ESCRITORES COLUNGUESES

Referencia a escritores colungueses (De la parroquia de Sales)


LITERATURA
ESCRITORES COLUNGUESES: D. Sixto Sánchez Lorenzo.

Hace bastante tiempo ya, estando de oyente en la presentación de un libro de un amigo y a la vez compañero mío Comandante de Infantería (asturiano de Avilés) en el Centro Cultural de los Ejércitos – popularmente conocido como “El casino militar” en la Gran Vía Madrileña, me comentó al final del acto que cómo es que no le había comentado nada sobre la novela publicada hace tiempo ya de un escritor de mi pueblo, y que precisamente tenía que ver en cierta manera sobre su ensayo que versaba sobre ciertos aspectos comunes a las Revoluciones liberales burguesas.
¿Escritor de mi pueblo le pregunto? Sí en efecto, me responde sabiendo que a mí me interesa de manera especial la historia de mi localidad natal.
Y ¿quién es el autor y de que obra se trata?
Un profesor de la Universidad de Granada: Sixto Sánchez… no sé qué... ¿Le conoces?
¡Cómo no! Le respondí al instante, pues claro que lo conozco Sánchez Lorenzo…y vecino mío de la parroquia colunguesa de Sales, pues claro. Y entonces recordé que el verano pasado alguien me había comentado algo sobre ese asunto.
Pero claro, verano vacaciones, familia y cierta vida relajada, el caso es que ahí quedó pendiente el asunto y cosa rara para mí tratándose de un tema local, se me olvidó por completo, o sea que lo primero que pude y pude al día siguiente, fue hacerme con un ejemplar y lo que es mejor: leerlo.
El título prometía: “EL AMANTE DE LA REINA” y la temática también pues mirando por arriba hablaba de Stefan Zweig, y de un personaje muy conocido para los amantes de ese periodo histórico: Ni más ni menos que “Hans Axel von Fersen” hijo del Mariscal de Campo Fredrik Axel de Fersen, y nieto de Hans Reinhold Fersen, asesinado en 1810 en Estocolmo y cuyo retrato atribuido a Niclas Lafrensen puede verse en el Museo del Prado sobre el título:

“ Hans Axel von Fersen, conde de Fersen” adquirido a los famosos herederos de Arturo Perea y Prats.

Así pues que nada, tan sólo quedaba leerla, que fue como a primera vista parecía lo más placentero.

Poco nuevo les diré que la crítica unánimemente no haya dicho ya: Tirando del hilo de Stefan Zweig, el autor descubrió que este conde sueco no sólo había mantenido un amor indestructible con María Antonieta pero verdadero y nada frívolo por cierto y que como es de prever influyó de una manera sino crucial, sí muy importante entre las relaciones diplomáticas de Francia y Suecia en la época de las Revoluciones liberales burguesas.

La novela arranca en 1810, cuando el gran mariscal Hans Axel von Fersen está a punto de morir a manos de un populacho enfebrecido, en las calles de Estocolmo, víctima de un complot político. La proximidad de la muerte le hace rememorar los instantes decisivos de su vida, los cuales coinciden con los momentos estelares de la historia europea del siglo XVIII: su viaje iniciático a los catorce años, los primeros amores y amoríos; su amistad con María Antonieta; su participación en la guerra de independencia norteamericana; la Revolución francesa y cómo organiza la fuga de los reyes abortada en Varennes… 

Enfrentado a la certeza del fin de su mundo y el nacimiento de una nueva “Era”, su confesión revela las claves de una época contradictoria, de profundo cambio, y su intimidad nos sumerge en unos tiempos y acontecimientos cruciales para la historia de Europa y el mundo.
Y su mayor virtud es dibujar de tal forma cada paisaje, cada olor, cada escena que parece que la sutileza con que se recrea el lenguaje de la época, el cuidado con que se manejan los detalles históricos, ya sean nimios o relevantes, la facilidad con que las palabras revelan los estados de ánimo, el acierto y la verosimilitud con que cada personaje, principal o secundario, aparece descrito, acaban envolviendo al lector de tal forma que siente verdaderamente que el autor de esas líneas es el propio Axel von Fersen.
Para conseguir tal efecto sin perder un ápice de respeto por los hechos reales novelados es necesaria una cuidadosa documentación histórica, como la que acredita la novela
Pero cualquier lector por poco avezado que sea comprende enseguida que eso no es fruto de la casualidad pues uno de los pilares básicos de la calidad de la obra, es en mi opinión el enorme, trabajo de investigación y de documentación en la que a cada paso se apoya la narración y evidentemente al profundo conocimiento de la época histórica que debe tener un autor para acometer con tal brillantez una obra de estas características, pues nos encontramos no sólo ante una extraordinaria narración sino ante todo un tratado de historia contemporánea.
No queriendo pecar de cansino, simplemente, insistir que quien se enfrente a “EL AMANTE DE LA REINA” no se va a encontrar una narración al uso tipo de lo que ahora mal llaman novela histórica que inundan los quioscos y librerías que cualquiera escribe en un santiamén y que salvo honrosas excepciones son un producto de marketing como dicen ahora de infumable calidad ,no nos confundamos , se va a encontrar con una obra magnífica, muy elaborada y con mucho trabajo detrás que no necesita estar plagada de descripciones cursis, frases grandilocuentes ni mucho menos de diálogos reiterativos innecesarios cansinos o personajes inverosímiles, una obra seria y de muchos quilates; no…en fin , que privarse del placer de leerla es un inmenso error… pero ya se sabe… errare humanum est o al menos eso dicen…

Omar Pardo Cortina