Más de 3.000 personas que perciben rentas mínimas (salario social básico o ingreso mínimo vital) recibirán formación digital dentro de un proyecto pionero en España, diseñado para reducir la brecha tecnológica, que cuenta con una financiación de 7.335.892 euros de fondos europeos. El presidente del Principado, Adrián Barbón, y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, han presentado esta mañana en Oviedo el convenio que permitirá la puesta en marcha de esta iniciativa en febrero.

El proyecto piloto Conect-AS: itinerarios de inclusión social digital en el Principado de Asturias se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y se desarrollará en todos los municipios de la comunidad. Está concebido para impulsar la formación digital de personas que se encuentran en riesgo de pobreza o exclusión social, con el fin de proporcionarles las herramientas y los conocimientos necesarios para que puedan acceder a información en internet y realizar también gestiones telemáticas ordinarias.

Se trata del programa más ambicioso para combatir la exclusión social por falta de formación en las tecnologías digitales que se ha llevado a cabo hasta ahora en Asturias y contempla cuatro líneas esenciales de actuación:

La impartición de los diferentes itinerarios correrá a cargo de educadores e integradores sociales. También participará personal de apoyo seleccionado entre las personas beneficiarias del salario social básico. Por su parte, la empresa Tragsatec, perteneciente al grupo Tragsa, se encargará de la formación y de otras labores inherentes a la ejecución del proyecto.

 

El proyecto piloto comenzará el próximo mes con la selección de participantes, que se prolongará hasta junio. La previsión es que los itinerarios formativos se inicien en septiembre en todos los concejos.

Durante el estado de alarma se evidenciaron las dificultades de la población para efectuar trámites de forma telemática, no solo por falta de equipos, sino también por la carencia de habilidades en aspectos clave como la identificación digital, el uso de dispositivos electrónicos o la comprensión de conceptos básicos para gestionar solicitudes o presentar documentación en línea. Este proyecto pretende capacitar a las personas beneficiarias de rentas mínimas y ofrecerles herramientas para abordar estas actuaciones de un modo eficaz.