Alternativa Verde EQUO denuncia hipocresía y malversación en la gestión de residuos en Asturias

Los Ayuntamientos asturianos actúan con hipocresía y malversan el dinero público en materia de residuos. Mientras el Consejo de Administración de COGERSA aprueba líneas de ayudas para implantar la recogida separada de materia orgánica, luego los propios Ayuntamientos no se acogen a esas ayudas y no tienen recogida separada de materia orgánica. Y malversación porque han construido las instalaciones para luego no darles uso.

En relación con la aprobación en COGERSA de la aplicación de ayudas por un millón de euros para la implementación de recogida separada de residuos orgánicos, desde Alternativa Verde por Asturias EQUO quisiéramos hacer algunas apreciaciones.

Según la RAE la hipocresía es la cualidad de fingir sentimientos o cualidades que, en realidad, contradicen lo que verdaderamente se siente o piensa. Eso es exactamente lo que pasa con los Ayuntamientos de Asturias en materia de residuos. Dicen una cosa y hacen la contraria. Resulta indignante por ser reiterado y además nos aboca a recibir sanciones por no afrontar la responsabilidad de la adecuada gestión de residuos.

Los Ayuntamientos conforman la mayoría del Consejo de Administración de COGERSA, que lleva varios años aprobando una línea de ayudas cercana al millón de euros anual para implantar la recogida separada de materia orgánica. Pero resulta que luego los propios Ayuntamientos no se acogen a esas ayudas y no tienen recogida separada de materia orgánica.

Según datos de COGERSA, solo unos pocos Ayuntamientos se acogieron en años anteriores a las ayudas y ningún municipio tiene implantada la recogida separada en todo su territorio. Es más, no pasa de una docena los que aportan materia orgánica separada a las instalaciones de COGERSA. Ni siquiera los edificios públicos tienen instalada en muchos casos la recogida separada de ningún tipo.

El hecho de que los concejos no superen en ningún caso el 25% de tasa de reciclaje y que incluso algunos no lleguen ni al 5%, no es más que la constatación del absoluto fracaso de la política de residuos en Asturias. Pero que no lleguen a 10 los municipios que hacen algún tipo de recogida separada de materia orgánica es ya algo propio de análisis judicial, donde seguramente acabe.

La necesidad de la recogida separada de materia orgánica viene nada menos que de la Ley de residuos de 2001, que marcaba como objetivo reducir en un 65% la materia orgánica en vertedero para el año 2016; sin embargo en ese año en Asturias ni siquiera existía recogida separada en ningún sitio y seguía yendo todo al vertedero. Pero lo peor de todo, muestra de esa hipocresía y bipolaridad, en COGERSA ya hay una planta de compostaje de materia orgánica en funcionamiento desde 2003 y una planta de biometanización desde 2013. Evidentemente esas costosas instalaciones están "muertas" de risa porque los ayuntamientos, todos, no hacen sus deberes y no han hecho la recogida separada.

Por tanto estamos también hablando de malversación de fondos públicos ya que construyeron instalaciones a las que luego no dieron uso. Y no olvidemos que la responsabilidad de la recogida y gestión de los residuos domésticos y comerciales es responsabilidad de los Ayuntamientos, no de COGERSA ni del Principado.

Si a eso añadimos que no se podrán cumplir los objetivos de reciclaje de 2020 y que además se está perdiendo uno de los principales nichos de empleo verde, propio de la economía circular que hace años se está implantando en Europa, nos encontramos también ante una grave irresponsabilidad.

Como aportación al debate, Alternativa Verde por Asturias EQUO presentó hace ya seis años una propuesta de Plan de Residuos al entonces gobierno de Asturias y a todos los grupos con representación en la Junta General del Principado. En ese documento recogíamos una serie de propuestas destinadas a que Asturias diera cumplimiento a las exigencias legales, como son:

La aplicación de medidas siguiendo las premisas de la jerarquía de residuos.

El cumplimiento de los objetivos propuestos en la legislación vigente.

La eliminación de residuos orgánicos en vertederos.

El avance en la transformación hacia una sociedad comprometida con el concepto “residuo cero”.