Omar Pardo: Los Balbín de Lue

Más de una vez les he indicado que este nuestro solar durante el Antiguo Régimen y un buen trecho del Régimen Liberal fue prácticamente una finca de un reducido grupo de linajes y Casas Armeras de la Nobleza Local, personificados en un muy reducido grupo de familias muy cohesionadas e internamente endogámicas a fin de mantener su privilegiado status.

Era la más principal sin duda la de Los Cobián de Las Casas de Loja, primus inter pares de un elitista grupo cuyo poder fue omnímodo durante siglos, siendo las más renombradas, Los Isla de Gobiendes, Los Lue y Los Riega de Lastres, Los Caveda de Lue, Los Frera, posteriormente Frera- Conlledo y los Carrandi de Sales, Los Argüelles de Colunga, y los Balbín de Lue que es la que nos ocupa entre otras.

Si bien la mayoría de ellas jamás se movieron de su ubicación hasta la consolidación del Régimen Liberal, por razones obvias, pues las estructuras de poder habían cambiado, y drásticamente en algunos casos, lo que hizo que a partir de ahí la salida de segundones y segundas filas de familias de rancio abolengo abrazasen sobre todo la vía americana a fin de mudar una situación que se les avecinaba harto adversa.

Así pues, eso no ocurrió por norma general hasta que los ruidos de 1789 y las salidas de tono de los neo-ilustrados locales empezaron a pregonar sin tapujos ya la nueva situación que se avecinaba.

No es el caso de algunos de ellos como Los Frera y Los Balbín que aquí nos ocupan, puesto que estos linajes siempre se caracterizaron por su amor a la aventura y la búsqueda de nuevos soles – parafraseando a Góngora – allí donde hubiera oportunidad para ello, y claro, lo de LAS AMERICAS era como no lo idóneo; o que les vino Dios a ver, que viene a ser lo mismo.

Y como prueba de ello ya en época bien temprana tenemos noticias de un vecino de Lue, llamado Cristóbal de Balbín, hijo de Pedro de Balbín y María González de Mesa

”Vecino de la Pola de Colunga que es en las Asturias de Oviedo”

según reza en La Casa de Contratación de Sevilla en la Armada de Don Pedro de Alvarado, y estamos hablando del siglo XVI, el año de Nuestro Señor de 1.538 ni más ni menos.

Ya casi un siglo más tarde (1.635) tenemos noticias de D. Pedro de Balbín y Busto también oriundo de la parroquia colunguesa de Lue, aunque nacido en Villaviciosa ya por matrimonio de su padre con la maliaya María del Busto, que ocupó el importante cargo de Corregidor del Potosí y del que se tienen fidedignas noticias de sus innumerables andanzas, algunas de las cuales casi mejor obviarlas.

Ya con posterioridad, nada que no se sepa del ilustre personaje aludido ya por aquí varias veces, que no es otro que D. Lorenzo Antonio de Granda y Balbín, hijo de Juan de Granda de Lastres y Doña Catalina Balbín de Lúe, que antes eran la misma cosa, que sirvió valientemente en la Real Armada, así como en los Ejércitos de Flandes, Cataluña y Navarra, destacándose bravamente en las guerras húngaras contra el turco y en la toma de Belgrado en 1.688.

En América fue Alcalde mayor de las minas de Pamplona en La Nueva Granada así como Capitán General de la provincia de Santa Marta, hasta que en Mayo de 1703 el rey Felipe V lo nombró gobernador de Costa Rica, cargo del que tomó posesión en mayo de 1.707 habiéndolo ejercido interinamente hasta entonces D. Diego Herrera de Campuzano.

Y como ejemplo de hace cuatro días tenemos ya noticias de D. Cipriano de Balbín natural de Lúe, emigrante a la República Argentina a finales del XIX, que fue el padre de D. Ricardo de Balbín, fallecido en 1.981, y que fue un destacado abogado e intelectual que fue en su día el Jefe de La Unión Cívica Radical y candidato a Presidente de la República en cuatro ocasiones encabezando el azote parlamentario al Peronismo imperante a consecuencia de lo cual fue en su día encarcelado.

En fin, que todo eso y un poco más pueden consultar en mi última diatriba que será publicada en breve, y que bajo el título: HIDALGOS Y CABALLEROS COLUNGUESES alcanza ya la quinta entrega con las peripecias de los hijos más preclaros y renombrados de nuestro solar. Solo tienen que reservar 25 € de su saca a tal fin, que no es mucho, ¿No…?

¡Pues eso!