El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) ha denunciado la ausencia de medidas efectivas por parte del Gobierno del Principado de Asturias en la conservación del oso pardo, alertando del incremento de muertes de ejemplares y del riesgo que afrontan las poblaciones en la región.
El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) ha hecho pública una denuncia en la que advierte del abandono de la conservación del oso pardo por parte del Gobierno del Principado de Asturias. La organización recuerda que, desde el inicio de la democracia, la protección de esta especie había sido una línea constante de las administraciones regionales, pero sostiene que en los últimos años se ha producido un retroceso en las políticas aplicadas.
Según FAPAS, durante el mandato del actual presidente Adrián Barbón se ha registrado un aumento notable de osos muertos y una falta de iniciativas para prevenir los conflictos entre la fauna silvestre y las actividades humanas. En concreto, señalan que no se han puesto en marcha medidas para evitar los daños que el oso causa en los colmenares de montaña, a pesar de la existencia de soluciones técnicas que permitirían compatibilizar la actividad apícola con la presencia de esta especie.
La asociación asegura que ya en la primera legislatura del actual gobierno remitió un informe a la Dirección General del Medio Natural en el que exponía actuaciones destinadas a prevenir daños de fauna salvaje, sin obtener respuesta. Desde entonces, critican, la gestión de la biodiversidad se ha orientado hacia la “indiferencia y la ausencia de medidas”, centrada únicamente en autorizar controles sobre la fauna silvestre.
FAPAS también recuerda que en anteriores mandatos se utilizó al lobo como elemento de confrontación en el medio rural, generando un conflicto social que, a su juicio, se mantiene en la actualidad. La organización sostiene que existen métodos eficaces para reducir la presión de la fauna salvaje sobre explotaciones agrarias y apícolas, pero que no se están aplicando por parte de la administración autonómica.
Como ejemplo de estas soluciones, FAPAS cita su campaña de protección de colmenares, mediante sistemas de defensa que evitan ataques de osos a las colmenas. Imágenes recientes difundidas por la asociación muestran a un oso acercándose a un colmenar protegido en Asturias, sin llegar a causar daños gracias a la eficacia del dispositivo.
Con esta denuncia, la entidad conservacionista reclama la puesta en marcha de políticas activas de conservación que permitan garantizar la coexistencia entre la fauna silvestre y la población rural, preservando al mismo tiempo la supervivencia del oso pardo en Asturias.
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