián, entre otros, arrastran deudas millonarias y sus datos demuestran que este tipo de servicios son inviables, independientemente del tipo de gestión elegida (directa o concesión privada) y del tamaño del municipio”.

“Revisados otros ayuntamientos, -ha explicado- las pérdidas rondan los 2.000€/año por bicicleta, por lo que si Gijón tiene previsto contar con 250 bicicletas es fácil estimar que se perderá sobre medio millón de euros anuales. Seguramente el Gobierno anunciará una cifra menor al inicio, pero luego, el paso del tiempo obligará a hacer alguna aportación especial para garantizar el servicio, algo que ha sucedido en todos los casos. El caso más sangrante es Madrid, que tuvo que pagar durante el mandato de Carmena 15 millones de euros para rescatar el servicio ya que lo concesionaria perdía 300.000€ al mes (10,5 por la municipalización y 4,6 por otros conceptos). Barcelona, igualmente, arrastra una deuda de 12 millones, Londres 200 millones de libras y San Sebastián estima su coste en 200.000€/año con la mitad de las bicicletas eléctricas que Gijón. Gijón va por el mismo camino ya que ha anunciado un contrato de diez años, lo que es una garantía para que, en poco tiempo, en cuanto la empresa vea que el negocio no es viable, EMTUSA tenga que hacer un desembolso millonario para indemnizar al concesionario cuando vea que el servicio no es viable, lo mismo que sucedió con Soccerworld pero a mayor escala”.

Ahondando en el asunto, Pelayo Barcia ha informado del proceso sufrido en Madrid, bajo el gobierno de Ana Botella, “que empezó en 2014 con 1.560 bicicletas eléctricas públicas de alquiler y abonaba a la empresa 2,3 millones anuales de canon y aun así todas las noticias de por aquel entonces decían que la concesionaría cogió el contrato a la baja. De hecho, años después fue rescatada, por el gobierno de Carmena, porque perdía 300.000€ al mes y se tuvo que hacer cargo el Ayuntamiento, pagando casi 15 millones por recuperar la concesión”.

“Los desastres en la gestión de este tipo de servicios no atienden a colores políticos sino a concejales que no tienen los pies en el suelo y que no saben lo que cuestan las cosas, caso del Sr. Martín, y desde luego, este tipo de servicios si no es viable en las grandes ciudades lo es menos en ciudades como Gijón. Da igual que gobierne la izquierda, la derecha, da igual que el servicio se municipalice o se externalice, no es viable y generará deudas a todos los gijoneses”, ha apuntado.

“Por todo ello, -ha anunciado- desde FORO Asturias exigimos que este sistema no se ponga en marcha o que, al menos, las estaciones y las bicicletas tengan patrocinios privados para minimizar las pérdidas como ocurre en algún Ayuntamiento (Boadilla del Monte obtuvo 150.000€ del Banco Santander)”.

Además, Según Pelayo Barcia, “las pérdidas que desde el ‘minuto 1’ se generarán en estos servicios, se sumarán a las pérdidas millonarias que ya arrastra el servicio de autobuses, que este año ascienden a 6 millones”.

“Los servicios públicos deben ser diseñados para llegar a la máxima mayoría de personas y este, sin duda, no es el caso ya que está pensando para una minoría que disfrutará de un servicio que pagaremos todos los gijoneses”, ha destacado.

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